Poemas de amor : Vivo Donde... (canto pastoril 3) |
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Vivo, del obraje de estío de mi suelo:
el motorcito del obseso mangangá que taladra de la siesta su puntal, y el colérico violín de la chicharra. El brindis copa en alto de las calas, vivo, y cada fogonazo colorido del atónito motín de los hibiscos. ¡Ah!, y la verde marejada del parral. Vivo la regia inmodestia del rosal, y allende el caserío, en ese campo, los braseritos azules de sus cardos y el corvo pestañeo de sus palmas. Del limonero, su dádiva gualda vivo, y contigo, nuestro solar y lecho; los dos a ritmo como espiga y viento bajo el rayo complacido de la luna. Vivo..., donde no me dejes nunca. |
Poeta
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Bellas son sus letras, con un aspecto bucólico especialmente sensible y bien diseñado gráficamente, contiene una alta dosis emotiva y en mi opinión, permite comprenderlo y disfrutarlo simultáneamente. Saludos y amistad reciba.
Muchas gracias, estimado Joel. Siempre un gusto y placer, esenciales, recibir su atención y comentario.
Mis saludos y amistad de siempre.
Juan, hermosas letras nos dejas, grato leerte, saludos
Muchas gracias, amigo.
Saludos.
Ese corte de bella égloga del poema es presentado con musicalidad e impecables simbolismos. Muy buen trabajo, Juan; lo he disfrutado.
Un gran saludo.
Gus
Muchas gracias, Gus, por interpretar el espíritu de estos versos, y casi seguro, ubicarte en estos pagos.
Un abrazo. Saludos.