Poemas de amor :  LABIOS DE CEREZA
Ella me dio todo lo que tenía,
pero era joven y tonta,
solo tenía veintiuno,
no le importo colgarse por ahí,
entonces cuando la inocencia cayó.

Esos labios de cereza,
los quiero besar,
esos labios de cereza,
los quiero tocar.

Eres inocente,
una niña por fuera,
una mujer fatal por dentro,
eres la tentación y la inocencia.

Eres una chica tan delicada,
en un ambiente histérico,
de un recorrido emocional,
en términos físicos.

Eres una chica inocente,
de labios de cereza y rizos dorados,
todas las mujeres te envidian,
los hombres te desean,
yo quiero besarte querida niña,
quiero ser tuyo de por vida.

Erick R. R. Torres
(Angel Negro)
Poeta

Poemas sensuales :  Oloramado
OLORAMADO

El silencio cae, incesante, catarata.
De la quietud difícil.
De la concha frágil.
¡Y los murmullos de las flores!.

Olor
Color
Amado

La solemne soledad mecen,
al cuerpo de cada momento, amado,
los labios mordidos de la cereza.
¡El fruto profundo!.

Color
Olor
Amado

El recuerdo de la lejana tierra.
¡Un columpio inexpresivo!.
Al impulso..
¡Dónde la orilla vibra núbil!.

Amado
Olor
Color

De las márgenes madeja.
¡Al mover la historia el tiempo!.
En la claridad misma.
Pegado. Al. Suspenso. Penetra.

Olor
Amado
Color

La mirada peregrina del ave,
en el destello de las caderas, del árbol,
en las chispas multiplicadas del nido,
el silencio, que mece después al canto.

¡Oloramado...Amadolor!.

¡Cómo acaricia un suspiro, la memoria!.
¡Al abrir la puerta del pasado!.
La ventana, de los pétalos.
¡Y el perfume...Amado...Del pasado!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas surrealistas :  La caja espera
La caja espera

Espera la manzana su durazno la cereza.
En la certeza de la caja la fruta.
La caja, la caja espera, la ceniza de las hojas.
Como se quedaron las lunas en las lagunas.
¡Lunares!.
Los ínfimos arbustos de las orugas.
¡Tortugas!.
Se quedaron las arañas en los vidrios.
¡Lirios!.
Los siglos en las pezuñas del pingüino.

Espera, espera. ¡No, no!. Es manzana.
Lo prohibido del pescado la cereza.
El durazno en la certeza de la caja.
Espera, espera. ¡Sí, sí!. La ceniza.

Ya es el tiempo de las puertas voces,
de caminar en el hilo y la raíz dura,
de atrapar los ganchos del desfile,
en la manga, magna, del pino tenso. ¡El mango!.

Ya es la corbata desteñido eclipse,
de alfabeto avispas y rendijas vegetales,
de maderas impasibles y parejas ortigas,
en la danza del espejo sabio. ¡Lo sabía!.

La caja, la caja espera.
De las frutas, la ceniza como el fuego.
¡Juego jugo del destino!.
Como se quedó la rueda en los números parada.
Y los duraznos en caudales agudos.
Como se quedó la tuna en los pájaros espina,
y los años en los corderos
de plomo.

¡Ah!__ Si hubiera sido su ceniza.
En la caja de la fruta.
En la manzana del pescado.
Como el brazo sin rodillas y lejano el coro.
No, no, la vela no tiene muletas.
Y el veneno, malherido agrupa.
La tormenta funeraria del mañana.

¡Ah!___Si hubiera sido solo ceniza.
En los hogares sonámbulos.
En los sillones mandrágoras.
En las cajas venenos.
En las mañanas infiernos.

¡Solo cenizas que la caja espere!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta