Cuentos :  Al dormirse... (Anticuento)
AL DORMIRSE
(Anticuento)

Escapó de un sueño, escuchando todo,
aquélla hermosa, trenza, dando saltos, en las direcciones de las plumas. ¡Vuela, el gusano!.
El gusano, al reptar culpable del anillo,
la muñeca. ¡Ácida extensión carente del destino,
prohibido!. ¡Liberado quedó!.

Luego...
Insultando el rostro pordiosero limpio del bolsillo, protestando, fabricando, las horas asustadas. (Lentas no duermen iguales). Por el bosque curioso, con la fila en la colina de los insectos, amontonados, impacientes después de muertos, infestados y narrando, anda ante nidos núbil, entre praderas al volar del patio joven.

Al dormir, sé, me dices del soñar saber.
De saber al dormir, sé que sueño, lo sientes,
Y ella, la almohada en los colchones piensa. Cariñosa.
La voz suave dulcemente susurraba a las paredes,
fingiendo abrir cien cerrojos el apetito frondoso,
mensajero visitante sorprendiendo fielmente las vasijas del alfarero. ¡Sueños, del barro, acero!.

El, gusano, lo sabía... En la pasión incierta.
Lo sabía, el gusano... ¡Cierto día ahí!.
En la choza. Entretenida la pobreza adornaba con cerámicas al oxidado aluminio del callejero bote del rincón no conforme aquélla, misma, tarde.
El. ¡Gusano!. Volando en la mirada cuatro paredes, en la vereda cauta, vil bebía la chusma.

Y
Luego, dobló al después, bajo el zapato, con un paquete de entonces, color de un sin embargo, y antes del saborear el no obstante.
El.¡Gusano!.
Sí, sí acaso no lo era... ¡Había dejado de serlo!. En la esencia del gusano solo.
Estuvo... ¡Justo en la mitad de ese instante!
En la orilla perfumada del olvido, del origen.
Entregando las cadenas de las escenas,
al autor popular de las trompetas,
equilibristas, las palabras por lo...menos reflejaban lo contrario. Sin vestir de lujo las galas de moda y la rapiña de las nueces en apuros.
Al
Dormir
Sé... Decía, dormiría la memoria del tiempo inmóvil.
Y...Escapaba entre las líneas de los textos, nocturnas nubes, sábanas ingenuas y sonrisas desflorando los valles que alumbran soles extintos, entre miserables castillos y las astillas hasta desfallecer, el vuelo poético de las ruinas, renovando en los duros latigazos, espinas de preguntas, coronas en torno a la garganta de los tigres, y las cosas regionales escondidas en las faldas de las bodegas, que enzarzadas chillaban.
¡No aquí, hay desperdicios de porcelana!.
Hay grandes cantidades de promesas
del torpe tedio un sexteto dibuja pendulares brumas, y de las orejas nada muerden al silencio, ausentes, más aliviadas, las brumas, dando vueltas a la enorme desgracia ignorada, que declaraba no haber, gracias a la brillantez de su infinita perfección, que se deslizaba entre los muros obscuros, temblando sin remedio de vez en cuando, acariciando al precipicio que contemplaba satisfecho, la quimera del volver a la normalidad, ala desplumada, vuelo del relámpago perenne, y luego al mismo luego dejando atrás, agradeciendo al cielo estar fuera de sí.

¡Al dormir, sé, dijo... Sé decir del sueño vígil!.

Al menos, al más inmenso ínfimo que nada ignora del sabio.
Y piensa no morir viviendo, y menos ahora, que de gusano pasó al polvo. ¡Y en el polvo los gusanos se esfumaban completamente!.
Al dormirse, fue apresado al despertarse,
hecho candado, y al dormirse. ¡Escapó!. Su sueño solo del dormirse ayer.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas surrealistas :  Humanitaria destrucción... (Experimental)
HUMANITARIA DESTRUCCIÓN

Con toda la insignificancia del pequeño
mundo
vienen haciendo las conjeturas,
innumerables quebrantos,
pétreos, en las playas de paz, el arco
iris que nimba,
metas magnánimas. (Subterráneos escombros).
Decían,
conservadores, más allá del vencimiento,
creían ser, omnis-sapienteserpentinos.

¡Humanitarios anhelos, paralelos, desastres!.
A
Lo lejos, de quienes no lo tienen cerca.
Lejos, a las siete de la tarde, se aproximó
el invisible trópico, entre las costillas,
del gnomo, saliendo nada más. Saliendo un poco.
Saliendo del hueco frágil cubierto de secas hojas
vidriosas, por encima del mimbre blanco.

Callaban, metódicos, el triunfo del fracaso.
¡Sin saberlo, lo sentían, los retornos afilando!.

La época, opaca, brilla en la turbiedad.
Tardía, la siguiente campanada, esperaba,
añorando el suceso intrigando al aire,
lastimero otra vez, sutil resorte.
¡Empleado de la incredulidad!.

En la destrucción,
desoladoramente ocultando imposibles evidencias.
La superficie a pintar, libre de polvo,
con un trapo que se escurre.
¡De la válvula tapada, el color vertical del aspersor, y
la letra en lápidas anémicas!.

¡Sí, sí!.

Había algo menos que una voz,
una casi letra,
pálida vereda temerosa,
escuchando ausentes
los pasajeros, silenciosos, acumulando, dispersos,
gestos, el muro triunfal, coronado de atropellos.

Decorando,
cada detalle, álgido, patético.
Respiraba impregnando lapiceros,
oficinas enlatadas, sillones escandalosos.
¡Calles, calles del coraje y antebrazo!.

La humanitaria
Des
Truc
Ccción... Los ventiladores despeinados observan,
las armas extremistas del pañuelo en pedazos.
¡Cada uno, prolongando su cada cual!.(Ya verán).

Y
En el fondo, al vértice de la sinrazón.
¡Sonreía!. Graciosa, en la blusa equivocada,
la brisa víctima, del viejo, desvelo, la opinión
de la luna juzgando, tranquilamente.

¡Humanitaria!. (Ella, la destrucción ofendida).
Quedó. Anunciando una llamada telefónica,
el frente mercantil, el elixir del fracaso mismo.
Y sin tacha, justamente, bajo la ley.
de los malvados, productos del ozono que no dañan.

En la destrucción. Huma-nita-ria.
Para entonces, la sopa se puso fría,
con tanta ligereza en camarones,
sin dentadura, no cabían en la cubeta
de mejillas, las monedas de cuello blanco.
La revista mirada con el filo asomando por la ventana, desnuda, al jugo del primer indómito quejido.

¿Lo ves?___Decía con frecuencia al anochecer
rompiendo la manera, extrañamente,
fuera de tiempo.

En la esquina, súbita, anudó el silencio adherido,
las uñas recién cortadas, el farol entre bugambilias, sentía, reseco, como cabeza de alfiler, el grupo palabreando, desgraciado (sin saberlo). Solo arrastrando la inconsciencia abundante, la multitud ciega y sorda. ¡Azotada!.
Teñida. Por los pesares enormes, entre los rápidos acrílicos, resueltos firmemente, en las tres capas delgadas, perforando las chispas y quemando las llamas, al tacto seco en latas secas.

¡Humanitaria destrucción!.
Soledad programada en los dientes del bolsillo,
en el hambre inerme de cada poro ajeno,
en las ambiciones insaciables del apetito espeso,
en las salidas intermitentes del exterminio.
¡Con los ecos en spray, y silicones del no se ingiera, en aerosol en la consciencia!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas sensuales :  Durazno tibio
Durazno tibio

El durazno al calor del día,
rostro y atavío, deja,
tendiendo al sol mensajero,
vegetal del manto tibio,
con las mejillas en la cintura.
¡Las caricias de la brisa!.
Jardines, encarnados, del durazno.

***Sin disyunción empalagosa***

Atardeceres de gala,
cereza en jarro.
¡Licor, durazneándose___Endatilado!.
Con las huestes enmanzanadas,
sin el tapíz del cielo ofendido.
¡Del pulso generoso que se oculta!.
En el palacio del impulso.

*Con lozana efervescencia*

Castillo profundo en el durazno tibio.
¡Delicia de las entrañas mismas!.
De los bordes sin trampa.
¡Con el plato del apetito plata!.
Cabalgando los manjares compartiendo,
y dando ardiendo a los zafiros.
¡Con todo el tañir del rubí al aliento!.

*Sin inerte indiferencia*

En las mejillas de las plantas.
En los párpados dos lechos.
¡Flecha qué la pasión sacia!.
Destejiendo las vasijas de las ausencias.
Durazno de virginal fragancia, tibio, tibio.
¡Siempre!.
¡Aún después de cualquier antes!.

Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  Aperitivo
APERITIVO

La llave cerró la puerta no lejos.
Las formas brotaban.
Tersas, húmedas, cálidas.
Dijo la noche sigilosamente.
Muslos, germinando, nieves al invierno.
Acercándose al todavía.
¡Alimento del fulgurante sol enlunado!.
Incluso.
Alfombrilla volátil en cada frase.
Hay un amor ancestral pasión.
¡Porqué todo lo demás estaba!.
Completamente claro.

Entre tanto desayunaba.

Sensitivo un plátano, cálida guayaba.
Y... ¡Oh!. El mamey en su jugo.

La mañana, estimulada, conversando.
De la noche, plena, satisfecha.
¡Un par de veces, lo suyo!.

En la palabra de los años.
Las ramas quiebran los frutos.
Las rodillas de las palabras nobles.
¡Disfrutadas!.
Cada noche a su ventana acudiendo.
¡Un pañuelo blanco, sobre nieve!.
Dos nuevos días cubiertos.

Donde del cercas al verlo pasar.
Ondulando lento, rítmico.
El apetito.
¡Abre!.

Pensamientos.
Sentimientos.
Geométricos.
Centímetros.
¡Veinte años atrás!.

Ocupados en la escarchada expresión.
Antes de dormir al tren.
De dichas.
Unas galletas, turgentes, un regalo, plegables.
¡Viva, fresca, la cajita parecía!.
Un té ofreciendo.
Al apetito, imperturbable.
¡Sable contiguo, sin ambigüedades, música,
por largo tiempo,
y aquéllo. ¡Qué el cuerpo aguante!...¡Amada!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  Sublimado lecho
SUBLIMADO LECHO

Por el soñoliento nacarado del olvido.
Cruza inexorable la nieve rosa.
¡El cielo qué la brisa acuna!.
Sin trampas del bostezo enmascarada.
El cauto apetito de la cicuta.
En la gélida pereza murmurante.
Caída de la nada una sombra.
Monarcas solitarios de la mano himnos.
Invocando a los placeres cómplices.

********1********

El olvido vaporoso de los vestidos.
Al nacer del viento fresco.
El humedecido fruto blanco.
Una chispa expone al alma.
¡Al abismo qué reposa!.
Por el desdén de las alturas.
Inquieto al futuro se rinde.
Dulcificando las espirales de las dunas.
Indulgentes y plácidos los rostros.

**********2**********

De la noche olor de nácar.
Por la redondez de los racimos.
Sueños blandos del alma dulce.
¡De ser ávido huésped!.
En el lecho un paladar qué avanza.
Por el pecho de venturas puro.
¡Sin la pasión inerte falsa!.
Con el fluir lácteo tibio.
¡Astronómica y sublime fantasía!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  Fuente de amor
FUENTE DE AMOR

En las olas.
Una fuente. Atrapada. El amor sentía.
En las olas.
Deseaba y pensaba. El amor la fuente.
En las olas.
La frescura dulce. Del manantial.

¡Fuente de Amor!.

En ese lugar donde nace.
Inolvidable y rosado.
Indeleble y azulado.
Evocable y dorado.

¡Fuente de Amor!.

El tiempo del que crece.
A veces tumultuoso, a veces sosegado.
El árbol del que cuelgan.
Fructíferos latidos. Suspiros y recuerdos.

¡Fuente de Amor!.

Con el tiempo. Sensaciones. Grises filigranas.
Saboreados ayeres.
Deleites de blancura enrojecida.
Entre ocasiones.
¡Claveles, rosas y montañas!.

¡Fuente de Amor!.

De las lluvias parejas de surcos.
Enamorados.
Por el manantial. Ilimitado, frenesí, genésico.
Enamorados.
De las tierras fecundas. Lácteas y vegetales.
Enamorados.
Gozan de la repetición nupcial. ¡Semillas!.
Enamorados.
Las parejas de surcos y arados.

¡Fuente de Amor!.

Con el apetito del regreso
En el mundo del siempre de muchas cosas
Con el apetito del regreso
En las olas. Una fuente. Un manantial.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas surrealistas :  Salvándose del hambre ...
SALVÁNDOSE DEL HAMBRE

El amado empeño arroya la corriente.
Desbaratando la cortina.
Antes de querer___¡Ser invisible!.

Pañuelos panales abejorros deudos,
ventanales enlamados ríos desplomados,
hora y hora, reza abrazada incapaz,
la gabardina dejada como prenda,
en la tienda de las velas barcos,
y demás, están las cortinas invisibles.

¡Comer!___Si antes, posteriores hambres,
lo premian apremiantes,
después de desnutrirlos.
¡Representeros encementados!.
Carcomidos harapientos inflamantes.
¡Otra vez ayeres mejores!.
Descomiéndose los huesos ilusos.
De cavernícolas arrullos secos.
¡Sin son ni ton!.

Salvo al alba.
Y canto al sol. ¡Obscurecido!.
Y... ¡Ya!.

Ya descansados y de fácil uso,
absoluto in culpa,
pleno y matemático,
becerro y llanura la blancura,
verbigracia acerado el velo flamea.

Del hambre salvado empeñado.
Todo... ¡Hasta el hambre!.
En la tienda tiende y extiende.

Y como de milagro.
Mil campos sueñan encampanadosss.

Por un allá de cualquier parte.
Al co-razonable.
Y
¡Oh!___De milenios conocidos.
Esenios luego desconocidos encarnan.

Por
...El huso la rueca móvil.
...Enmienda inmundos subterráneosss.
...Y modificaciones algebráicas.
...¡Prolongados cauterios!.
...Corriente.
...Acuosa de básico contexto.
¡Coco, dátil, insólito, inconsútil!.

Aquí, también, hay, ya llamas,
falamas, jirafas, camellos y caballos.

Delfines inequívocas sardinas.
¡Lenición de macrolengua!.
Proxémico y protónico.
Desnutridos insalvables sepulturas.
Monturas montañas leños añejos.

El amor enova doestrella lejana
Puesque...
Con una mano ama dice,
y mata luego con la otra silencio.
¡Todo el apetito pequeñito!.

Amorido hombreado por la espalda.
¡Es mejor amarse satisfecho!.
El hambre, alambre hiela.
Cualquier fuegooo.

Amores herraduras cerrojos,
encadenadas restas multiplicaciones,
divisiones humos diplomáticos,
periódicos inventos auténticos,
imperdibles genitales lacónicos.

Por amor del alba.
Salvaje viaja el vientre.
Y
Mañana
En la mañana morirá ante,
el naciente sol de la noche tardía.
La luna del espejo que refleja.
¡Ése, éste, aquél!. Tiempo, tiempo.

Tiempo
De
Relojes paralíticos.
Como lirios, nardos, azucenas.
Y claveles sin los cielosss.

Hambre, hombre, el hambre.
En los hombros lleva el vientre.

Y siente, sálvate consciente.
Cien consciencias en la mente.
Ya no lamentos.

Deja ese caudal, puntual, redondo,
de la superficie lánguida.
que allá halla insensible.
Y...
¡Termina como sombra su caballo!.

Y no fabricándose.
La pobreza cadavérica del alma.
¡En la luz del ataúd!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta