Poemas de amor :  Porque no quieres lastimar mi corazón
Siento que al llegar la mañana la niebla intensa, cubre tu alma
La llena de dudas, de preguntas, de la nada se pone turbia
Siento que eso es porque ya no me amas, porque tu amor
En llamas, es de otra persona, ya no me pertenece más
Ya tu piel se eriza con otras manos y tu boca se abre a otra boca
Tus ojos miran mas allá de los míos, siento que no puedes decirlo
Porque no quieres lastimar mi corazón, pero sufres por dentro
Porque estas enamorada y sientes pasión, por otro que no soy yo
Por eso te escribo este poema, porque que tu no tienes la culpa
La culpa y la razón siempre la he tenido yo, nada tiene que ver Lo que sientes por el, solo el destino puso tus pies en otro camino.


Por Conrado Augusto Sehmsdorf



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Poeta

Poemas :  COLMENA DE SUEÑOS
COLMENA DE SUEÑOS
Autor: Jean Arp
1887 -1966
Escultor, poeta y pintor francoalemán. Fue uno de los fundadores del movimiento conocido como Dadaísmo. A partir de los años 1930 y hasta su muerte, escribió y publicó ensayos y poesía. En 1942, huyó de su casa en Meudon escapando de la ocupación alemana y vivió en Zúrich hasta el final de la guerra. Ësta es versión de: Aldo Pellegrini

Información útil es:

https://es.wikipedia.org/wiki/Jean_Arp
https://www.youtube.com/watch?v=7ANvQv8AUVo
https://www.youtube.com/watch?v=sdBaS8fgwNs
https://www.youtube.com/watch?v=xthvemoL2FQ



Colmena de sueños

las flores se visten con relámpagos
en el plumaje de la estrella duerme el sueño de carne
guarnecido de senos
el sueño tiene en la boca una estrella como el gato tiene en la
boca un ratón
las flores de carne tienen lengua de sueño
estrella de bruma

la estrella de carne bajo la bóveda del tiempo
el tiempo ronronea como un sueño
alrededor de los senos alrededor de las colmenas de sueños
duermen las estrellas
bruma de flor
plumaje de estrella
las flores ronronean

las estrellas ronronean frente a la colmena de los relámpagos
ratón de bruma
ratón de estrella
ratón de flor
el sueño es un gato su lengua es una flor

la carne ronronea en el plumaje del tiempo
los ratones y los gatos duermen sobre la lengua del tiempo
el relámpago duerme bajo la bóveda de bruma
las estrellas se visten con senos
la lengua de bruma en la boca de flor
la boca de bruma bajo la bóveda de carne.
Poeta

Sonetos :  Na boca da poesia
Não ponho palavra
na boca da poesia,
pois sei que é ousadia
e posso deixa-la brava.

Também não puxo a trava,
para rebuscar a linguagem,
porque é uma sacanagem
fazer uma poesia escrava.

Se sou adepto da liberdade,
procuro fazê-la à vontade,
ao meu bel prazer...

Poetar como um dever,
é muita responsabilidade
para quem só quer espairecer.

A.J. Cardiais
31.07.2018
Poeta

Poemas sociales :  Sem opinião
Quem se entrega
e não carrega,
é carregado...
Portanto não pode
escolher o lado
em que vai desaguar...

Não pode lamentar
quando a correnteza
o jogar,
num mar de tristeza,
e a rima louca
sair da sua boca
sedenta pra rimar...

Quem se entrega
e não enxerga
a real situação,
não tem opinião.

A.J. Cardiais
16.12.16
Poeta

Sonetos :  Gallego
Gallego, querido amigo, te has ido
Azul y Oro te llevas, olvidado
Jamás, Un grito de gol anidado
En silencios eternos, transformado

En escudo con estrellas, bramido
De Bomboneras, de jardín alado
Que sobrevuela los cielos, sentado
En la grada eterna, de aquel partido


Ganado en alma bostera, llenado
Vasos con cerveza has festejado
Con tristeza debo decir, sentido

Es el vacío que dejaste, sagrado
Tu lugar en mi mesa, merecido
Altar, que has ganado por lo vivido




Por Conrado Augusto Sehmsdorf (Kurt)


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Poeta

Poemas :  Calça rasgada
Minha calça rasgada
quer dizer muito,
com a boca fechada...

