Poemas románticos :  Junto a la puerta
Estoy tirado al frente junto a la puerta y llamo
soñando que te acerques a conversar conmigo.
Yo fui de tus mañanas el que acortó las horas;
tú fuiste de mis días el aire, el vino, el trigo.

Recolecté los pétalos de la olvidada rosa
que acompañó mis lágrimas el día que caí
como las ramas caen cuando la brisa llega.
Con tu recuerdo dulce no supe más de mí.

Llévame entre tus brazos a donde vayas, vida.
Quédate con mis horas cuando te sientas triste.
Abrazaré tu cuerpo y escucharé tu canto.
Bendeciré el momento cuando hasta mí viniste.

© 2010, Cristino Alberto Gómez
www.dominicanpoet.com
Poeta

Poemas de reflexíon :  Me ha perseguido la red

Yo soy el que como usted
cada día fue más viejo,
y agonizando me quejo
de haber sufrido la sed.
Me ha perseguido la red
de la parca abrazadora;
yo abogué por su demora
perdiendo en el tribunal
donde el dictado final
la reconfirma señora.

Cuando mi voz existía
algún ser hubo sentido
que conversando a su oído
el aire le divertía,
pero cuántos más un día
fueron parte del concierto
cuando encontraron abierto
el pecho del que lo escribe.
¿Por qué le gritan que vive
al que ayer quisieron muerto?

© 2010, Cristino Alberto Gómez
Poeta

Poemas románticos :  Un hombre canta
Un hombre canta
cual amargura le ha dejado
de su adorada la ausencia...
salsa, bachata,
bolero, mambo.
Un hombre canta,
yo estoy llorando.

Un hombre miente,
ruega que vuelva y se arrepiente
de haber fallado.
¡Cuánto la quiere!,
jura a los santos.
Un hombre miente,
yo estoy llorando.

Un hombre explota
con pensamientos sus sesos blandos.
Sus sentimientos lleva enterrados,
se hunde y sufre con alma rota,
con ojos secos, con rostro amargo.
Un hombre explota,
yo estoy llorando.

Un hombre calla,
lo olvida todo, que ya es pasado...
nada le impide que siga andando;
lleva en lo alto la misma cara.
¿Por qué esconderla? Nada ha pasado.
Un hombre calla;
yo estoy llorando.

Un hombre ríe
porque se dice ser mariposa
que entre las rosas
se posa y vuela,
que toma el néctar y ya no exige,
sigue volando.
Un hombre ríe,
yo estoy llorando.

Porque te quiero
y en ti se ha ido el mejor regalo
que aun temporal el señor me ha dado,
porque se me hace la vida zarza
cuyas espinas estoy pisando...
sobre el desierto voy caminando
con pies descalzos,
con voz al cielo, con paño blanco.
Porque te quiero,
yo estoy llorando.

Tú estás ausente,
no sé si vuelves, no sé si sientes,
no sé si escuchas cuando te llamo.
Tú estás ausente,
yo estoy llorando.

Cristino Alberto Gómez
www.dominicanpoet.com
Poeta

Poemas sociales :  El sermón de Juan del Monte
Llegó Juan de los Palotes
tu sonrisa a conquistar
intentando demostrar
ser hijo de tutumpotes.
Carro, dinero por lotes
son sus piropos ahora,
lleva dos veces la hora
en sus muñecas y dice
que con su pinta predice
en ti futura señora.

Ha llegado simplemente,
sin nadie saber de dónde
ni a qué dueño corresponde
lo que al sudor de su frente
si es que le atribuye miente
con los años que aparenta.
Le fue rentable la venta
o singular el amigo
que para verlo contigo
le ha confiado su Cuarenta.

Como dice aquel poema:
“¿qué magia tiene el que llega?”
porque te ha dejado ciega,
y la vecina Zulema
a mí me cambia de tema
mirando a otro lugar
para luego comentar
que es la mía Nicodema.
Con la sangre que me quema
yo me voy a trabajar.


Más allá de las montañas
se pierde la vanidad
y germina la verdad:
en el jardín las cizañas,
de tu príncipe las mañas,
de tu vientre el principito,
del hijastro su hermanito.
Al volver la primavera
eres de nuevo soltera;
empujas un cochecito.

Se revuelca mi caballo
que cansado regresó
del cerro que tengo yo.
Pasó la lluvia de mayo
y el carro de mi tocayo
no se ha vuelto a presenciar.
Tu padre quiso apartar
un becerro de la vaca
y la punta de una estaca
lo ha cambiado de lugar.

Zulema viene del río,
que también ha regresado
con un pequeño colgado
queriendo decir que es mío.
Ayer se nos fue tu tío
que preguntaba por ti,
tu madre está por allí
hablando con mi mujer.
"¡Nicodema, ven a ver
la sorpresa que hay aquí!"

© 2010, Cristino Alberto Gómez

www.dominicanpoet.com
Poeta

Poemas :  Quítame las horas
I
Quítame las horas.
Déjame los días.
Mírame a los ojos,
compañera vida.

Llévate si quieres
también los instantes;
déjame el momento
cuando fui tu amante.

II
Quiero a veces recordar
el día cuando nací
y al alba abriendo mis ojos
entonces te conocí
pero rechazo la hora
sabiendo que ha de venir
inexorable, sin falta,
la hora de morir.

Háblame vida, si quieres,
de los años y algo más.
¿Quién no quisiera desear
años de felicidad?
¿Quién no recuerda que tuvo
un momento de paz?
Pero ante el tiempo me postro
con esperanza inmortal
y sueño contigo y sueño
a tu lado eternizar
los más hermosos momentos
en los días por llegar,
sin imaginar tan cerca
la hora de la verdad.

III
Quítame todas las horas
vida mía. Toma ya
de mi tiempo cada una
cuando augure lo fatal.
No quiero la hora cero;
sueño el día que vendrá,
cada fin el año nuevo,
cada sueño el despertar.

Despójame de las horas;
son aburridas. No más
esperas que me detienen,
horas que no pasarán,
trenes que no se devuelven,
presente sin marcha atrás,
personas que no regresan,
calles oscuras… ¡no más!

Quítame ahora si quieres
las horas que no vendrán.
Dame sueño en todas ellas
con un solo despertar
pero por nada me falles
a la hora de luchar.

© 2010, Cristino Alberto Gómez

www.dominicanpoet.com
Poeta