Poemas :  LA SEÑORITA EUFEMIA
Perfumada de verde y alhucema,
la dama de los sueños extraviados se acicala
para cumplir la cita
que treinta y cinco años atrás
le incumpliera el galán de la foto desteñida.

Acicalada y de verde
-verde esperanza que terquea por no marchitarse-
es la imagen que se le fue rezagando al tiempo;
es la postal de ojos entornados y muselina barata
que de tarde en tarde saca a pasear su fantasía
sin importarle el tumulto
agolpado en las ventanas,
pues ella sabe que cualquier día es domingo en su sueño
y que el galán de las promesas asomará por fin
trayendo en la solapa el clavel de mil disculpas
nada difíciles de aceptar.
Poeta

Poemas :  NOSTALGIA
No es por nada,
pero a veces siento una lejanía de amores
caminando por calles conocidas al abrazo.

Y a veces siento una sensación de melodías
que me hablan de pañuelos
y de manos que se agitan para la despedida
bajo cielos color de fuego.

Sentado en el umbral de todos estos años años,
la nostalgia ha empezado a teñir de sepia
todas mis fotografías.
Poeta

Poemas :  SEÑALES
Que yo recuerde,
no siempre humeó el plato de sopa en la mesa
ni siempre hubo un lecho dónde acomodar el sueño.

Cuando
-llegada la noche-
la familia se reunía en torno de la vela insuficiente,
nunca faltaba quién interpretara
el vuelo del alado señor de las sorpresas,
del verde escarabajo de las noticias que golpeaba en las paredes
trayendo la promesa de una despensa abarrotada,
de un bolsillo generosamente roto,
de unos días mucho más cercanos a la fiesta.

Era, entonces,
cuando todos nos dábamos por entero
a la vieja manía de husmear en la esperanza.
Poeta

Poemas :  TIEMPO DE OBSTINACION
con aromas de limón y de cenizas vengo
con esta memoria que se empecina en saltar muros y alambradas
el leve rumor de un vagabundo derrota la noche
y un viento de miseria
agita periódicos y cortinas desgarradas
tal vez detrás de las ventanas
una mirada hostigante se disponga a retenerme:
soy ese vagabundo
y con aroma de limón y de cenizas voy cantando
Poeta

Poemas :  PROLONGACION EN LOS ESPEJOS
Nosotros,
los que aún disfrutamos del viaje a los espejos,
de nada podemos quejarnos:
nos repetimos en el sueño.
Nos repetimos en la danza más antigua
y en los vocablos que no pueden eludirse
porque son tatuaje permanente
o cicatriz en el pleno corazón de la piedra.
Y aunque corazón y piedra sean la misma consistencia,
nos vamos repitiendo en la sombra que persiste sobre el pavimento
cuando ya hemos partido.
Poeta

Poemas :  SCHERZO LIGERAMENTE MELÍFLUO
NOTA AL LECTOR: Este es un poema con una extensión fuera de lo común. ¿Mi intención? Jugar con la palabra. Espero que lo disfrutes pero, sobre todo, que lo resistas.

Ah, bella mujer...

De nuevo,
bella como los crímenes perfectos.

O hermosa como la mudez penúltima
que hemos ido labrando a golpe de sentirnos cada día.

Cuando aún no estabas ni te presentía,
yo no era más que el ausente de ansiedades y distancias.

Algo me faltaba en el costado:
una herida, quizás, para la duda,
tal vez un poco de corazón acorralado.

Quise llamarte repentina,
pero ya te adivinaba la tarde que poco a poco te trajo
hasta dejarte justo en el último día de febrero.

Entonces nada pudo eludirte.
Nada.
Ni los aerolitos de escritura pasajera,
ni el ruiseñor que anidaba en su propia melodía,
ni la sirena prematura
que advertía el tránsito fugaz de la mirada en soslayo.

Si no hubieras nacido,
yo te habría inventado.

Si no tuvieras esa forma de reír a veces,
yo te hubiera diseñado una silueta de cascada en los labios.

Si te hubieras desviado un tanto así...




*********



No sé qué habría pasado si te hubieras desviado un tanto así.


Lo cierto es que con tu nombre
que recuerda a la flauta del encanto,
hallé la ruta que obliga a retornar sobre los pasos.


Con tu nombre que turba como los enigmas
y guarda la sonoridad de las hierbas aromáticas.


Porque en la transparencia que te llega hasta bien adentro,
se hizo inútil el ojo avizor,
perdió su esencia el interrogante que te suponía,
cayeron de su paso todos los sobresaltos.

¿En qué discreto velo te amparabas
que ni siquiera las ráfagas del nordeste te rozaron?

Un poco más de crepúsculo en el arco de tus cejas
y las primeras briznas de la noche habrían sucumbido.

¿En qué desván del tiempo te ocultabas
que ni siquiera el asedio de las termitas logró su cometido?



*********


Lejos de tu acento
el torbellino de los siglos fue apenas un diminuto remezón de alas.

El ímpetu del diluvio
quedó suspendido cuando tu cabellera cascadeó
sin más impulso que el prestado por el gesto que aún conservas.

¿Sería que tu única posibilidad
fue la de ser más alta que la cifra inalcanzable?

No respondas.



*********



Dime, entonces, si esta música,
dime si este retrato en mi bolsillo izquierdo
y esta postal de acrósticos fatales
aún tienen la forma que quisimos darle al recuerdo.

El tiempo se desprende de los calendarios.

Y las fechas del relato que iniciamos
siguen con su memoria a cuestas.

Pero nada es posible comparar con esa persistencia de océano
ni con esa idéntica necesidad de apurar el mismo trago.

Ah, bella mujer...

Dime si la piedra engastada en tu cuello,
dime si el vidrio cortado a tu medida
o ese brillo de acero que te sigue a toda parte
tienen aún el ritmo que solíamos confundir con cascabeles.

Dime pronto
si de veras continúan campaneando nuestras tardes.




*********


No tengo guitarras
pero de igual manera te nombro en mi trino dislocado.

Te llamo amplia
porque obligas a que se confundan las medidas
y haces que los aeroplanos se distraigan de su ruta.

Si te digo cierta
es porque incitas a que el ojo del pez se obnubile
y permites que los imperios de la joroba se derrumben
cuando te proyectas en dirección del verano.

No tengo guitarras.
Ni me importan.

¿No estamos, pues, atados a la misma sinfonía de vida y fuego?

Ah, bella mujer...

En el transcurso de la jornada que nos incumbe
y en la escala horizontal de la espera sin medida
hemos proclamado la persistencia del lucero.

Sin más arreos que los del naufragio,
hemos eludido los embates de la congoja que extravió su órbita.

¿En qué artificio de colmenas te resguardabas
que ni siquiera la niebla tardía pudo eclipsarte?

Me recuerdo cuidando un miedo ciego a los abismos
mientras tú,
la de los pies presuntos en la tierra,
pasabas por mi calle ondeando como las cometas de papel que le exigen
viento a un niño cuya ilusión más alta es volar hacia el primer sueño.



*********



Lo que quiero decirte
es que yo también supe de la botánica para los ausentes.

Como tú,
aprendí a descifrar el signo del alivio para los nostálgicos
y a practicar
de espaldas al zodíaco
el ritual del desolado.

¿En qué parapeto de ansiedades recostabas la espera
que ni siquiera el interlunio pudo hacerte desistir?

Por eso regresamos a la periferia que nos contenía.

Entonces adormecimos en el pecho
una flor de octubre que aroma y crece
incluso en el filo ebrio de los acantilados.

Entonces alucinamos de nuevo
y nos detuvimos en la leyenda de estandartes seculares
y la tornamos en la hazaña de andantes
que hizo crujir las espadas para romper los sortilegios.

Ah, bella mujer...

¿Sería que tu única posibilidad
fue la de ser más alta que la cifra inalcanzable?

No respondas.

No respondas.

No respondas.
Poeta

Poemas :  CALI
En esta ciudad que por corto plazo me han prestado,
ejerzo ahora mi profesión de caminante
de caminos que semejan laberintos
y de avenidas supuestamente interminables
que conducen a bares donde el tiempo es lo de menos
o a esos lugares de pequeñas referencias
en donde uno puede desnudar incluso la osadía.

Animado por una voz inesperada,
salgo al cruce de los automóviles
y de otros caminantes
y me doy al pleno gris de los andenes
y taconeo calle quinta abajo tratando de llegar al sueño
que dejé interrumpido.

Atrás queda el perfil de una rayuela abandonada
por niños que cedieron sin esfuerzo
a otras tentaciones.
Poeta

Poemas :  NIÑOS
Que jueguen a inventar la noche
o a desarmar la realidad en un espacio imposible,
es lo de menos.
Que asciendan al milagro por escalas invisibles
o que vuelen en extrañas naves sostenidas en la mano
y visiten remotos e ignorados planetas
sin siquiera moverse del rincón del patio,
es lo de menos.
Incluso poco importa
que edifiquen una ciudad sin fronteras
en el andén de la casa.
Lo que urtica y de veras
es que en la danza del sueño
me invadan con sus uñas afiladas,
que insistan en traspasar mi pecho
y colocar mi cabeza en el tronco de los condenados,
que me desgarren,
que me descoyunten,
que me amputen brazos y piernas
y se vayan saltando al son de un materile
mientras quedo suspendido
de un delgado hilo de sangre.
Poeta

Poemas :  Allegro
(Fragmento de un poema-zaga titulado “Allegro andante para el caminante” que hace parte del libro “SINFONIA DE LA ERRANCIA” – Editorial Etcétera-1987)

…alguien sigue golpeando en la roca
en busca del milagro que no es preciso demostrar ahora.
Alguien quiere despojarse del bullicio
y sigue empeñado en conducir hacia ninguna parte
un rebaño inevitablemente solitario.

¿Eres tú, Le-unam?

Ya que posees el don de la nostalgia,
déjame que arroje un poco de púrpura sobre tu hombro.
A cambio sólo pido que abras tu alforja
y saques para mí el amuleto que da protección contra el olvido.
Bien sabes que mi gozo
-mi único gozo-
es habitar este paisaje
y contenerme en el río y su murmullo
y en ese caos de verdes y semillas
que se prolongan más allá del horizonte.

¿Oyes crepitar el tallo de la cebolla cuando crece?

El relincho de la yegua recién preñada
es un sueño de mi infancia galopando a llano abierto.

¿Sientes el temblor de la rama al contacto con la lluvia?

el silbo de los mirlos a punto de emboscarse
es la señal de alerta que me va indicando prudencia.

Mírame como soy aquí:
pleno de la serenidad que otorgan los crepúsculos,
abierto a la calma que impone la brisa detenida en una fruta,
tercamente aferrado a la tierra,
exageradamente esquivo al alboroto de las máquinas
y al chirrido de las ruedas engranadas
pero nunca indiferente al perfil de los tiempos
que se comportan según las leyes del cuarzo.

¿Adviertes esa rebelión de insectos en la punta de la espiga?

Pero alguien sigue golpeando con su vara
aunque ya no sea posible arrancarle milagros a la roca
que hace poco mitigó la sed de todo un pueblo.
Y sigue aguardando a que retorne la señal
que emprendió el vuelo hacia deseos demasiado altos
sin preocuparse por grabar la ruta del regreso.
Poeta

Poemas :  ES TU SILENCIO GRITO
Es tu silencio grito que hace eco en mi silencio

Cuando me nombras
tu voz parece bordear una penumbra
de sutiles referencias
a instantes que se diluyen
en un recuerdo lejano

Si trato de llegar a esos sitios
que fueron tan tuyos y tan míos
cada paso que avanzo
son mil pasos que me retornan
y todo intento por alcanzar tu rastro
es agonía que no cesa
Poeta