Nota a nota del arpa soñadora brota Excelsa melodía que en el orbe flota Es rumor de fuente y rumor de viento Son arpegios vivos, dulces de su aliento.
Manantial de acordes que el aire tañen Desde la cascada al pie de la montaña Do impoluta el agua, virginal y bello Desnudo moja, el cuerpo de mi amada.
En su piel de seda, blanca, se me antoja Ver morenas, las huellas de mis manos Deslizar gradiente su sedoso pelo, Uno a uno por las yemas de mis dedos.
Y en el cielo de su cuerpo, paz de mis deseos Un planeta rojo, la huella de mi boca… Que en ardorosa noche hiciera, pues provoca Aquel jardín de seda que es su terso cuello.
Desde la cascada al pie de la montaña Hasta las frías lozas de las calles nuevas Vibrante suena como las notas del arpa… ¡La sonora risa de mí amada dueña!
Delalma 10/08/2012 11:14 a.m.
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Poeta
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