|
[img width=300]http://rodrijorda.files.wordpress.com/2013/03/crisalida.jpg?w=630[/img]
Comenzó a tejerse desde el corazón, cuando lo oculté para que no se viera; y se fue hilvanando quimera a quimera, atendiendo sólo a la sinrazón, escuchando sólo la razón primera: ocultar mi alma tras de un armazón. Y que nada lograse que otra vez sufriera.
Y busqué la seda de muchas maneras. A mí alrededor, fue gente tan válida, quien tejiendo conmigo la cápsula cálida, fueron construyendo para que tuviera mi gran escondite, la nueva reválida. Y así de esta forma porque no sintiera, acabé viviendo como una crisálida.
Y ahora, oculto tras esta envoltura, soy sólo interior en un mundo aislado. A veces oigo voces en el otro lado, voces que reflejan risas o amarguras, palabras que en mi son sólo pasado. Que ya nada siento de aquella locura, o es que nada siento de nada animado.
Pero en el oriente, cuando el sol se inquieta por nacer y tomar en el cielo altura, al trasluz del capullo veo una figura. Y me vuelve un nudo que mi pecho aprieta. ¡Hay alguien que mira por una abertura! ¡Hay alguien que quiere aumentar la grieta! Y sacarme de esta cómoda amargura.
¡Sigue! ¡No te rindas! ¡Rompe esta falacia! Que el mundo no es mundo sin lluvia y tormenta, sin frío y calor, sin amor o afrenta. Sin sus acomodos y sus acrobacias. ¡Ven! Araña mi máscara con tanta eficacia, y deja desnuda mi alma, que sienta, que sólo con vida la vida se sacia.
|
Poeta
|
|
[img width=300]http://api.ning.com/files/Y-6c8O6EPx*bnp4GKk-c-HvGc*k6K7DPzKQ-o2sQ3EY674Vx10qEwHygN0xrV4ZNUhU58CSi3PtKWNkIUL6hSPtebK5IIoRb/11xj1lh4.gif[/img]
Cerca de la orilla, de mi campo de sueños, escondí mi tesoro, que en el tiempo he olvidado. Y dejé el corazón en la casa de empeños.
Salí a buscar la llama de la luz de la gloria. Encontré la fortuna más allá de aquel valle, y nadé en las ciudades embriagado de euforia.
Dominé los sentidos y enfrié las pasiones. Y compré los deseos que quisieron venderme. Busqué los sentimientos con meras transacciones.
Más allá de los días tan cargados de horas, ya no sé lo que quiero, ya no sé que me mueve. Que mi vida está escrita con notas previsoras.
Y entonces de su vientre, como nacen las flores de una tierra fecunda, que fecunda la vida, brota un ser que te muestra pasados esplendores.
Que trae en su sonrisa el cofre que enterraste, porque su primer camino fue llegar a la tienda, y poner en su pecho aquello que empeñaste
|
Poeta
|
|
[img width=300]http://s1.1zoom.me/prev/348/347712.jpg[/img]
Dejaré de no reír, que es la risa, el néctar que nos queda de la infancia, que el mundo va secando con su prisa. Que mantenga mi alma esta fragancia, y reír cuando mire a las estrellas, por saber que un principito en la distancia, ríe feliz con su rosa en una de ellas.
Ríe el niño en su alegría, y es su sonrisa tan bella, que es al alma la armonía.
Ríe la joven doncella, si la agasaja el amor que en sus pupilas destella
Ríe el loco en el fragor, cuando su mundo imagina que todo es de otro color.
Y ríe la bailarina, al recibir los aplausos que el éxito vaticinan.
¿Quién no quiere a los payasos cuando nos hacen reír? ¿Quién no anda tras los pasos
de un mundo que ha de venir en el que la alegría sea lo que poder elegir?
Que suba en mí la marea de una risa que contagia. Que quien me mire en mi vea
que el universo presagia. que al mundo, del Creador , es la risa la gran magia.
Yo sólo quiero el favor: dejemos de no reír, que el mundo será mejor.
|
Poeta
|
|
Yo busqué en mi corazón, los flashes de mi niñez, los recuerdos, que no guardó la razón, que esquiva la candidez, de los sueños.
Y volví a sentir los besos que con cariño me daba la señora, mi abuela que hasta los huesos su vida nos dedicaba, hora a hora.
Sentí querer ser mi hermano, que por mayor era sabio y hechicero, y cogido de su mano, era inmune a los agravios, y los miedos.
Vi la sonrisa en la boca, de la niña que esquivaba, mi mirar. Y cuyo nombre en la roca, del jardín donde jugaba fui a grabar.
Sentí el estremecimiento que tuve al ver la primera luz fugaz, la estrella que el firmamento, cruzó como alma viajera, tan tenaz.
Volví a sentir que soñaba, borrar el mal de la tierra, con su ayuda. Que del mundo se alejara, el hambre, la peste, la guerra, y la locura.
Sentí aquel agua tan fría, del río donde nadaba los veranos. Agua llena de alegría, que mis males se llevaba tan lejanos.
Ven a buscarme niñez. Y muéstrame sensaciones, que he olvidado. Que al llegar la madurez, pueda cantar las canciones, que he cantado.
|
Poeta
|
|
Si en mi corazón tu beso, tengo preso, y no lo dejo salir. Es porque si se escapara, él dejara, para siempre de latir.
Si vieras que mis silencios, son el precio, por siempre pensar en ti. No me los reprocharías, pues sabrías, mi callado frenesí.
|
Poeta
|
|
Hoy siento que mi alma es pasajera, de un viaje universal que se está haciendo. Y sé que ahora veré de otra manera, todo cuanto a mi lado va naciendo.
Ya no puedo sentirme indiferente, ante todo cuento la vida trae y tiene. Y quiero que palpite en mí la mente: Que corazón, el término razón contiene.
Naturaleza fractal, soy una parte, de la cadena que forma tu secuencia, tan pequeño en el total, tan importante, si por todo, todo es, la consecuencia.
Nada es ajeno a mí, está en mi vida. Y así lo he de sentir, instante a instante. Cuando el día me dé su bienvenida, buscaré tu calor, estrella errante
|
Poeta
|
|
[img width=300]http://1.bp.blogspot.com/-CqHglwKkSos/U5M03s0zzYI/AAAAAAAACsM/DVBG0TX5ZyE/s1600/10339731_259574694227005_3410597910386764728_n.jpg[/img]
Tú, mujer, como el mar en esta orilla, vas entregando el alma a borbotones. Y como el mar tú susurras las canciones Y como el mar dentro escondes maravillas.
Y yo que busco los tesoros que atesoras, quiero bajar a pulmón por tus entrañas; bucear por tus valles y montañas, y sentir tu inmensidad embriagadora.
Como el mar, tú mujer, en ocasiones, mi bajel haces ir a la deriva. Y cruzar arrecifes y atolones.
No permitas, mujer, que mientras viva, no dispute en mi alma las razones, por entregarme a este mar que me cautiva.
|
Poeta
|
|
No son sólo tus ojos los que me hechizan. Que nada hay más bonito que tu sonrisa, si en un momento, me traslada a otro mundo: tu firmamento.
Diecinueve veranos miles de días. Escuchando en las noches las melodías, tan seductoras, que mi dicha es oírlas hora tras hora.
Tu perfume es mi aire apasionado. Vapores de los sueños que hemos soñado. De amaneceres, que traen en su colores nuevos placeres.
Déjame que te abrace y que te bese. Que todo mi ser quiere que tú lo apreses. Dulce prisión, donde habitará siempre mi corazón.
|
Poeta
|
|
[img width=300]http://tuscartasdeamor.com/wp-content/uploads/2014/01/amor-imposible.jpeg[/img]
¡Oh corazón, mi corazón! Vuelve a darme tus latidos musicales. Que este mundo de razón va olvidando los sentidos naturales.
Déjame ver las estrellas con unos ojos pequeños, asombrados. Que quieran buscar en ellas un mundo que aún tenga reinos encantados.
Volver a sentir que siento el aire que en los pulmones, se desboca. Formando parte del viento, que nada en los atolones de su boca.
Llorar por amaneceres que despierten los sentidos hechizados. Provocando mil placeres que en alma eran latidos olvidados.
Bañarme en un mar azul, junto a peces de colores a mi lado. Y volar entre ese tul que son nubes de vapores evocados.
Sentirme parte de todo amando cada momento de la vida. sabiendo que en cualquier modo sólo es real si la siento compartida.
¡Corazón, mi corazón! No seas reloj que calibre sólo tiempo. Se motor de la emoción, del sentir que me haga libre, mi sustento.
|
Poeta
|
|
.[img width=300]http://sp4.fotolog.com/photo/4/32/2/jst4u/1194654444_f.jpg[/img]
No vengas soledad, que no te espero. Hoy quiero aislarme de este interior mío. Y aceptar de la vida el desafío, de sentir cuanto vive bajo el cielo.
No vengas soledad, que traes nostalgias, de caminantes del camino que no veo. Y que aún caminen en mí, eso deseo, con otros que aún recorren las distancias.
Quiero reír y llorar junto a la gente. No vengas soledad, que no es el día. Que no quiero ser yo, sólo esta mente.
No vengas soledad que al alma mía, necesita beber siempre en la fuente, que otros llenan del agua de alegría
|
Poeta
|
|