Frases y pensamientos :  ALERGIAS


Día frio, parece que la ropa no se junta al cuerpo, una especie de corriente de aire, pasa entre ellas.
En pequeña, sufrí mucho, pus tengo alergia a la lana, nadie lo sabía y en aquellos tiempos no había fibra, solo lana o algodón. Mi Madre con toda la buena voluntad, me ponía cosas de lana, para andar caliente, andaba temblando todo el día y con escalofríos, solo después del baño cuando ponía mi camisón de franela cardada, mi iba al cielo. ¡Qué gusto!
Así pasaran años, deseando el verano, el calor, ¡cuánto pasé!
Nunca me pasó por la cabeza que había cosas peores, que tenemos que traer, junto a nosotros.
Sé que muchos dirán, que solo me quejo, no es verdad, solo comento, todos tenemos cosas, que las guardamos y hacemos por esconder de los demás. Soy el contrario, observo, pienso, acepto que me pasa, lo aguanto y no olvido.
No hay fibra ni franela, ni calor, que nos quite de encima, el mal estar de no estar a gusto, de no tenernos libertad, confianza, amparo, comprensión. Aun no inventaran la medicina moral, para nuestros desaires, para nuestras frustraciones, un detergente para limpiar los malos sentimientos y maldad de los otros.
Pensando en cambiar el jersey, pues voy a salir, pienso como sería bueno hacer el mismo con las personas que me lastiman, ¡que felicidad! Ni me atrevo a soñar con eso. Hablo en general, no en particular para alguien.
¡Qué limpieza haría! Sentir el silencio a mi alrededor, hablar con quien quisiera, libre, sin lana picando mi piel, es un sueño que tengo, quizá un día lo pueda vivir. Por ahora, tengo que aguantar, no tengo otro remedio.
Creo que el día que haga limpieza general, va a ser el más feliz de mi vida. Primero, una armadura, para que lagrimas de cocodrilo no me mojen, ni mi corazon tenga indecisiones, ¡después es la libertad!
Lo que venga después, ya lo cogeré, si estás aun ahí para quererme, feliz, si ya te marchaste, lo aceptaré, todo será como quiere mi destino, pero camisetas de lana nunca las volveré a poner.
Ya terminó el tiempo de tener pena, de pensar en los demás más que en mí, pues lo sé, que si tuvieran que sustentarme y tomar cuenta de mí, no lo harían, o a su manera, quejándose que era un fardo.
En verdad, he cambiado, mucho, si tengo un amigo mejor, si no paciencia, tengo Dios por compañía. Y me llega.
Lejos, muy lejos de lo que era tres años antes, casi no me reconozco, es bueno, me siento yo y no me importa, que no lo acepten, si soy como la lana es para mí, mejor que me marche para lejos y los deje en paz.
A cambiar el jersey, la vida me espera fuera, para hacer lo que me gusta, tengo independencia para eso.
.Oporto, 22 de Noviembre de 2011
Poeta

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