Poemas de introspectíon

Ser poeta es muy difícil;
lo digo porque lo soy;
yo sé siempre adonde voy
y no creo que sea tan fácil.

Le dicen loco al poeta
cuando comienza a inspirarse;
pero esas pobres personas,
¿de quiénes van a burlarse?

Loco me dicen a mí
porque hago poesías..
¿por qué no las hacen ellos?
¡Qué me dejen solo así!

Loco fue el Libertador,
liberó cinco naciones;
fruto de locas pasiones
fueron Bolivia, Ecuador..

Loco fue insigne Colón;
y aunque tonto le dijeron,
descubrió un gran continente
y a España dio gran nación..

Locos, por fin, muchos otros,
músicos, grandes atletas;
Lord Byron, Byrd, Napoleón..
y ¡hasta los pobres poetas!

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Apariencias,
no se sabe nada, sólo caminos
en hojas transparentes
huellas invisibles
están marcados.

De corazón y mente libre
la ciencia del amor aparte
volar como una mariposa
sobre los campos de flores.

No hay noche más,
Brillo de las estrellas en las nubes
caminos de apertura acanalado
por debajo de nuestro pez.

Estoy seguro de que sabes,
en la reunión de las aguas
al amanecer
Rutas verdes.

04.04.216

BASTA YA.

Hoy ahogo el llanto,
del penoso he implacable silencio,
porque me encuentro sola,
en el irremediable juicio aterrador,
ya no hago falta a la desinteresada,
sombra del engaño,
cuando oteo, sigilosa al enemigo,
o al descuido vengador de conveniencia,
que prefiero, el cubil de mi acecho escondido,
cuando la flama perdida del sol se inclina,
basta ya, de afligimientos traidores,
basta ya, de compasiones farsantes,
basta ya, de mendigar su cariño,
hoy ahogo mi llanto,
ese llanto que lastimoso me arrulla,
y de cansancio me duerme,
basta ya, si no viene,
a mi alma entristecida,
porque ya, ha edificado su vida,
en la arista de otros brazos.

Mónica Lourdes Avilés Sánchez.

Derechos Reservados.

Buscaré el camino gris
que las flores ocultaron
pues guardan el recuerdo
perdido de su mirada,
solo asi lo despojare
de impurezas y al fin lo escupire
en el silencio de esta mañana.

Ya no me queda esperanza, y
tu ya no haces falta!

Tu presencia me costo mis amores,
y con torturas pagaré esos errores
que destrozaron los pensamientos de las flores.

Y veo desde lejos esos
ojos impavidos que miraron con
incertidumbre a las
almas perdidas por el desconsuelo
y la angustia de ver morir un
jardín de ensueño...

No quiero recorrer
el sendero, pero es la única
salida para mis pensamientos...
Y al llegar al final con
mi cordura te habias escapado y
ya no se que mierda hago!

Te haz robado todo de
paso y ahora solo me
quedan mis manos.

El paso de los años
extingue las miradas
Cercenándonos el alma
Con la carne aun en llamas.

Que los años pasan… dicen…
¡No!... Todos se quedan
En alforjas retorcidas
Doblándonos las penas.

A la memoria asoman
Remembranzas gemebundas
Mientras, nos, cargamos los escombros
De aquello que fue asombro.

El consuelo queda
Es, que todo se termina,
Así como la vida
También se irán las penas.

Escuchamos las historias, de los pocos
Amigos que nos quedan; mordida
Nuestra propia historia grita…
¡ay… por qué dejé que partiera!

Ni siquiera fotos quedan
Apenas el recuerdo… que se aleja
De aquellos años mozos
De encuentro y despedida.

Delalma
Martes, 17 de abril de 2012

He de perderme
donde la quieta luna mira,
con ojo amarillento,
donde la fría hoja
su filo relampaguea
en furioso abanico
salpicando rubíes,

He de perderme
sin ruta en el camino
donde la brújula se turba
y las estrellas temerosas
se esconden,
temor al gesto sin disfraces,
al rostro sardónico

He de perderme,
enajenado, hastiado
de lo absurdo, de lo vano,
en el plano cósmico
surrealista que engulle
el aprendido criterio,
vacío de fundamento

He de perderme,
en la profundidad
del laberinto espongiario,
de la mente donde
los pensamientos
son ecos de recuerdos,
de cobardes vidas,

He de perderme,
para lograr sentir,
para liberar el claustro,
para parir un pensamiento
que me permita morir
sin el temor que deja,
el mediocre inopinado fracaso

He de perderme
en el oscuro infierno
de mi locura,
para estar ausente
de la realidad que malogra
mi coherencia y mi presente ...
He de perderme

Catriel Cuestas Acosta
creado 01/05/2013

Si distinguiese luz mi difuso alegato.
Si como en nieve impulsara su trineo
en culto como ameno, amén sintético,
ágil desplazamiento de vívido relato.
Si lograra acertar del insensato
confuso mapa austral de mi ajetreo,
(que admito yo infeliz, afín poético)
su retórico juicio y rumbo exacto
que apunte con criterio y tino claros,
sin duda, tú, me leerías con anhelo.

Pero no: me disperso, me distraigo.
Contienden entre sí mis perros épicos
y se desbandan obtusos cual arteros,
dejándome en lo intrínseco varado,
trizando hielo tentando pescar ‘algo’
que jamás logro a pesar de mi desvelo.
Y torno con el único motivo, mi consuelo,
de atesorar al fondo de mi iglú letárgico,
cual complemento literario y mágico,
las esplendencias del cantar ajeno.

DESPIADADA AGONÍA.

Volaras por amor hasta tu lid,
para arrebatar cuanta pena te aqueje,
grita al mundo, cuando la gore te atrape,
para arañar sin tribulaciones tu integridad,
cuanto has amado, cuanto,
que la tirana y despiadada agonía,
te permita, desvanecer el orgullo disfrazado,
oh temor descabellado,
que la verdad no te duela y aprisione,
huye, huye de todo aquello y aquel que lastima,
no vivas sujeta a un protocolo obligado,
que la disímil educación no sea culpable,
de tu triste derrota, avergonzada,
que los murmullos poco te importen,
mujer salva tu vida de la violencia,
del sufrimiento de tu calvario.

Mónica Lourdes Avilés Sánchez.
D.R.

¿Dónde te ves esta noche Silueta?
En el infinito del cielo, caminando.
Tras rejas de castigo,
sin luz ni abrigo, llorando.
En el útero del tiempo,
en posición fetal, dormitando.
En frente del mar,
corazón muerto, soñando.
En la horca del espacio,
la imagen del amor, cortando.
En el aislamiento del silencio,
de mi enemiga presencia, fugando.
En el dolor de la depresión,
las fuerzas internas, desplomando.
En el manicomio,
meciendo mi cuerpo, delirando.
En el costado de un ataúd,
yacida sin vida, descansando.

EN EL CANDOR DE UN COLOR



En este paseo de plácida quietud,
donde los sueños se hacen realidad
- imposible percepción del alma-;
donde los murmullos se mezclan con tu voz
y con el sabor de la ternura los siento;
una brisa me lleva a ninguna parte
dejando el presente prisionero del ahora.

Son mis manos, abrazadas por el viento,
las que sienten la belleza del instante;
las que llevan entre sus dedos,
-memoria de pasión-
tu nombre envuelto de emoción.

Mis pies de tanto vagar cansados ya,
los que abandonados a la suerte del camino,
van siguiendo la estela de un pasado,
en esta senda pintada de esperanzas.

Es mi alma, oquedad insondable,
– tantas veces cara oculta del lamento-
la que habla en su silente estar,
la que ilumina mis días
dejando, prueba intangible de su grandeza,
todas las respuestas escritas
en el candor de un color.

(jpellicer)

Se encuentra mi vida,
en el umbral dorado del Otoño,
donde se cosechan los frutos, malos o buenos,
de las semillas sembradas,
a lo largo del camino.

Otoño, donde la llama de la pasión,
sigue encendida... sigue viva,
pero el calor intenso y volátil del Verano...
...ha menguado.

Estación, donde al igual que exquisita fruta lozana,
tienen los besos, dulce y grato sabor a miel,
pues el tiempo sabiamente,tambien los ha madurado.

Tiempo, donde los árboles, soltarán sus hojas,
y el primaveral bullicio
de los polluelos en en el nido,
se tranformará en agrio silencio,
al estrenar sus alas y volar,
dejando el nido vacío.

Pero, aún en el Otoño,
el buen viento, cualquier atardecer,suele traer,
un soplo de brisa fresca y ligera,
que satisfece el alma y renueva el corazón,
haciéndolo sentir, de nuevo en Primavera!!

Claudia Alhelí Castillo
01-07-12

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Sueños,
fusión
Búsqueda por áureo de los vientos
en busca de tus pensamientos.

Caminaba, mientras caminaba
caminos distantes
tratando de encontrar
MOSS atrapado
vestidos de noche para rosas.

Buscando ver hasteasse
color de las flores
en ritmos acelerados
en las esquinas de los ruiseñores.

En marcha de dos pistas
flujos de techos,
Tribbles que caigan.

Semillas dispersas
brillar como las estrellas.

En cielo azul-blanco
Gotas de miel!

26.12.215

Ltslima.

Una Navidad de paz, amor, salud
que sus estrellas manten brillante
a cada pie.

La vida está llena de héroes y de mendigos,
Mendigos de amor y de miradas simples,
De abrazos fuertes cuando sientes miedo.
De palmadas en la espalda para poder seguir,
Mendigos de promesas y de dioses idos.
De palabras en silencio, de gritos en la obscuridad.
Héroes del futuro, donde el pasado y el presente ya no están Héroes de batallas, de heridas dejadas por el tiempo.
Heridas de una guerra, que deja huella en tu corazón
Que templan la piel y te endurecen el alma
Son la sinrazón que no se entiende, héroes
De lo que ya no existe, mendigos de lo que jamás volverá.

Por Conrad Augusto Sehmsdorf

[img width=300]https://www.ecestaticos.com/imagestatic/clipping/2bf/6c5/2bf6c5d784fe32e019ca75dcb14e67a6/un-sin-techo-dio-el-poco-dinero-que-tenia-a-una-chica-en-apuros-asi-se-lo-pago-ella.jpg?mtime=1511452816[/img]

TU QUE NO TIENES NOMBRE.

Tú que no tienes nombre,
Pasa y escucha mi clamor,
despierta mis sentidos,
tú que no tienes nombre,
dale color a mi vida,
atiende pero guarda silencio,
aquí todo es monocorde,
soflamero y despistado,
y el camino que he tomado,
me lleva a lo mas ínfimo del infierno,
pero si mal no recuerdo,
tú que no tienes nombre,
estamos en idem del peldaño,
yo a ti, no te hago daño,
yo a ti, no te hago falta,
a mí, jamás me has extrañado,
tu tiempo es limitado,
mi vida, es lo más valioso que tengo,
y si no cuento contigo,
tú que no tienes nombre,
contaré con los dedos a mis amigos,
hoy que ya no me sobran,
y los pocos que tengo,
cada vez que los veo,
acompañarme quisieran,
para tomar una copa.

Mónica Lourdes Avilés Sánchez.
Derechos de Indautor.

Imposible caridad
en piel humana
que quebranto acoje
Empatia gigante
en corazón limitado
por mezquina mente
sino piensa en la muerte

Eternidad difícil de imaginar
marcada en diez mil millones de años
El sol de exito desfallecera
y sin bondad
La razón de la ciencia la estingira
como reflejo evaporado de la humanidad

El culmen el nacimiento
de una diametral dimensión
donde la piedad y caridad
toque el corazón
y la esencia de Dios

El devenir de la ilusión
hará resurgir la resurrección
del conjunto de Adán y Eva
que mereció su existencia
en la fracción del fragmento del sueño
del que despertaremos con honor

La inmanencia reluzca del fuego abrasador
de lo poco que soy
Y mucho que me creo hoy
En un tiempo dormido
donde envidio el instante
que dura la flor

Derechos reservados
04/09/2019

Dikia

QUIERO HUIR.

Quiero huir, sí, huir,
Llegar hasta en donde el mar, se funde con el cielo,
mecerme en su tranquilo escarceo,
mirar hacia el horizonte,
bañado de sol y encanto,
Quiero huir, de las voces y actitudes falsas,
que simulan zalamería,
las impuestas, por costumbre o por obligación,
de los que no tienen que amarme, sin amarme,
Quiero huir, hacia el último rincón escondite de la luna,
que me arrulle compasiva, amorosa,
y me colme de su mágico fulgor.
Quiero huir, de todo compromiso comprometido,
de todo aquello, que hace escarnio,
Quiero huir, de mis adversarios,
disfrazados de verdadera amistad,
aquellos que en realidad,
derraman malignidad y encono,
Quiero huir, del imprudente agobio que domina,
el sigiloso secuestro cotidiano,
Quiero huir, más allá de lo inexistente e inexplicable,
en donde el dolor y el triunfo fallido, se convierta en gloria,
y el plañido, se convierta en virtud,
hacer una catarsis de mi historia, sin insurrección,
para acallar, todas las guerras de mi alma.

“Si no puedes, o no sabes llorar entonces escribe”

Mónica Lourdes Avilés Sánchez.
Derechos Reservados.

LA TEMIDA ENVIDIA.

La temida envidia, es un sentimiento rapaz,
aquella que corroe el alma,
que pudre las entrañas de quien la posee,
la temida envidia,
la que dicen ser envidia de la buena,
que no existe como tal,
porque la envidia, es lacerante,
la misma que se funde con el celo,
es insultante e inminente,
se le teme, como a las noches misteriosas de insomnio,
de implacables sombras carroñeras,
como a la misma mentira zalamera,
por la imprecación de sentimientos y lenguas puntiagudas,
la temida envidia, es negra y putrefacta,
envidiar es minar con saña, el destino del prójimo inocente,
es placer de muchos, por no hacer nada,
queriéndose igualar, al que creen perfecto,
y solo perfecto, es el Divino,
unos tendrán su propia egregia,
otros de castigo, la maléfica envidia de por vida.

Mónica Lourdes Avilés Sánchez.
Derechos Reservados.

Canto, canto , canto
Cuánto cantó el mirlo
cuando dormía el sauce
a la vera del río
La sonata sonaba
cómo perlas que caían
en el camino

El frescor mañanero
respiraban los tejos
El manantial surcaba
las raíces entrecruzadas
de las gruesas entrañas
enamoradas

Palpitar sediento
por lúgubres pensamientos
asaltaban encapuchados
hasta que la fuente
abierta se deslizaba
hasta sus adentros

Lluvia a granel
bendición del cielo
Pastos eternos
Bienaventurados
los corderos
que no son llamados
al matadero

Enjaulados
tormentos
rayos quiebran
al viento
Surcar mares revueltos
con marejada creciente
en futuro incierto
Ese nuestro destino
antes de llegar a puerto

Luceros del alba
acompañar mi sueño
No soltar las riendas
de lo que no entiendo
Se clavan las espinas
en el aparejo
en el entretejo
ahogando el lamento
El silbido
se escapa
muy lejos
con su portentoso estruendo

Derechos reservados
08/07/2019

Dikia

Pasos

¡Ah!...pasos,
titubeantes, inseguros,
paulatinos, pasos preliminares.

Pasos raudos, apremiantes,
ocasionales, misteriosos.

Pasos firmes, constantes,
mesurados, armoniosos y equilibrados.

Pasos encontrados, inquisidos,
malos pasos, pasos en falso.

Pasos singulares, habituales,
presurosos, mal trajinados o cansados.

Pasos perdidos, en trágicos desenlaces,
peldaños, pasillos, al pasar de los años.

Pasos evidentes, pasos ilegibles,
sobre hojas secas, gránulos de arena,
fértiles llanuras, flores y ortigas.

Pasos célebres, desapercibidos,
pasos de encomiar una vida,
pasos relegados imposibles de emular.

¡Dios de los cielos!
tú que das cuenta de nuestros pasos,
no considerar los últimos,
ellos, acaecen inoportunamente.

Autor: Caballero sin sombrero

Soy tan joven y mis cabellos han plateado,
soy tan joven y tan viejo,
mi frente ha marchitado,
¡tantos años existiendo,
y a vivir no he empezado!
tantos sueños ya deshechos,
tantas cosas ya olvidadas,
y este vacio de ahora,
y este existir desesperado,
¡soy tan joven y tan viejo,
y ha vivir no he empezado!