Poemas :  Exigüidad... (Ultraísta)
EXIGÜIDAD
(Ultraísta)

Pasó aquella sonrisa amarilla
deshaciendo su hielo de violines.
Con el humo agotado corriendo
en la voz de la arena en la hoja.

Allá el sol extiende sus alas
en el eco de la sombra
de una noche que vuela
entre los sueños de una almohada.

Impaciente la calle sube
al árbol descolgado de una tarde
llena de auroras perdidas
en las esquinas del viento
triste espejo con el reflejo seco.

En la tempestad solitaria de una mano
el recuerdo duerme un remoto azul
del rítmico rencor de las brumas
en la sinfonía de la distancia convexa
atada al fervor de los cristales delirantes.


Autor: Joel Fortunato Reyes Përez

Referencia útil es...
https://definicion.de/ultraismo/
Poeta

Poemas :  Amada discrepancia
AMADA DISCREPANCIA

Este ha dejado de ser mi tiempo
en la piel que arruga cada piedra
con el aire marchito por la nieve
madura la tarde por la yerba
del clima seco por la uva
apagada, enrojecida, al último,
resplandor, afligido, del sol perdido.

**********

Vestiré al camino con caballos
de terciopelo en la montaña del verano
y mesas entre las cajas del invierno
corriendo por las venas del último otoño
llorando fuego, su vieja fuente de primavera
de la muerte el horizonte acariciando
los dientes de una nube triste.

**********

Así la soledad se viste con luceros
de la miel fundida entre las nieves
con el metal de alegres mariposas
en las frágiles palabras anudadas
al ímpetu colgado en las paredes
semillas del agua turbia ruines
con abismos insaciables grises.

**********

Serena la noche alza el viento
de un lamento
amargas desventuras
enguantadas en honda sacudida
el coro resucita esa voz lejana
de la piedra donde muere el tiempo
en el hórrido caminar de los relojes
al margen del péndulo doliente
desencanta la ilusión al desflorarse
el herido arroyo por la penumbra.

**********

¡Rinde, alma, el silencio del remanso
con la turbia voz del llanto
saeta fina
del corazón breve golondrina esquiva
la bruma del éxtasis cansado!.

**********

Más pesado que una noche en vela,
viéndole al perfume su silencio,
en el espejo de las olas descendiendo,
por la pulpa de la espuma del encino,
y los pétalos danzando en esos peces,
iluminando la columna vigorosa, que gotea,
amada, que gotea amada... ¡Discrepancia!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  Humidificadora
HUMIDIFICADORA

Como el llanto de la lágrima,
que a la espina duele,
descrucificando,
la añoranza que al ser abrasa,
ablando la dureza, dices:
¡Qué nada entiendo!.
De los rastrojos secos,
ecos pálidos de los débiles sonrojos,
pestañeando al amanecer enajenado,
que inunda con sed al viento.

De las ásperas manadas de azul violento.
De los cráteres heridos de verde tierno.
De los crótalos aliados de gris intento.
Dices:
Hablando del silencio duro.
De las botellas desnudas de alfileres.
De las bellotas vestidas de billares.

Humidi
Fica
Dora.
Porque al dolor sangra la risa.
Del marfil que afila la ceniza.
Del fulgor que viste la noche.
Del temblor que calla la tarde.

Dices:
¡Qué la lágrima sufre su sequía!.
¡Qué la lámina surte de arena!.
¡Qué la lápida asume su olvido!.
Por
Que
Calla la calle cayendo en la esquina.
Por
La fe que estrangula la humildad humillada.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas :  En el rincón de la serpiente
En el rincón de la serpiente

En el rincón de la serpiente.
Nadie llora ya, la piedra está en la frente donde solo los sueños lloran.
Nadie canta ya, la boca está solo en el tembloroso vaho de veredas lejos.
En
El
Rincón nadie llora ni canta, solo la serpiente piensa y siente...

Aquí está, se trata de la carne, de la esquina redonda, de los cuerpos, de las almas, del polvo,
desnudo, dulzura inquieta, brumosa,
en la lámpara de la torpeza,
en la pregunta perfecta,
con toda la niebla,
con toda la cuesta,
de la muerte en el mundo.¡Welt, mondo, world, monde!.

Gloria de los candiles degollados,
y sobrevivientes por las espirales montañas,
del tiempo, del aire, de plata pajiza y lentejuelas, sordomudas, magnolias, hechas de limones, violetas.
De mezquina paga, bucles de mano a mano,
de los que mueren juntos, abajo de los rincones,
de los serpenteantes pensamientos garbosos,
de los rincones de juncos de dos mitades,
degollados e inaccesibles mapas perdidos.
En
El
Rincón de la serpiente hay crepúsculos de invierno,
hay viejas estatuas de trigo, de lobo y de flor, ajada.
Hay palabras de perdidos alfabetos, de arañas campestres.
Hay pueblos centenarios ricos de presentes. desventuras.
Rincón de los rincones distraídos, dependiendo del después.
En el antes ciego, mudo, sordo, pantano de artimañas, llaves y candados.
Seis retrasados confidentes, descifrando novelas de escarabajos y gusanos.
En el mañana del quién sabe, tal vez, de otra manera, que por ahora no...


En
El
Rincón de la serpiente de muletas.

¡Sí, sí, de muletas, de muletas!-Krücke, gruccia, béquille, crutch.

Hay otras serpientes desengañadas, en los domingos de piedra, de lodo seco.
Hay otros más pequeños rincones, invocando a las lombrices imaginarias.
Hay además otras cosas que ya nadie recuerda, por ahora o por las noches.
Hay además botellas en los tejados de pólvora de las hogueras sembradas.
¡Hay, otros tantos miles de hay, además, de menos a más ó menos casi!.

En el rincón.
De la vida social, de la muerte individual, la serpiente cristaliza vidrios.
Por los soñolientos saltamontes, comprimidos del silencio pergamino endulzado.
Por los telegramas melancólicos, donde nacen,
las campiñas y meditan las orugas.
Por los viejos gavilanes, invocando en la sortija, caballeros y doncellas raras.
De la vida serpenteante, de la muerte angelical, la fructífera ignorancia.
En el rincón. ¡Teje del mismo interior, otras serpientes redondas!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta