Poemas de amor :  Este clima de amor
Este clima de amor
Olhar no seu olhar
este clima de amor no ar...
Esta sensação de tudo
já ter acontecido...

Olhar no seu olhar
e te acariciar...
Seu corpo
em meu corpo envolvido.
Sentir sua alma, calma
a brindar-me com este instante.

Olhar no seu olhar
este momento real
de felicidade
e guardá-lo em mim
para sempre...

A.J. Cardiais
imagem: google
Poeta

Poemas de amor :  Este clima de amor
Este clima de amor
Olhar no seu olhar,
este clima de amor no ar...
Esta sensação de tudo
já ter acontecido...

Olhar no seu olhar,
é me acariciar...
Sentir o seu corpo
em meu corpo envolvido.

E sua alma, calma,
a brindar-me
com este instante.

Olhar no seu olhar,
este momento real de felicidade
e guardá-lo em mim para sempre...

A.J. Cardiais
imagem: google
Poeta

Poemas góticos :  TORMENTA
¿Puedes ver la tormenta más cerca ahora?
dime cómo se siente en estar ahí afuera,
dime como se siente ver el cielo gris,
ver la tormenta frente a frente.

El cielo se torna oscuro,
bajo las fuerzas del trueno,
rugen en las nubes,
es hora de que llueva.

Un momento de la visión de su viñeta,
como el brillo de una luz en la caída de un muro,
imágenes de forma instantánea,
personas destrozadas,
cada vez que sale hay una marca viciada.

Fragmentos del destino,
se hace presentes,
una vision alterna,
una imagen fatasmal.

Un pensamiento pasa por mi mente,
una tormenta se acerca,
mejor prepararse,
para lo que viene,
para esta tormenta.

Erick R.R. Torres
(Angel Negro)
Poeta

Poemas :  SOMBRA ACOGEDORA
Busco alejarme del sol,
que quema mi blanca piel,
casi muero de insolación,
casi me quedo sin agua.

Busco una sombra,
apacible y quieta,
busco la brisa de tus labios,
busco la gelidez de tus caricias,
para calmar mi alma atormentada.

Espero la lluvia,
lagrimas del cielo que caen,
busco la brisa de tus besos,
el jugo de tu amor,
para estar contigo mi amada mujer.

Sombra acogedora,
pacifica y confortante,
sana estas quemaduras del sol,
sana estas heridas,
mi querida niña.


Erick R. R. Torres
(Ángel Negro)
Poeta

Poemas de naturaleza :  Negocio mercurial
NEGOCIO MERCURIAL

Señor clima:
¿Porqué no entra el invierno
y se resguarda
del frío verano
amable en extremo y barato?.

¡Hummm!__ ¿De qué sirve ya
la prima
vera
impulsada?. Dijo, la nieve pasada.
Es
Es el rencor calcinado,
de la derrota, cruelmente,
¡Satisfecha en la sorpresa!.

¡Qué surge, peldaño a peldaño!.
Del crisantemo ejecutivo.
Del farol al frente.
Porqué no hay remedio. Mejor,
es abrir el favor, al viento,
las velas con un poco de miedo,
enseñorada canoa y opulencia.

Amarillando tarde y otoñal.
Reverdeciendo temprano,
primaveral hielo al tomar,
la voraz decisión___¡Un meteoro!.
Lógico___ ¡Sacaplata!.

Señor clima cuando cambia.
¡Un termómetro de vista!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  Habito invisible... (Neosurrealista)
Habito invisible

"Con el hábito habitamos el hábito invisible"

Clama el clima ser un clarín.
Clarín de paz... Va el veloz huracán.
¡Pincel, cincel, pluma y cuerda!.
Curvas en la vida, curvas en el arte.
¡Anhelantes armonías bajo el viejo lago!.

Con el hábito tenía una piel de domingo.
Y girasoles en el sombrero, cubierto.
Cubierto de viernes lunes,
por las frenéticas sombras.
¡Primaveral y dulcemente teñido!.
¡Por la tarde tibia y majestuosa!.

¡Invisible habitar la vida!.

La muralla fuerte cabalga noblemente.
Invisible.
Él, fiel vencedor de duelos crueles.
¡Hábito qué habita!.
Las flores vibran encendidas.
Las frutas espumando platas.

¡Dulces confidencias derramando al viento!.
Él, huracán, adorable peregrino.
¡Por el arte!.
Hábito invisible, monje del destino.
¡Creador!.
Doblando las maderas de los cielos.
Doblando las rendijas del salitre.
Él, incubador, del follaje melodioso.

¡Invisible habitante del destino!.

Fecundo, insinúa la bóveda estrellada.
¡Cuál canto incomparable del zenzontle!.
¡Huracán creador de fantasía!.
Apacible enamorado.
Él, artista, monje del destino, con el hábito.
¡Invisible, encarna, encarando las pasiones!.

¡Altares vigorosos y existencia ardiente!.
La helada realidad y los ensueños abandonados.
En el fondo de ásperas mañanas.
¡Qué funden lágrima y sudor del cuerpo al alma!.
El huracán, huraño, del interior, humano.

¡Sentir invisible hábito!.

Cuando, heridas todas las calles buscan,
la creación en paz, un frasco de fresas,
pinturas monumentales, poemas musicales,
entre el negro fango, del sufrir inútil.

¿Porqué, porqué?. ¡Cuántas escaleras hay!.
¡Cuántos cielos faltan por llenarse!.
Innúmeros cadáveres caminan, y en las torres,
desayunan cucarachas. Hablan y hablan.
Hablan detrás de las cavernas. ¡Con el remedio de saliva!.
¡Con la garganta salvaje!.

¡Invisible sentir habito!.

Insensibles hay, mil tambores y tabernas,
en las últimas pirámides, de liana.
En el papel, tintas, cinceles, dolores, sabores.
¡Carnes de todos colores!. Acuarelas, piedras,
águilas desplumadas, óleos, nopales, y secos
senderos perdidos, en degollados futuros.

Y de postre, un león sodomiza una lombriz.
¡Una lombriz!. Si, una lombriz de caverna.
Dicho han, uno y otro día, mil veces.
Mil mismos, las mismas cabañas.

¡El creador invisible habita!.

Día tras día, siglos astronómicos.
Dolores del océano, cielos rojo sangre.
¡Rojos de muerte, llantos rojos!.
¡Cómo perros disecando cada ladrido!.

Y los monjes, decorando de aleluyas mil campanas.
Dorando grillas lenguas y nobles iguanas.
¡Si habla el veneno, callan las pestañas!.
¡El arte extinto, pinta al pálido mañana!.
Con el hábito invisible.
¡Día con día, igual, invisible!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Përez
Poeta