Frases y pensamientos :  La derecha
Sorprende que la ultraderecha fascista en América Latina, a pesar de sus vástagos poder acceder a la mejor educación, no logre entender los principios básicos de los emergentes modelos de gobierno con alta sensibilidad social.

Concedamos que existe por ejemplo en la Argentina, en base a estudios tanto oficiales como independientes que suelen diferir cuantitativamente pero no tanto en las tendencias, un deterioro en el nivel de educación en la juventud en la última década y un aumento en la pobreza. Pero lo que la derecha miope no logra visualizar es que además de cargar con el enorme “viento en contra” suministrado por la rancia crema capitalista enraizada en la región, se deben reconstruír aparatos educativos y de bienestar social históricamente mal diseñados. En los regímenes populares, el pueblo debe sufrir por largos períodos para edificar un futuro mejor. Tal es el caso de Cuba, que con seguridad tiene su mejor historia por delante, a pesar del capital genocida que la bloquea.

Se habla mucho y mal del presunto enriquecimiento ilícito de Cristina Fernández de Kirchner. En primer lugar, la causa fue sepultada por un poder independiente al poder ejecutivo, la justicia federal. En segundo lugar (y esto el capital lo debería entender mucho mejor) hace falta acumular un cierto nivel de riqueza para acceder a los estratos de poder y luego gobernar para el pueblo. Es triste ver a Mujica, el presidente de Uruguay, realizar tanta publicidad con una austeridad personal que no deja de anunciarse a cuatro vientos por su círculo de aplaudidores.

Se critica también al chavismo por otorgarle a Cuba mucho más petróleo que el necesario para el consumo interno. Alinearse con la región con la entrega de incentivos estratégicos nunca fue y será “vender la patria” o regalar la soberanía, señores de cuello duro: Cuba a cambio apuntala el sistema de salud de Venezuela, dado que sus doctorcitos se han ido en masa a Miami.

En cuanto al petróleo, la pusilánime derecha jamás entenderá la clara maniobra de deshacerse de Repsol para luego entablar acuerdos con Chevron: una forma de aplicar el sagrado principio del General Mosconi, de que un recurso natural es de la patria, es precisamente aprovecharse con astucia de la avaricia del capital: usarlo y descartarlo como sea conveniente, en el momento oportuno.

Hay otros temas, que se deben resaltar a su momento mientras la cortedad mental prepondere en la derecha.
Poeta

Poemas surrealistas :  Oda a un cerillo
Oda a un cerillo

Yo no sé. ¡Cerillo!
Si llevo
Enroscada una serpiente, un
Ángel caído... ¡Qué tú cerillo...
Enciendes!
En el fuego
Perdido de una llama. Por
la mañana, una montaña. Yo no
sé.

Caído han los ángeles. ¡Del cielo!.
Azul, dolor, muerte, sangre,
abundante, ser, infinito...
¿Y yo?.
No sé, nada, cerillo, nada,
junto al pez, de tu paz.
De tu llama, perdido.
¡A la izquierda!. Es como
un cero, siempre. Nada, nada.
En el océano de mortales.
¡Derechas chuecas siempre!.

Número
Sin valor
¡Para luchar!
¿Con ésa, retorcida, cruel, curva de círculos derechos?
¡Qué ciegos, ojos, no ven!
¿Dónde?
El valor ha volado
¿Vuela, acaso, muerto ya?
Justo, alado
Y en el fuego
Perdido
La llama, muere, ser, infinito.

¿Y yo?.
Amo, cada serpiente, cada pluma
Con la
Justa sangre... ¿Qué me muere?.
Sí, no vivo, justamente,
por el fuego.
¡Verdadero!. De ti, flama.

Y... ¡Cerillo!
¿O, eres, unillo... Unido?
Unillo, simple fantasía
Incomprensible, absurdo.
Injusto, solo soledad.
Unida entre infinitos.
¡Unido!. Sólo.
¡Como yo!.
Enroscado... ¡A mí, cerillo!.

Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas de reflexíon :  Venerable insignificancia
Venerable Insignificancia

A los lados de cada derecha hay cuchillos.
Acariciando flores de piedra y hocicos.
¡De las cenizas, agonizantes!.

A los lados del mar de lunas.
A los lados del hambre y huesos.
A los lados del humanoide.

En aquél lado, hay lodo de pantano.
De oreja a oreja por éste siglejo.
Y los muertos créditos aman todo sapo.

En aquél tumulto de hipopótamos dorados,
hay proyectos de manómetros pingüinos.
¡Ya empaquetado cada órgano se vende!.

Pero siguen los andrajos muelles y postes,
¡Agitando cada cuna destazada!.
Filtrando a una lombriz hebra.

Pero nadie allá, vomita lo podrido,
de la cera y los gusanos.
¡Plata, plata y solo plata!.
¿O será oro, de esqueletos en el alma?.

¿Cuándo, y hasta cuándo?.
El
Alba
Ni a soñar. ¡Se atreve!.

Son los otros.
¡Siempre son los otros!.
A manos llenas---¡Pulpos idiotas!.
¡Nadie los degüella!.
Han perdido la cabeza.

El último pedernal se seca.
¡La última consciencia muere!.
Y
A los lados.
¡Sus hermanos!.

Venerable
Adiós
Insignificante.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta