Poemas :  Piadoso torbellino
PIADOSO TORBELLINO...

Di
Vi
No...¡Aire libre!.

-Unter freiem Himmel, open air, en plein air-
Con
To
Da
Piedad... Mitleid, pitié, piedade, pity, pietá.

¿Es acaso el corazón de Eolo, nuevo Bóreas?.
¡Vida, aire, viento, aliento!.
Caracol cortado.
Ehécatl, ik, uni.

De
¡Lo inmutable transformado!.
Lo
Qué...
Ya no fue más
lo que sería
del retorcido noble aliento una quimera.[/center]
¡Oh!.
El mismo aliento que nunca tuvo el viento.
¡Oh!.
En el vientre de la tierra.
En el humo del fuego.
En el mar del agua.

¡Piadoso torbellino!.

¡Encima y desde la profundidad altísima!.
En la humanidad.
La fe perdió.
La convicción.

Aunque el viento fue demasiado tarde al anochecer de la mañana,
en los ángulos oscuros,
brota la luz más profunda bajo tierra,
de lo demasiado eterno,
la torre silbará un poco más,
transitoria por el coro,
donde renacen las balanzas,
y los acuarios ahogados,
entre las voces gemelas, que percibían,
el tercer antes, primero laureado,
con la tremebunda falsía,
y la voz vibrante y clara contrariando.

En las noches,
fascinantes,
demagógicas y francas,
imprescindibles,
del invierno pedagógico,
reminiscencia,
hay un medroso pluvioso,
efervescente,
por la desierta plaza,
inquisitiva,
que se atreve a cruzar,
invertebrada,
al divisar dadivoso,
al fango peñascoso,
al ambicioso obtuso,
el paso incómodo,
aceleraba.

¡Con cráteres exóticos de lástima!.

Y no faltó nada antes de iluminarse,
toda la superficie de la noche,
una quebrada varilla,
de conjunción simple nadería,
que en el torno retrógrado sepulta,
solo sombras de los escombros.

Ya dijese luego, desde la profundidad,
altísima, por ésta humanidad la fe,
divina ha perdido prestigio,
con legendarias indulgencias, tardías,
en la incorporación de lodo,
lengüeta halagüeña, coagulado fosfórico,
en la mañana excesiva, de la poca tarde,
el que poco existe polvoriento.

¡Remolino clemente!.
¡Fervorosa lástima volátil!.

Del pasado hacia el pasado,
en el pasado ver...
La punta del fondo.
La nada de los nuncas.
Recibiendo al jamás siempre.
¡Cómo todo piadoso torbellino!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta