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(Para Ángeles que en sus silencios hilvana las suyas…)
Es en el silencio que encuentro
el mejor de los lenguajes,
en la mirada serena y tolerante –ausente de ira-
la más noble de las caricias;
es en la quietud de los momentos
donde ese yo a veces tan lejano
siento yacer rendido, casi derrotado.
En la dignidad del verbo compasivo,
en el instante preciso de la concordia,
en ese nuevo mundo donde la duda sobra
y el abrazo se convierte en única moneda;
es ahí, en ese lado tan oculto de la grandeza
que quiero comenzar a morir.
Guían mis pasos las estelas que dejaron
los que todo lo dieron;
los que ni una vez miraron sus huellas,
aquellos que inventaron al calor de la ternura
otra forma –acaso la de siempre-
de volver a comenzar.
Vuelvo los ojos al mundo
que entre sueños descubrí;
el que se dibuja del color de la nostalgia
en el lienzo de ayer;
aquél que de esperanza
hilvana ilusiones en el mañana
quizá no tan lejano por llegar.
© jpellicer
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Poeta
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"Vivir sin tus caricias es mucho desamparo; vivir sin tus palabras es mucha soledad; vivir sin tu amoroso mirar, ingenuo y claro, es mucha oscuridad..."
Vuelvo pálida novia, que solías mi retorno esperar tan de mañana, con la misma canción que preferías y la misma ternura de otros días y el mismo amor de siempre, a tu ventana.
Y elijo para verte, en delicada complicidad con la Naturaleza, una tarde como ésta: desmayada en un lecho de lilas, e impregnada de cierta aristocrática tristeza.
¡Vuelvo a ti con los dedos enlazados en actitud de súplica y anhelo -como siempre-, y mis labios no cansados de alabarte, y mis ojos obstinados en ver los tuyos a través del cielo!
Recíbeme tranquila, sin encono, mostrando el deje suave de una hermana; murmura un apacible: "Te perdono", y déjame dormir con abandono, en tu noble regazo, hasta mañana...
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Poeta
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Pasó con su madre. ¡Qué rara belleza! ¡Qué rubios cabellos de trigo garzul! ¡Qué ritmo en el paso! ¡Qué innata realeza de porte! ¡Qué formas bajo el fino tul...
Pasó con su madre. Volvió la cabeza: ¡me clavó muy hondo su mirada azul!
Quedé como en éxtasis... Con febril premura, «¡Síguela!», gritaron cuerpo y alma al par.
...Pero tuve miedo de amar con locura, de abrir mis heridas, que suelen sangrar, ¡y no obstante toda mi sed de ternura, cerrando los ojos, la dejé pasar!
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Poeta
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(Composición recitada por una niña en Tacubaya de los Mártires, el 11 de septiembre de 1873.)
Ante el recuerdo bendito de aquella noche sagrada en que la patria aherrojada rompió al fin su esclavitud; ante la dulce memoria de aquella hora y de aquel día, yo siento que en el alma mía canta algo como un láud.
Yo siento que brota en flores el huerto de mi ternura, que tiembla entre su espesura la estrofa de una canción; y al sonoroso y ardiente murmurar de cada nota, siendo algo grande que brota dentro de mi corazón.
¡Bendita noche de gloria que así mi espíritu agitas, bendita entre benditas noche de la libertad! Hora del triunfo en que el pueblo vio al fin en su omnipotencia, al sol de la independencia rompiendo la oscuridad.
Yo te amo. . . y al acercarme ante este altar de victoria donde la patria y la historia contemplan nuestro placer, yo vengo a unir al tributo que en darte el pueblo se afana mi canto de mexicana, mi corazón de mujer.
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Poeta
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Ardiente, memoriosa, mente.
Arde La Mente La Memoria... Del amor, enamorado, amante.
Cu Ando...
El amor Prendieron las antorchas Sin desconfianza Cofre y santuario su belleza, Las luces,las horas, las noches, los siglos, Suspirando, el color y la hermosura, Las llamas bajo sus pieles Amor y pasión de una súbita ternura ¡Que ardió como un sol y una estrella Infinita Y sobre su frágil fortaleza!.
Sencillo, einfach, semplice, plain, sencillo. Espíritu, geist, spirito, spirit, espírito... Lenguajes Armoniosos... ¡ .A veces de dos filos!.
Voló un suspiro bajo lagos espumas al aire y, sin sorpresa, esperanzas tejiendo y desbordándose.
Ardiente... Mente... Memoria... Del tortuoso disimulo solapado.
Cruzó el silencio, suave, cálido, figura, triste, y su figura, noble. Serena, se fue buscando, nubes entre montañas, otra vez, otro cielo, otros tiempos.
Librando las libertades encadenadas, en una libertad qué muere y desfallece, lentamente.
Por La historia haber olvidado La misma historia de otros tiempos Historia, Geschichte, storia, history, histoire...
En su bostezo, la dormida consciencia, la pereza, el miedo, sin unión, sin amor.
Sus ojos la luz no tienen las retinas, por el donde se entreabrieron, solo las nieblas de las sombras, y miraron los nocturnos fríos, olvidos imperdonables.
Con dulce claridad, de arrodillado, del dios del nunca, pidiendo perdón, con prisa.
Gozando los escombros su basura, impertinente, en los retoños de las tardes, despreciado, de la siesta, que le cobijará el insomnio, sobrecogido, y su reposo, desmemoriosamente ardiendo.
Autor> Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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Siento en la piel el amor, que me transmitió tu inolvidable abrazo, abrazo cálido y callado, que más de mil sentimientos expresó, haciéndome viajar entre nubes y estrellas infinitas.
Abrazo que me da la fuerza para seguir adelante, Abrazo que me hilvana a tu ternura y a la vida. Abrazó que arropa mi corazón, abrigándolo del frío, quedándose impregnado en mi memoria.
Dulzura que me adhirió a tu pecho, que embriagó mi alma, llenándola de ilusión.
Estrechándome fuerte entre tus brazos, me sentí feliz, amada y protegida, y mi corazón abrazó con amor al tuyo, musitándole al oído: ¡¡¡eres tú, toda mi vida!!!
Claudia Alhelí Castillo 02-11-11
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Poeta
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MADRUGADAS ENLUTADAS
Lloran las madrugadas enlutadas y tiernas. Por los grises algodones. ¡Desolado leopardo de bordones!. Por las rudas heridas del otoño. Lloran las madrugadas enlutadas y tiernas. ¡Lloran, lloran!. Las madrugadas enlutadas.
Y los tiernos, algodones grises, muy grises y desolados. ¡Desolados leopardos en el alma!. ¡Lloran, lloran!. Las madrugadas enlutadas.
Leo Pardos crepúsculos de madrugada. Tierna. Enlutada luna de carne herida. Al ritmo de las penumbras. Gris. Muy gris, el rudo llanto del otoño. ¡Desolado!.
En lo profundo de las manos la luna, duerme desnuda la fragua en vela, con el néctar de mil noches, con el corazón de mil anhelos. ¡En lo profundo de la fragua!. En las manos indulgentes del cielo.
¡Enlutadas, madrugadas, enlutadas!.
Lloran, lloran, leopardos y madrugadas. ¡Con el perfil aceitunado cutis!. ¡Con el bordón imantado!. Lloran las madrugadas enlutadas.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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Poema dedicado especialmente al bebé de Marcela (Silueta), con mucho cariño.
Bebé: Una suave cuna de cóncavo cielo, es tu refugio temporal, que te protege con dulzura, dentro de su litoral.
Mi buen Dios desde el cielo te cuida, disfruta de tu mundo de paz y armonía, mientras El, tu piel colorea, dibujando tu sonrisa de alegría.
Paciente espera...la vida que su vientre gesta, tu madre te anhela, arrullándote en sus brazos, paciente espera...sintiendo en su piel tus manitas paciente espera...sentir tus pequeños abrazos.
Mientras nueve meses sea la dulce espera, sueña bebé, en tus aguas de tibia frecura, que tu frágil capullo romperás un día, viendo la luz, y el rostro de tu madre, prodigándote toda su ternura!
Esperaremos con júbilo tu llegada. Será de dicha ese gran día, cuando conozcamos tu carita y a coro te digamos: !!!Bienvenido seas bebé a tu nueva vida!!!
Claudia Alhelí Castillo 22-08-11
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Poeta
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VIAJE DE AMOR
LIEBE VOYAGEUR AMORE VIAGGIATORE O Amor mio eres V V La sangre de mi alma I E Sin nombre Razonable A R Condición, cariño, ternura... J E Un ahora, delante y detrás A I Soy la mitad en la palabra N S Flores de lunas y soles T E Más allá de aceptación y rechazo E N Bajo el a pesar de todo L D Seguimos amaneceres I E Caminamos atardeceres E A Somos aves de campos B M Plumas de arrobamiento E O Mensajeros de alegre tristeza V U Cantos de llanto y esperanza O R Viajeros del amor por el mundo Y T Amor que vale la vida A R Vida diaria encarnada G A Amor mío eres transparente E V Tiempos cálidos y sólidos U E Eres la sangre de mi alma R L La muerte llora sin nosotros A E !El amor y la luz son gemelos! M REISENDE LOVE VIAGGIATORE VIAGGIOAutor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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Mujer
Han hablado de tu invisibilidad y se equivocan. Eres el planeta que orbita a Dios Marmita roja donde fulgura la vida Te yergues hasta el cielo, vertiente enmarañada, Perfumas horizontes, traspasas socavones,
Mujer, Pleamar que inunda mi camino Abrigas en ternura los pies de las ciudades Eres suavidad y fuerza, volcán irreverente Mujer, Cabalgas en mis insomnios Te desean mis manos y mi boca Susurras pasión en tu mirada
Han hablado de tu invisibilidad y se equivocan Las playas que acariciaron tus pies La luna que ilumina tus caderas La flor que perfumó tu pelo acreditan tu presencia poderosa Eres paradigma de fuego fuente primaria de locuras
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Poeta
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