Frases y pensamientos :  COSAS, QUE NOS LASTIMAN


Remolino, de contradicciones, ser humano, tan complicado, maneras extrañas de pensar y interpretar, lo que debemos o no debemos hacer. Mucha cosa ya pasé, mucha coas me contaran, pero no sabía aun que otras vendrían, tan inusuales que me pasman.
Estaba sentada en una mesa a tomar un café con leche, llegó un matrimonio, que la señora era el sufrimiento en persona, le dije que podían sentarse en la mesa junto a la mía. Ahí, empezando a hablar, como es mi costumbre, la señora empezó a contar, que había gasto mucho dinero en regalos para los nietos, que tenía más dos nietas, pero por infelicidad hijos de la hija que había muerto hacía tres años. Entonces empezó a contar, el sufrimiento de la hija, yo que venía de un abogado, a donde fui a pedir consejos, sobre la porquería de la vida que es basada en dinero, he quedado sin sangre en mis venas. Mis problemas, quedaran pequeños como hormigas, delante de la tragedia de una mujer que terminó sus días en los cuidados paliativos en el Instituto de oncología, en la fuerza de la vida, pues tenía treinta y nueve años, la cara de la Madre, marcada por arrugas profundas de llanto, impotencia y dolor, tuve vergüenza por mi y por quien fue conmigo al abogado.
¡Cuántas gracias tengo que dar a Dios! Mismo oyendo de la persona que tenía que respectarme y ponerme por encima de todo, decir que si yo quisiera dejar mi casa que lo hiciera, ella quedaba con su familia y aun pidió que le regalara algunos euros de un rendimiento, de un dinero que tengo aplicado, o sea, me ponía fuera de Mi casa y por encima tenía que dar algo. Todo esto delante de aquella Madre inconsolable, no es nada. Por eso no ha conseguido aburrirme.
Hoy, cabeza fría, pregunto, ¿qué es esto? ¿Qué pasa? Como se puede ser tan masa inerte que se sacrifique lazos de sangre, por un hombre, desmedido en su bien estar, sin tener derechos a nada, solamente desprecio y pena del nublado de interés de su mente. no se entiende.
Pues, así nada puedo hacer, nada quiero pensar, ¿cuando en mi vida he dejado que insultaran a mis Padres en su casa? Nunca, ¿cómo se puede olvidar lo que nos ayudaran y apoyaran, como se puede olvidar que están vivos, que tienen de todo a duras penas de quien les ha dado el ser? ¿Qué pasa con la gente?
No llamo para aquí los derechos legales, no. Solo la infelicidad de al fin de casi una vida, ser puesta de lado. ¿Por un hombre? ¿Que ni sabe si termina la vida junto a él? ¿Cómo se puede aceptar que insulten madres y padres en su presencia con una sonrisa, benevolente? La Señora dolorida que estuvo hablando y desahogando en la mesa, ha quedado sin su hija querida y que nunca va a olvidar el disgusto y que la acompañará siempre. Pero por veces no se queda sin ellos, por muerte, pero por ser muertos en vida de sentimientos y dignidad.
Lástima, mucha, nada puedo contra espiritas malignos que entran en las mentes y las turban no dejando que vean la realidad. Cada uno hace la cama a donde se va a acostar, deseo que salud no le falte, solo que son huérfanos, sin darse cuenta enterraran vivos a sus padres, por otras preferencias, que ya sentirán no fueran las mejores.
Así es la vida, así está la gente, así se termina en soledad, poner fuera de casa a los mayores que son los dueños y que se arreglen. Lo más que puede pasar es que terminen en un asilo.
En las vueltas de la vida, ya sentirán lo que hicieran.
Solo quiero que a la Señora que tanto sufrió por su hija y ha quedado sin ella, sufriendo con su dolorosa enfermedad, impotente, por no poder regalar de nuevo vida, consiga ultrapasar y seguir viviendo junto a sus nietas y Marido. Que del cielo, venga la fuerza para continuar. Mi afecto y mi cariño se los ha llevado, nunca la olvidaré.
A mi manera, insultada, despreciada, tengo la dignidad intacta y mi consciencia tranquila, eso es el importante.
Soy muy superior, a estos improperios y los gananciosos, no me dicen nada.
Todo esto que me están haciendo está pagando como culpable una persona que es amiga y le echan todas las culpas. Porque es humilde y no es rico. Hasta da ganas de reír, tanta estupidez y mala fe.
Para no pensar en lo que me hacen, pienso en los que sufren, sin retorno perdidas de seres queridos.
Oporto, 30 de noviembre de 2011
Carminha Nieves.


Poeta

0 puntos
0 0 0