|
Debilidad que en mi fuerza dormita, Enhebrando lagrimas mi dolor suscita, Jaez infinita de quien caer necesita, Almacenando derrotas mi corazón palpita. Narcótico azar, dueño de toda causalidad, Dividendo inherente a nuestra ingenua humanidad, Opaca todo sentimiento con su cruel ruindad. Séquito de la eterna ignorancia, Albúmina que alimenta la creciente avaricia. Nace, crece y se desarrolla, Grita, llora pide que alguien la socorra, Resistiendo una y otra vez la modorra, Apegándose a la deshonra, Renace la conciencia en la eterna mazmorra. Sentido a sentido hemos perdido, Ultrajando la inocencia con nuestro descuido, Saboreamos lo que ha perecido. Hirsutas resultan nuestras creencias, Escamando la tan verdadera falsedad, Revestido en una fulgurante mezquindad, Ilusiones rotas desprecias. Dueños fuimos de la sentencia, Arrogante fervor de la falencia, Socava nuestra natural esencia. Excepcional origen de la perdición, Necesaria se hace la congruente traición. Taciturnos ruegos soltamos con alevosía, Incubando en nuestro corazón renovada felonía.
|
Poeta
|
|
Es un intenso fluido que ha penetrado lo más sensible de mi cuerpo, y me hace sentir extraño. ¿Estaré enamorado?
Pero enamorado... ¿De quién? ¡Oh, puede ser de ella! Si de ella, la que siempre me pregunta: ¿Estás bien?
Aún no la conozco, solo sé de ella cada vez que me llama, y nunca de mí se ha olvidado. ¿Será acaso que me ama?
Mi palpitar está acelerado. ¡Necesito saber de ella! Cada vez es más intenso el deseo de hablarle y escuchar su dulce voz tan bella.
No he podido ver su rostro, pero siento que la necesito. En lo más profundo de su corazón me aguarda el néctar de un amor exquisito.
Eres luz de una pasión de un corazón moribundo, que estando aislado en otro mundo vino a nacer en tu ilusión.
Julio Medina 2004
|
Poeta
|
|
[img width=600]http://1.bp.blogspot.com/__DK83otxQ94/Somj_rKTgcI/AAAAAAAAIVc/QcBCKBcLWxY/s400/OQAAAH2GRlU2aD6TRKYIDnmLCwK0CNF2Yn10FvpBlZjNJpTS7tLASrWcUHVgrkmUTpDVjl0JWMwkXBY7wDnD8gEoxt4Am1T1UKbtOhpp8j4_PdtMSu-v8z78uZhI.jpg[/img]
Este amor grita e rasga meu peito, luar de estrelas querendo nascer, surtindo n'alma muda reverso efeito, fazendo o dia de primavera perecer.
Sorte, deus entre os homens, perfeito ! Amor que me envolve, me faz renascer... Destino traiçoeiro, tramando com jeito, os obstáculos para nos fazer sofrer.
Paixão à primeira vista, envolveu-me, no rastro inebriante da tua magia, me faz chorar, me faz feliz, me faz viver...
E quando o dia bendito vier, leva-me para tua vida, minha mais bela poesia, me aceita, é do teu lado que sonho morrer.
|
Poeta
|
|
Soaroir de Campos São Paulo - 10-10-10
exercício para o mote: a verdade está na cara
[img width=170]http://t3.gstatic.com/images?q=tbn:bTobsQXkFCNmTM:[/img] imagem/google
Preciso me dizer algumas verdades
Não vem de ninguém a dor - minha tristeza!
Não vem de ninguém Esse vício triste da má sorte Como a da pomba que se debate Nas afiadas garras do falcão
Andam por ai espalhadas - respostas Às vítimas do próprio Tártaro Cuja verdade não está lá fora...
continua...
|
Poeta
|
|
Aquel día te cruzaste conmigo, y en ti no he dejado de pensar. De los sueños no te he podido apartar, eres deseo y castigo.
Te amo en el más absurdo secreto ocultando el amor que he llegado a sentir, al corazón no se le puede mentir a pesar de todo, he sido discreto.
¿Para qué seguir pensando si alguna vez podré colmarte de abrazos, y dormir con la ilusión de tenerte entre mis brazos, mientras a escondidas te sigo amando?
Amarte en silencio es mi delito, sufriendo el dolor de tu desprecio. ¿Por qué me enamoré como un necio de un amor que me queda chiquito?
Julio Medina 11 de octubre del 2010
|
Poeta
|
|
Pétalo a pétalo descubro lo inevitable, Cae sobre mi frente una fugaz estrella sorda, Mientras mi sed de llorar desborda, Prurito constante y censurable. Indicio plural de la intensa vanidad, Te llena la pedantería como una triste deidad, Embebido en la discordia, La discrepancia me consume a rebanadas. Mientras recuerdo la dulzura mecanizada, De tus amplias bocanadas de amor, Me deslizo hacia el fuliginoso continente, Con tan solo una idea en mi mente, Continuar, olvidar, desgarrar la memoria, Hasta lograr sangrar nuestra historia, Que sea triunfo y sea gloria, Que nos rodee la sucia escoria. Vertientes sanguinolentas que despiertan, Torrentes de vanidad, egoísmo y mezquindad, Comienzan a aumentar su caudal, Mientras tu te ríes en la cama. Los sueños no te agobian, Las noches no se alargan, Los días no pasan como sueños, Mientras tu no quieres despertar ya. Solo yo estoy aquí, entre suspiros, Mientras hago caso a mis delirios, Te miro y no concibo, Que me tengas en el olvido.
|
Poeta
|
|
Desesperados por entender, Intentamos evitar la dolorosa, Enfermiza y estruendosa realidad, Aturdidos por la incesante codicia, Que día a día se vuelve la franquicia.
La gente y sus ideas me desquicia, La bondad en la calle se queda, Pidiendo abrigo tu puerta golpea.
Abrigo a cambio de felicidad... Que duro es entender!
Como es que logras extender, Los brazos de tu cruda realidad, Mientras mis abrazos de cristal, Se desintegran en el mar.
Cada despertar, un nuevo comenzar, Una nueva oportunidad, Para que logremos madurar Pero tu mezquina gravedad, Ya no sabe donde encontrar, Para falsas redenciones, un altar.
|
Poeta
|
|
Cuando llega la noche serena la nostalgia invade mi pensamiento, dormir sin ti no es todo lo que siento, es la ausencia la causante de mis penas.
Esa imagen vibrante que me llena enciende una luz inolvidable en mi recuerdo, en la alcoba te haces notar y te pierdo, es un martirio vivir con esta condena.
Desvelado paso lo noche entera con la almohada abrazada entre las piernas y me confundo en aquellas caricias tiernas mojado en llanto porque sé que eres ajena.
Julio Medina 10 de octubre del 2010
|
Poeta
|
|
Tierna infancia, azorada... Inocencia desterrada...
La ternura que mis manos derramaban, Como brasas aturdidas, ardían.
Las dulces miradas, que tras largas cortinas Se anidaban, Lejos de un cielo azul habían quedado.
El tenue sonido de mi voz, Ronco se volvió. Muchos inviernos en mi garganta descansaron. Muchos veranos, mis pupilas asediaron.
Y con el tiempo a contramano... Fui hombre, que no supo ser niño. Fui niño, que no sabe ser hombre.
Y la vida hoy me apura, Pero aún no tengo respuesta, Tal vez algún día la tenga.
Y tal vez, solo tal vez, aquellos grandes Árboles, De copas frondosas, Permitan que llegue una cándida luz, a este sepulcro de semillas.
|
Poeta
|
|