Ela não abre a boca
feito uma louca
consumista.

Minha calça dá a pista,
de onde é que eu trafego...

Ela é a razão que carrego,
levando uma vida “no prego”,
por ter alma de artista.

A.J. Cardiais
26.10.2013
Poeta

Poemas :  Concurrencia soñadora
CONCURRENCIA SOÑADORA

Donde el humo enciende un cigarrillo,
con el escándalo mecánico,
en la penumbra artificial de los ratones,
con la voz de la distancia,
en el lívido límite de la cárcel tierna,
con la dulce incertidumbre,
del incendio fósil dictando conferencias,
al clavel de la primera vez constante,
del sonido perseguido del ruido requisado,
por la sospecha despreciada despiadada.


Por ser la concurrencia soñadora empedernida,
y que no solo pensase al leer en lo que lee,
ni en la repugnancia de repetir lo ya dicho.
¡Sin la dicha de sentirlo!. Encadenado al río,
que corre boca arriba naciendo navegante ligero,
de lo conseguido en cierto modo incierto espeso,
al encontrar otro camino rabioso ramaje rapaz,
en que cada parte del principio supone un fin,
un pronóstico sin ropa sin ritmo sin horno postal.

En
La
Concurrencia
Soñadora... ¡Por ése anhelo que no ha tenido!.
Ni antecesor, ni sucesor, sectario secuaz sedoso.
Ni tímidos resortes rectos, ímprobos. incandescentes.
En las dulces curvas... ¡Dónde la sal entra!.
Con el velo del preciosismo azulado ambulante.
Y la vanidad dorada en salmuera. ¡Por hablar del sentir,
de lo que nada se sabe, ni se puede saber, pregonándolo!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  Pócima cara... (Visual neosurrealista)
PÓCIMA CARA

El
Rostro
De papel
Tiene hambre
De tinta fuerte ya
Que persigue una calle
Por el espejo débil drama
Licuando al fuego de casa y cuchara
De cama y tenedor de puerta y tristeza
Pintando de noche las ventanas sedientas
De la vil justicia sanguinaria con el tedio raudo
Adulterando al auditorio del armario lento
Estrechando los aplausos del cementerio
En la obscuridad erguida que inventa
En la frenética copa que teje latidos
En la caja monedas que afiebran
Odios horizontales honorables
Pésimas piedades pintables
Laudables lenguajes lanza
Papeles entintados
Licuados caros.

El papel mortecino del humo ha sido piedra
en la cabellera del silencio caballero pardo
con la tormenta de las algas en las pupilas
y la danza de los musgos en la mano suave
De miel y fuego, de piel y jugo, en la luz hoy
Que sabe a higos con los pechos de alabastro
entreabierto en la distancia que estremecida
mira la intimidad ardiente de la hormiga alada
con la mariposa que arrodillada canta córnea
en la cándida montaña bajo el puente papelero

Estando
El brebaje
Decorando
La siesta débil
Con la boca seca
Inseparablemente
Acuática en la memoria
De la carne de las tumbas
Salvajes reminiscencias ricas
Rindiendo rejuvenecidos cultos
Al insensible suelo sacrificando zupias.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Cuentos :  ¿Porqué nada es mejor?... (Anticuento)
¿Porqué nada es mejor?

Llueve su angustiante soledad la noche, cuando las aves no cuentan las nubes, y se van apagando.
Las flores en sus aguas al finísimo azul después
de morirse el sentido en la distancia... Nadie
tenía en el lugar la túnica del color del enebro.
Era marzo de un tirón, por más que la causa de
su oficio no dejaba lugar a dudas al año. Con el
moño el invierno puntual se tiende sin ser verde
ni admitir réplica, sin darse apenas cuenta de lo
qué hacía al miedo al verlo matar su hielo en él,
¡Sí!...En el corazón de una gota. Seca una antorcha encendió el ruido en mil pedazos incluidas las huellas con sus tintes lozanos no sin gran pesar. El vacío en su vasto territorio señalaba el camino de regreso...

Se veía el silencio moverse un paso afuera de los
hogares qué se alejaron más allá de las estrellas.
Tan cierto, cómo aquél que en el rostro dibuja la
cobardía midiéndole los pasos al olvido... Carente
de palabras en una extraña expectación.... Pusilánime y arriscada, en el vestíbulo vespral, en el ápice sinuosa con la vicisitud jaspeada, y el incienso de la genuflexión agreste, desgarbada, por la prosapia del varapalo.

¿Recuerdas el tiempo aquéllo?... Cuando nada de esto sucedía en el largo coloquio marmóreo que se reconoce de repente ahora... Y no me remonto soñando a otro... Hemisferio, como el cándido cordero en la pereza, ni a los mástiles de los rosales desnudos en el tedio de una
fofa neblina... Tú me dices que sí, y qué si sabes de la penosa y constante travesía que guarda en sus párpados sedeños la boca ingenua...
Pues verás...

El desierto acusaba a esa lluvia de ladrona dónde la humedad ahogaba las casas con las lágrimas asustadas por la elegancia de las urnas, y los minutos ocupados en el silencio menos distante, en el más llamativo, en ese que vomita su publicidad, llueve y llueve suave, sin saberse bien...

La había estado observando, veía gota a gota como trepaba entre las nubes. Reconocía la humedad sin pretextos, y guardó sus cacerolas, ollas, cubiertos todos en sus arenas llevándose los puños paños de tormentas agotadas bajo un sol de madera con la certeza del florero de cristal cortado entre las manos del me excuso ante la multitud, y hago desaparecer al primero que proteste de inmediato cumplir con el encargo de la suciedad y la incuria, como si no estuviera realmente al tanto de los propios asuntos celestes... Y del azul contravenir
al marrón indecoroso, con el atributo de viandante embaldosado, y desde el introito menospreciado preponderante...
¡Vaya umbrío caligine azaroso, el verdete vernáculo ribetea al tergiversar mismo!.
Por allá dónde la dulce lumbre, no es precisamente, dulcedumbre, ni en la cumbre se vierten los abrojos, y menos por la mañana, el lóbrego horizonte, con el ademán del puñal en la mirada, y el rojizo brocado de la esperanza mancillado...
¿Porqué nada es mejor?... Me dices, cuando, cuándo... La lluvia bebe bajo la tierra cataratas que muerden los sueños hechos polvo.... Y... Porqué llueve su soledad la noche en cada calle
.


Autor: Joel Fortunato Reyes Përez
Poeta

Poemas de reflexíon :  Aguda caída
AGUDA CAÍDA

Agu
Daca
Ida.

En la noche que duerme demasiado plácida.
En la tarde que se rasca el sol.
El último pincel entusiasmado.
Cuando.
Se pone nerviosa la mañana.
Al fondo.
Afilar de unas pestañas años.
Después.
De una.

Agua
Daca
Ida

Del crustáceo.
Observando la vidriera.
En la rutina inquietante.
En la cilíndrica mirada.
En la bebida camisa.
Del terreno.
Estampado pantalón.
Del tobillo.
¡Violento colchón!.

Por
Esa
Agu
Daca
Ida
Está

El sendero de la noche medio desnudo,
golpendo el suelo del claro opuesto,
apropiado a la frente estrecha,
en la ropa de las luces cortas,
incluyendo las balas boca arriba,
en la espalda del buen papel,
en el invierno impresionado,
y las sonrisas bajo el hielo,
en la imagen del instante.

Por
Esa
Agu
Daca
Ida
Está

Un amanecer cauteloso.
Un gris interminable.
¡Qué empezó a buscar en la mirada!.
Un sabor disfrazado de rojo.
Un anochecer en la ribera.
Entre los zapatos del sofá.
¡Tambores, bocinas y campanillas!.
En la noche qué desayuna el día.
Y al sol qué no calienta igual.

¡Es así, la aguda caída aguda, es así!.

Dicen:
Como hurgándose las ranas el rostro,
que se hizo pedazos el tiempo,
encaramado en la desprevenida.
¡Cremallera!... Porqué la tentación,
llovía fuerte... En el mejor alumno,
de la suerte... En las pestañas,
pausadas... Capaces de detener,
la mirada... En la cintura de las uñas.
¡Martirizando su lujuria algodonosa!.

Ates, antes, antes.
De
La
gu
da
ca
ida, ida, ida.

Por ser insensata.
En la máquina.
Insensata.
De pasos.
Laterales
Y reverencias.

¡Ahora, ya está, en la dormida noche pálida!.
La luna.
Del espejo.
Después.
De la caída.
Aguda y fragmentada entre los restos reflejada.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta