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Tú lograste que nadie pudiera ver dentro de tu visión,
volviste real el mundo interno,
sólo te pido que dejes fuera las penas de la vida,
con un único deseo satisfecho en la mañana,
satisfecho ahora,
que no es real de este lado.
Puede alguien ver la luz,
que se tiñe con el ocaso,
que el sol se pone,
y se revelan las estrellas.
Hecho en la mañana,
y no importa nada,
esto no es real,
de este lado.
Mundos extraños,
que van y vienen,
sin rumbo alguno,
vagamos dentro de el.
Nadie mas ha visto lo que hay en este mundo,
abstracto y surreal,
puedes ver la luz,
que ilumina los atardeceres,
que se cubren con estrellas.
Erick R. R. Torres
(Angel Negro)
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Poeta
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Todas vienen aquí conmigo,
no tenemos una cámara para ver,
no pienso que estoy solo en este mundo,
la cámara no me deja ir,
y el veredicto no es amor o alma.
No se lo que es el amor,
solo espero vivirlo,
sentirlo,
tocarlo,
el amor es algo invisible.
Busco el estéreo,
está muy lejos de mi también,
no pienso que estoy solo en este mundo,
no pienso que estaré mucho aquí también.
Sintonizo en la radio,
una canción algo melancólica,
a su ves tranquilizante,
una y otra ves,
se repite en mi mente.
El mañana vendró hoy,
no se si estoy listo para recibirlo,
es el tiempo lo que lo decide,
si viene o no,
para estar preparado,
si viene ese momento tan enigmático.
Erick R. R. Torres
(Angel Negro)
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Poeta
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SUSPIRO DE MÁGICA REALIDAD
Por el sendero que va dejando el recuerdo
camina el hombre perseguido de su sombra;
escapando al destino –fugaz imagen en noche de delirio-
buscando la paz robada
en la falsa quietud del beso encadenado.
Cuelgan los brazos buscando la tierra
sintiendo la armonía del compás,
cadencia del silencio henchido de paz;
otra mañana que se marcha,
otro suspiro que me vence,
un nuevo color que se inventa y presta
para pintar esta nueva esperanza.
Los últimos rayos de sol
que ya no me ciegan,
que me llaman… que me llevan;
que estremecen la mirada,
-cautiva y rendida-
en este trance de abandono,
en este suspiro de mágica realidad.
(Jpellicer)
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Poeta
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ODA A UNA CAMPANA ROTA
Como campanas
Veo, por los
Sonidos
¿Qué intacta realidad?
Es
De
Las
Campanas. ¡Al sonar!.
Olores de símbolos.
¡Fe qué ahuyenta!. Musical.
Con su presencia, malas.
¡Influencias!.
Y en las leyendas
Se dice, sí... ¡Es cierto!
Anuncia suerte...
¿O, es una llamada?... ¡Perdida!.
Perdida
En las épocas pretéritas
Veo otros
Sonidos, intactos... ¡Sin olor!.
Del perfume... ¡De flores!.
¡Secos pétalos de ayeres!.
Fieles... ¡Sequías añejas!.
Como
El
Vino
¡Cómo el vino y se fue!...
El sonido, la realidad, la suerte
De ésa...
¡Realidad!
Realidad de campana... ¡Al sonar!.
Símbolos de fe.
Llamada, esperanza, despedida.
En
El
¡Templo!
¡Qué contemplo!.
Y
Mi, templanza. ¡Veo!.
Campana.
Campana de rotos símbolos.
Cada
Sonido.
¡Sordo!.
....¡Perdido!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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Poeta
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Regresar a la prosa,
casi prosa,
una aproximación a la letra,
esa que se esconde en la cotidianidad,
ella trascurre entre la vida y la muerte,
en las calles angostas,
en la superficie y vértice,
ella esconde un tesoro,
a buscar por los recovecos del planeta,
es cálida y temida,
puede derrumbar imperios con sus finos dardos,
la prosa y la letra,
guardan una armonía y desarmonía,
se conjugan magistralmente para llegar al ser,
a lo más recóndito,
con sus pasajes de luz y tiniebla,
Regreso a la prosa
después del miedo,
de una infatigable búsqueda,
llena de artificios,
¿donde quedaron grabadas las palabras perdidas?,
¿mis sueños detrás de una palabra sin valor?,
ella corta con su espada el olvido,
cada vez se hunde en su abismo,
en lo letal de un verso carcomido,
por la distancia,
la incertidumbre,
es lo más seguro que tenemos,
un no vivir,
un aire oxidado,
una ciudad artificial,
un tiempo sin espacio,
una abeja que no regresa a su panal,
la ceguera nocturna de no ver la realidad,
¿cuál es la realidad?
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Poeta
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