Prosas poéticas :  Una Casa en el Sol.
Una Casa en el Sol.

Mi casa es una casa de centellas, de llamaradas vivas, de fuego y llamas y carbones encendidos. Porque mi casa está en el sol. Cuando abro las llameantes ventanas veo el espacio negro e insondable y las moreras de fuego que hay en mi jardín. Cuando salgo a recorrerlo me acompaña mi perro antorcha, observo las rosas de fuego y los zigomorfos lirios de fuego violeta, rojos y brutales y encendidos, y mis pavos reales de fuego verde, con sus llameantes cuellos de llamaradas azules. Hay una fuente de llamas eternas en mi jardín, en ella no me refresco las manos, y en ella, en el fondo, hay cientos de monedas de fuego infinito. Chorrea fuego la dantesca e inimaginable fuente, hermosa en todo su antifrescor lascivo, voraz, iracunda. También tengo un estanque de aguas de fuego negro, llena de peces de fuego de oro, suelo mojarme los pies desnudos en él y dejo que los peces de fuego me quemen a pequeños besos los pies. Las estatuas en el Jardín son estatuas de ira, y llameantes imploran pedradas bárbaras de manos criminales, pero yo no lo permito. Todo fulge y hiere y devora y quema. El alto muro de llamas que rodea la finca impide la mirada al curioso. Las moreras de fuego me dan sus moras como carbones rojísimos. Y mi perro antorcha juega a traerme ramitas ardiendo. Que arrojo una y otra vez a su boca llameante. Me han visitado mis amigos y se han quemado de luz en el salón de las llamas inmarcesibles. Duermo en una cama de fuego lascivo, como un extraño fakir, me deleito con sueños de infernales quemaduras, con camaradas de oro y de fuego rabioso que hacen el amor para mi desnudos y envueltos en ira, extraños arcángeles de pavor y crueldad, rabiosos y resplandecientes. Tengo sueños oscuros de llamas negras, y sueños fulgurantes de llamas vivísimas, fuegos verdes y fuegos rojos, y fuegos azules, incandescentes, y fuegos fucsias, criminales y bellísimos. Cuando me despierto en la noche caliente mi boca arde y mi corazón arde y mi alma arde. Y por la mañana los gallos de fuego que crío me despiertan con sus cacareos de ira y crimen perfectos. Lejos suenan las campanas de la Iglesia del sol. Campanadas de lujuria roja y de ira relampagueante, que siempre tocan a arrebato. Mis ojos echan fuego cuando veo la belleza tan hiriente que me rodea. El embrujo infernal de mis moradas. También mis amigos son de fuego y también son de fuego mis enemigos. No sé cómo puedo vivir con tanta quemadura. Será que mi corazón está muy frío acaso. Será que mi corazón es de hielo. