La puerta de mis sueños
Y te escapas de entre los dedos
como el agua que llega y se va,
sin llamar y sin pedir;
como el agua que llega y se va
quedan mis manos vacías de ti.
Y siento el frío que tanto soñaba,
y busco y no encuentro,
y dejo mi grito colgado en el horizonte
esperando…
de nuevo soñando.
Colores que se asoman
dibujando nubes y descubriendo cielos,
auroras que llaman abriéndose paso
entre las luces que ya se apagan,
te escapas huyendo, rendida,
…otra vez vencida.
Es la pena que marcha,
la que huye dejando desnuda el alma
la que no oye y en su silencio arrastra
capas de miseria, lodo y fango;
aquella que ahora se escapa de mis manos
llevando su carga de ira y de guerra,
la que dándose por vencida
hoy, como agua entre los dedos,
marcha abriendo la puerta a mis sueños.
©jpellicer2012
Es preciso
Es preciso volver a mirar este hoy
dejando marchar los rencores
nacidos del odio, escapados de la soberbia,
y acunados entre nanas
sentir los arrullos que anuncian un nuevo día;
es preciso creer que es posible volver a confiar,
que es posible inventar una sonrisa
y dibujarla con las yemas de los dedos
bajo la atenta mirada que aliviada y sosegada asiente.
Es preciso reconocer el error
de no haber amado más,
de no haber mentido menos;
la injusticia de haber condenado
al inocente por blandir su silencio;
es preciso aceptar que no fuimos…
y que tampoco llegamos…
preciso es conciliarnos con nuestra pobreza
- morada donde habita nuestra grandeza-;
porque en ella están las respuestas
a tantas preguntas en horas de desconcierto.
Es preciso “desaprender” y dejar, como río vivo,
que fluya en nosotros “otra” emoción,
aquella que nos libera, que nos acerca un poco más
a lo que, sin saber, somos.
Es preciso volver a mirar la tierra y sonreír,
a perdernos en la noche soñando
y a encontrarnos en el día amando.
Es preciso reinventarnos en nuestras ilusiones
y cabalgar sobre el corcel desbocado de nuestros sueños;
es preciso abrir los brazos
y comenzar a abrazar sin saber a quién ni porqué;
es preciso dejar de decir….
… ¡ya no puedo!
Es preciso saber que es posible otro amanecer,
que otro despertar confundido entre murmullos de paz
abandona la noche queriéndonos abrazar.
Es preciso dejar de ser y estar con todo lo que nos condena,
para comenzar a Ser y sentir de todo lo que nos libera.
©jpellicer2012
Feliz Navidad
Feliz Navidad también para ti y los tuyos. Para que el año venidero te llegue cargado de Paz y de ilusión. Para que te acerques un poquito más a tus sueños. Para que puedas tocar con tus manos ese mundo maravilloso por el que tanto luchas. Para que este nuevo año que llama a tu puerta, sea un desfile de alegrías que llenen tu vida y la de tus seres queridos de música y color. Para que este nuevo año podamos seguir compartiendo, sonriendo, disfrutando...
Para que en este nuevo año nos sigamos sintiendo vivos; para que sigamos siendo y sigamos estando.
Yo deseo lo mejor para mis amigos, para los que siempre están aún cuando no los llamo.
Deseo que la sonrisa regrese a quién la vida se la arrebató.
Que la miseria y la pobreza toque insistente en la espalda del que no quiere ver.
Deseo que el trabajo llegue a quien lo necesite para vivir.
Deseo salud para los enfermos y esperanzas para sus familias y también para ellos todas las sonrisas.
Deseo que los niños lo sigan siendo.
Deseo que los únicos golpes y gritos que se den, sean al aire y para pedir justicia.
Deseo que los que tienen la responsabilidad de gobernar abran, aunque sea por una vez, los ojos.
Deseo que cuando me llames te pueda oír; y cuando no lo hagas me acuerde de preguntar por ti.
Deseo que lo que escriba sea hijo de mi corazón, y te llegue.
Deseo que seamos más los que soñamos, los que luchamos, los que sabemos, los que queremos y los que podemos.
Deseo que nuestra Naturaleza se sienta orgullosa de seguir siendo “nuestra” y seguir siendo “naturaleza”.
Deseo que la vida sea amable para aquél que con amabilidad pasa.
Deseo que nuestros ancianos vean en su vida y su sacrificio, la mayor y más bella obra de arte jamás construida: nosotros, y sean felices.
Deseo que vivamos el presente, completos; que no “vivamos” el futuro… que lo luchemos y lo ganemos.
Deseo que se vayan los que sobren y que sobren los que matan.
Deseo que regresen todos los que faltan.
Deseo que esta Navidad lo sea de Paz y de verdad.
Deseo que estas letras te lleguen envueltas en sonrisas azules, que podamos compartirlas y juntos nos sintamos bien regalándolas. Que no te olvides de mí, porque yo sí que no me olvidaré de ti. Y que cuando vengan los días grises, buscando en nuestro interior, hallemos la fuerza, la respuesta, la razón y la emoción suficiente y necesaria para seguir caminando.
Todo esto es lo que deseo y todo lo que espero, y si todo no lo puedo conseguir, si algo me faltara, solo pido un deseo… que no me falte tu mirada.
Juan A. PELLICER.
©jpellicer
Atrévete a pensar
En este día de impulsos encontrados
y de calmas obligadas
en mares imaginarios de azules imposibles,
donde los recuerdos se amontonan estorbándose
en ese ayer que arrebata los anhelos del mañana,
no te sientas perdido, y…
…atrévete a pensar.
Imagina una noche plateada
con millones de estrellas titilando,
en única y mágica danza
para tus ojos que cerrados ven
y tus manos que abiertas tocan
llamándote y llevándote;
siente otro mundo, -que es el mismo-
límpido de necedad y ruindad
que llama y está por llegar;
imagina un silencio tan grande
donde poder dibujar con trazos dorados
de miradas redimidas, la palabra Paz, y…
… atrévete a pensar.
Siente la belleza del verso,
la proeza de llegar al final
la dicha de haber podido estar y ser,
y la grandeza en la miseria
de haberte re-conocido
sintiendo que eres más,
sin dejar de…
atreverte a pensar.
©jpellicer
El desatino de los recuerdos©
Te alejas con el desatino de los recuerdos,
con el aire que se niega a acariciar
los momentos que siempre fueron
futuro incierto de los sueños;
te alejas y tras de ti una estela de silencios
se inventa la cadena que esclaviza
al sinuoso presente que tampoco se ve.
Marchas donde mueren las esperanzas,
donde el cielo se deja atravesar por la montaña,
donde el juglar no pudo cantar a la noche
-y yo le escuché-;
marchas con el recuerdo asido a los anhelos,
con el dolor repartido
y con la pena que SÓLO busca en la sonrisa
un motivo PARA levantar la mirada.
Has marchado lejos,
eres un imposible en mi TIEMPO,
un color desfigurado por la mano temblorosa
del pintor que no quiso ser;
donde las huellas van dejando el rastro
de todas las ausencias,
y donde las palabras no se escuchan
porque también ellas, ayer que también es mañana,
… quisieron morir.
Jpellicer©2015
Días que saben a poco
Días distintos que saben a poco,
que se viven esperando
y esperando van pasando;
días distintos donde el sosiego es prestado
y el recelo sientes que aumenta
como huyendo por tus venas
dejando esparcidos regueros de tristeza.
¡Un instante!
Un mundo por un instante
para escuchar el baile de las hojas
buscando su tierra para dormir;
un instante para bajar los brazos
y no sentirse vencido;
para entender el ayer dejándolo marchar;
sólo un instante donde gozar con la belleza
del silencio cuando nos habla.
Días distintos jironados de instantes casi prestados
desconocidos huérfanos de calor
como buscando otra razón para volver a ser.
Universos de papel donde ningún poeta
quiso dejar su alma asida a un verso.
Días distintos que saben a poco,
que me van llevando despierto como si durmiera….
….durmiendo como si viviera.
©Jpellicer2013
Sueño con volver a ser
Bajo tu sombra busqué refugio,
y entre tus hojas -místico lienzo robado
a otros paraísos-, y abandonado
en el embrujo de tu belleza,
mis manos se posaron sobre la yerba
sintiendo la frescura de la tierra.
Ante mis ojos pastos infinitos
marcando sus huellas
reinventadas de millones de colores,
revelando su grandeza más allá
de toda imaginación;
universos terrenales sin amos
ni dueños, sin límites ni fronteras;
espacios para la armonía donde poder respirar
sintiendo la vida poseerte,
como devolviendo el aliento robado
en el aciago verso que quedó sin decir.
Pensamientos que límpidos fluyen
como agua de manantial,
que no conocen las riberas
que a su paso y en su vivo caudal han de besar;
que llevan escritos en su tinta cristalina
la palabra libertad.
Bajo tu sombra
arrullos de esperanza mi alma conoció;
bajo tu sombra se desvanece el ayer
y en ella, entregado a la caricia,
sueño, afán de un viejo romántico,
con volver a ser.
© Jpellicer
He sentido...
He sentido la paz,
mirando, absorto en tu recuerdo,
la belleza que sin dueño ni nombre
de nuevo se escapa;
ese caudal de emociones
que roba espacios a la sangre
haciendo de las venas por un segundo “eterno”
insólitas rutas de ilusiones.
He sentido el silencio,
estallido de la nada que retumba
y que todo lo calla;
no hay espacios, no hay lugar,
ni principio ni final,
¡silencio!, solo silencio y paz.
Candileras que van trazando
sendas por donde perderse;
¡perderse!...
acaso única forma
ganada por la ceguera y pobreza del hombre,
en ese loco y justo afán de volver a encontrarse.
©(Jpellicer)2012
La música que había en tí
Obras: Pintura de Irene Gomis Galán (Guadalajara), (óleo sobre lienzo 100x81) y Poema de Juan A. Pellicer (Cartagena). Juntos han participado en la Exposición que con el nombre de “Manifiesto sostenible” ha tenido lugar durante este mes de Diciembre en la Sala Municipal de Exposiciones de Barakaldo/Giri Iraunkorra
Arrasado por la ceguera
que deja la belleza en su huida
queda sin vida la hoja pegada
a la rama que la llora;
arrasado por la ceguera
el tronco arranca de la tierra un quejido
sin una lágrima, sin un reproche,
solo y desnudo en pie sigue muriendo.
La noche esconde tu tristeza
en su negrura compasiva,
y sigues en pie y solo soñando
con tus prados y tus verdes,
casa de trinos entre millones de escaleras
imaginadas por el pintor que te vivió,
que se mezclan buscando otro día y otro cielo,
que te inventan vivo y no muerto.
Será mañana que ya no estaré,
que tu dolor dejará un recuerdo
dibujado en tu tronco –bellísimo porte-
sin cara ni cuerpo;
será mañana que volverá el color
pegado a tus hojas, tus ramas y tus prados;
será mañana que no estaré,
que junto a ti me sentirás brotando de la tierra
buscando entre el silencio roto
la música de la vida que había en ti.
©Jpellicer2012
La soledad del poeta©
La soledad es el rincón
donde el poeta llora
retorciéndose entre sus miedos,
donde el amor aún se espera
y la caricia vive empañando los espejos.
Los miedos del poeta
que se hacen voz, y viven, y llegan…
y no mueren.
El rincón del poeta,
universo donde vida y muerte
se cortejan arrebatándose
el soplo de esperanza
dejado por el recuerdo,
único espacio donde
arrastrado de sus versos
enzarzado en trágico y vital lance
con su yo desconocido,
se hace grande en su miseria
y fuerte en su pobreza,
viviendo para siempre
con la pena de no haber sabido
porqué luchar… y para qué vencer.
Jpellicer©2015