Poemas :  Recovecos
RECOVECOS

Por
El
Insomnio
¡Qué vive!
Fuera del valle... Recov...Ecos
Dónde
El lápiz a la mano escribe
Todo lo que hubo fosforescido
Del papel en la sombra blanco

De los que nada fosforescerán ya más... Ni llamas.
Del olvido contundente
Arden veinte escándalos viviendo...¡Recovecos!
¿Llamas, llamas acaso al fuego, más ya?
Por la luminosa seducción del eco

Dónde
Llamas fueron de lo que fosforesció y murió
¡Entre la más abundante injusticia!
Del encarcelamiento sin fronteras del eco
Miles, miles, hieles, hieles, recovecos infinitos

¡Resonantes!
Al breve febril trecho
El inquieto fuerte libro... La voz anaranjada
La espina germina... Del culpable letal fugacidad
¡Más allá de la mirada!... Miriadas de inocencias
El párpado no otro es...¡Más allá de la mirada!
Y por lo que agradeciese del desagrado
¡La siembra de seca sangre!... Ecos, recovecos
Entre
La pestaña del apoyo
Entre
La ofrenda lucidez del cautiverio
El cauterio escribe con sus pasos
Para beber del abismo el árbol

De la fuga mansa un lago... ¡Sangre, sangre, ecos!
Recovecos... ¡Qué recoge al corazón la tierra!
Como si todo lo sangrado hubiere agradecido sagrado... El mismo abismo en cada latido
Por los nómadas tejado dulce
Ágata desciende al fondo

Al peso penetrante del ramaje
¡En la noche que transmuta!...Cualquier aurora,
sólo fúnebre la retina huele y duele, impotente.
Al olvido del papel de la justicia hecha añicos
Anegada en el semblante qué anubla todo cielo
¡Cuando la ansiedad aflige, y deseca!
Al extremo de los portales... Recovecos infames
En aquél regazo al rincón inerme, inerte, agudo.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  Con los ojos de la hermandad
Con los ojos de la hermandad
(Desde el respeto, en el inicio de la celebración del Ramadán 2012 para los lectores de Nurain Magazine)




Dicen que abren el día con cada amanecer,

y dicen que en él, en voluntaria ofrenda,

entregan y se entregan a una verdad

que también los hace libres y grandes;

dicen que son felices amando y compartiendo,

-también en el dolor- sintiéndose hijos de la divina renuncia;

dicen que miran y escuchan con las manos abiertas

como aguantando el cielo y abriendo los campos,

de rodillas como quién no puede con el peso de tanta soledad;

que hablan con el corazón cambiando lo fútil de sus pasos

por toda la grandeza que saben les espera.



Dicen que sus plegarias se marchan tras cada ocaso

dejando la grandeza como respuesta al sacrificio;

dicen que la alegría sale por los ojos y las manos,

y que pegadas al corazón, se abren y se buscan

inventando el nuevo abrazo en este –otro- nuevo mundo.

Dicen que sus cánticos son versos de paz,

perdidos entre estrofas que ningún poeta supo escribir;

y dicen que la vida y la muerte se mezclan

confundiendo los momentos,

llevando la vida donde vive la muerte,

dejando la muerte donde se desprecia la vida.



Me piden que escriba un poema

que hable de lo que veo;

que mis versos sean caricia en este día,

me piden que con ellos comparta su dicha

y con ellos sienta la paz vestida quizá con otra cara.



Aquí os dejo mis versos - oración de poeta-

desde el respeto y la esperanza

que nacieron de una verdad, de esa tan grande

que veo con los ojos de la hermandad.





©jpellicer
Poeta