BAILA.
Te observo y me fascinas en tu danzar,
Colibrí de mis sentidos son tus movimientos,
Bailarina de lo etéreo y lo efímero
Princesa de los sueños,
¡Baila y no dejes de bailar!
Baila para mí tu danzar.
Danzar y Danzar al infinito de tu sentir,
Como cabriolas del viento
Llevando en su corriente tus manos,
Como aves a merced de tu danzar.
Festín de movimientos hipnóticos,
Danzar y Danzar al viento de mis fantasías.
Sensualidad en tu piel de sedas coquetas,
Que incitan a mi cuerpo acercarme a ella,
Sentir el fulgor de tu danzar cerca de mi
Como sentir el magnetismo de una estrella.
Cautivo ya de tu cuerpo al danzar,
Me derrumbo ante ti…derrotado en la batalla,
Sumiso a tu contoneo cual serpiente
Al sonido de su encantador… al sonido de la música.
Danza mi cisne celestial…
Danza sin que nada te haga parar,
Que la noche empieza en tus ojos,
Y en ellos la quiero pasar.
David Valdés Belinchon.
© Derechos Reservados.
YA LLEGA EL AMOR
Ya llega el amanecer de este amor,
Ya se aproxima veloz el sabor de ti,
El cálido sentir de tu presencia a mi lado,
El castigador mirar de tus pupilas.
Ya llega el olor de este amor de dos,
A mi sentidos de penitente enamorado,
Que teje las noches de estrellas brillantes,
Para el manto que nos cubra esta noche de dos.
Ya llega la ternura de tus caricias de terciopelo,
De amor sincero que nace en el corazón.
Que susurra como canto de sirena,
Que no cuestan, que no pesan.
Ya llega el momento de la despedida de mi soledad,
Que tu ausencia atrae y tu presencia aleja de mí.
Con tu cuerpo cincelado con mi deseo y mi pasión,
Como escultor de momentos diseñados para este amor.
Tu mi destino, mi rumbo, mi fin,
Mi comienzo y mi acabar,
Mi nacer y mi morir… mi todo.
Mi Existir…
LABIOS DE SAL
Labios de sal,
Labios de pecado,
Alimenta el alba con tu sentir,
Quebranta su quietud con tu sabor.
Labios de dulces,
Labios de azúcar y miel,
Endulza los míos con tu tacto,
Borra el amargo sabor de un adiós.
Labios azules como la mar,
Labios de mil trasnoches,
Que tu oleaje se rompa en mi piel,
Y que mil lunas se cobijen en ellos.
Mar y sol en tus besos,
Martirio de mi tranquilidad,
Ternura en cada roce,
Sensibilidad hasta el amanecer.
Labios de sal,
Labios de azúcar y miel,
Labios sabor a mar.
Pero siempre son ellos…
Tus labios de amor.
David Valdés Belinchón.
© Derechos Reservados.
TE QUIERO Y NO ME PESA
Que lindo volvernos a ver,
Que lindo saber de ti
Y el dulce aroma de tu presencia,
Con frescor de este volver a sentir,
Que lindo volvernos a encontrar,
Encontrarnos pesar de tiempo,
Tiempo que borro el camino hacia ti,
Y la arena tus pasos de la brisa.
Pero yo como viento…
Di pasos sutiles en la soledad
En busca de tu brillo…
En busca de tus pasos de ángel.
Luz de mi sentir,
Camino por andar.
Que lindo volvernos a ver,
Que lindo volverte a tener,
Como lluvia en mi semblante,
Así eres amor, como lluvia fresca.
Lluvia fresca que alimenta mi piel,
Como recuerdo que vuelve al color,
Que pierde ese negror marchito del ayer,
Que vuelve a doler en el corazón.
Como esa estrella brillante…
Así eres amor
Esa estrella que guía mis pasos,
En la noche de nuestro sentir.
Noche oscura como la soledad que me dejaste,
Y que hoy prende el camino de vuelta al olvido.
Te quiero y no me pesa,
Te extraño y no te olvido.
ENCUENTRO DE MIEL
La brisa me canta al oído tu melodía,
La melodía que tiene tu voz en cada palabra,
Que me hace desaparecer y ser parte de ella,
Como un perfume que se pega a la piel.
Tus labios mi elexir y mi antídoto para amarte,
El final de mí y el comienzo de tu esencia.
Son tus ojos de hechicera de almas solitarias,
Las puertas de tus ternuras y tus promesas.
La arena me trae tu tacto y tu tersura,
Y la caricia que dejo a fuego tu mano,
Mil noches te espere y por fin podre sentirte,
El tiempo que te alejo te trae a mi encuentro.
Caricia de mar, caricia de sentimientos…
Besos de amor, besos de esta fantasía…
Que puede algún día terminar… pero hoy serás mía,
Solo eso importa a mi alma… serás mía y del viento.
Cuando tu abrazo me cuide,
Cuando tu calor sea el mío,
Cuando tú presencia expulse la ausencia,
Cuando seas por fin mi existencia… seré tuyo.
HUMO DE MIL COLORES
Abrazos de azúcar y Sal,
Caricias en las heridas aun si curar,
Caminante de verbo fácil es tu mentir,
En mis oídos sedientos de mentiras que creer.
Que tus palabras no interrumpan estos momentos,
Donde se pierde lo cotidiano entre mis pensamientos…
Donde no me olvide la repisa de tus huesos disfrazados,
Y el sabor de tus besos no muera en mis labios descarnados.
Mujer de seda… niña de lluvia,
Que me atrape lo profano en tu compañía,
Vagabundo de tu regazo… siempre de paso,
Como tus gemidos en la noche; Humo del mil colores.
No tengo dueño, no soy de nadie…
Solo tu recuerdo me hace su esclavo,
De momentos guardados en el armario,
Donde te espera mi corazón enamorado.
Abrazos de azúcar y Sal,
Caricias de sábanas en nuestra cama,
Sudor, miradas y lujuria encarnada,
Elixir para evadirse de la cordura.
Caminante de verbo fácil es tu mentir,
En mis oídos sedientos de mentiras que creer.
Humo de mil colores en la ventana,
Etéreo como el momento… como tú y yo.
David Valdés Belinchon.
© Derechos Reservados.