Poemas :  Empobrecimiento cierto
EMPOBRECIMIENTO CIERTO

Al salir por donde la entrada es posible,
e imposible perderse ignorado,
e intangible parecer ígneo,
con tan poco hielo frío,
como mucha humedad acuosa.

¡Qué acusa que acosa que excusa!.

En el fondo más elevado, intermedio,
En la cúspide más honda, incipiente, está,
En el empobrecimiento cierto. ¡Cierto, cierto!.

___ Palpitante pérdida pasmosa ___

___ Vitrificada gloria vana ___

En el empobrecimiento cierto. ¡Cierto, cierto!.

**********

Ya que en la historia verdadera está
todo cuanto en el pasado se contiene.
Y no se dice a conveniencia.
Ni se inventa.
Y no se oculta contingente.
Ni deforma, ni suprime.

Amputando a la memoria.
El equilibrio.
Ala manera del vuelo.
De la tinta de la pluma.
Ala moda del cielo.
Infinito inventado inveterado.

¡Finito viento veterano!.
___ Al modo del hombre ___
De la espada de la espuma.

___ ¡Al hacer el océano plano y pobre! ___



Autor : Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  Arromboidados... (Visual experimental)
ARROMBOIDADOS

Y
él
con
ella
danza
debajo
enviada
impávida
iluminada
legendaria
orgullosa
perpetua
posible
proeza
ideal
será
con
él
Y

Romboidal espiral pasional
Amándose sintiéndose rosándose
Encaracolados poliédricos humanos

Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez

Referencia útil es
https://es.wikipedia.org/wiki/Poes%C3%ADa_visual
Poeta

Textos :  Hablando duro dormido... (Neosurrealista)
HABLANDO DURO DORMIDO

Corrió tan extraño que pensé despertar tan rápido
como fuera posible. Ese sueño se escondió en el
corazón del tiempo azul, bajo la almohada dormida.
El suelo está trepando con el temor labriego del
gusano, y un desnudo recuerdo, inmortal en el aire
asfixiado por las trompetas de las piedras piadosas,
que destejen la obscuridad bajo el agua perseguida
por las débiles pestañas. ¡Duro hablando!.
Pues el mástil brotaba explosivo, las cataratas tejían metálicos anhelos, y los pantanos lloraban entre sus jaulas de espuma, dejando gotear a las campanas del embrujo huesudo.
Lívida la vida y espléndida la tumba.

¡No, no despertaré al inclemente hueco feliz!.
Bien lo sabe cualquier éter, en la fruta desmayada,
tanto como por las charcas del ámbar temblorosas,
y entre los milagros ancianos con la envoltura urgente y la raíz por guarida. ¡Es tan difícil imitarse sin estar desesperando a las auroras del cereal desayunado!.
Ninguna fórmula seca, saca al saco que aprieta, ni al cemento en un invierno de terciopelo deteriorado por el fuego, que inmisericorde se jacta del siniestro bosque estrangulado por la más mínima pesadilla que adormece, inmóvil al almendro sobre la alfombra de las nebulosas.

Pensándolo bien, el color del perfume es tan oportuno por el vidrio, y el rencor de la mañana olvidada, que al reloj nada le importa, que aspira tenaz el aliento de los fantasmas, y habla con las letras de palabras, que ligeras desconoce, de la angustia, que llueve seca, entre la pasión presa de una retina agotada por el siglo perdida.

Pero, al igual que algunas plantas, ciertos sillones son incapaces de producir sus propias ideas, y depositarlas en el intestino del destino por donde el rocío cuelga la voz extendida en cien hectáreas. Además, la forma es vigorosa y tiene la esencia de roedor, acosado entre candados de bolsillo con plumas de gallina, y la figura
de un osito. Y precisamente, a ésto me refería, en cuanto al uso de la energía después de un año, y que la tradición estipula hasta la cumbre, que deslumbra a las reliquias del agua, incluidas la oficina organizada por el escritorio del menosprecio de las tejas verdes, y el mandamiento
adinerado, súbdito letal del valle de las sombras, y del césped poco apetecible que emigra errático en las hojas, y en las protuberancias del tizón que se adueña duro de los alfileres de las náuticas empresas veterano.

Si bien, algunos colchones lo creen fácil,
hablando duro.
Y más, con la naturaleza audaz,
del amplio equipamiento
y el lujo de una desesperanza poderosa,
al mostrar rasgos rudimentarios de pelambre,
tal vez a manera de aislante,
sobre todo para mantenerse, y nutrirse al dormirse.

No obstante, los escarabajos difieren de los intereses de los nemátodos, y las hormigas en los túneles insidiosos después de consumidos.
Pero, hablando claro,
e ignorando lo anterior, la tormenta estaba casi en una silla en bancarrota, y al despertar exige la excavación oxidada del arroz jubilado, donde el divide y vencerás da paso a una nueva era de laberintos comunes, que dan a su vez rienda suelta, a todo lo que no está claro,
en la córnea con su limbo implantado, sobre todo para probar los límites del embrión por docenas.

Hablando duro, bien sé que ésto no será la clave, a pesar de la estela conmemorativa erigida gracias a la compasión del telón de fondo, ni al episodio del mosaico libre de las tortugas, donde el guía, gravita en la tortura de los tibios,
sudores que se opacan, y se entristecen,
con buen apetito.
Recuerda, me dicen: Hay que tener al perdón como amigo, y esclavo, como el veneno letal,
lanzado al abismo del olvido.

Ya solo los cerros cuentan la historia,
de las cuevas, ofendidas, ennumerando,
los más importantes desempleos de los platos,
que comulgan con los astros, resignados, valerosos y sumisos.

Finalmente, y como no es posible dar marcha atrás, la vela salió por la penumbra, optó por soltar su luz, y enmudeció blandamente despierta.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas de naturaleza :  Semblante Invernal
SEMBLANTE INVERNAL

La capa tirará este invierno.
De cálida blancura.
En el verdor encopado del bosque.
Desfasado.
Cómo se tiró de la nube a la pradera.
Un copo.
La placentera frescura.
Congraciada.
Por la humedad cristalina del viento.
Investido.
Por el invernadero.
Como.
Camino____Entre mañanas.
¡Qué las tardes duermen!.
¡Qué los ojos callan!.

Semblante...Invernal.

Puente____Entre noches.
¡Qué los inviernos envejecen!.
¡Qué los veranos enfundan!.

Como
Estética de fúnebres notas.
Empero.
Escucha el rostro del tiempo.
Y
Acaricia la sonrisa del fondo.
¡Tan pronto!.
Cultiva el perfume del vuelo.
Al cerrar la noche.

Semblante Invernal Semblante.

Planta la sandalia del camino.
Dónde.
Siembra el abrazo del consuelo.
Invernal.
Entre las rendijas del posible.
Semblante.
¡Entre los porqués qué se suman!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas de introspectíon :  Solamente indescriptible
Solamente Indescriptible

¿Qué soy cuándo dejo de ser humano?.
La vida.
En cualquier parte.
¡Danzando!.
Luz y obscuridad.
¡Amándose!.

In
Des
Crip
Tiblemente. ¡Amándose!.

Con
Todo el vacío posible.
¡Del ser humano!.
Con
Nada del completo imposible.
En
El vivir... ¡Solamente humano!.

¡En el más allá del más allá!.
In
Des
Crip
Tible. ¡Solamente!.

En
La soledad mayúscula del grupo.
En
La compañía minúscula de todos.

¿Qué hacer entonces?.
Nada. Y solo ser. Lo que somos.
Y
Luego
Espera solamente lo inesperado.
Y
Luego
Preparado para lo imprevisible.

¿Cuándo?.
__¡Nunca después de lo qué vendrá!.

¿Cómo?.
__¡Siempre antes de lo qué vino!.

Cuando
Se
Deja
De
Ser
Humano. Se es, solamente.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta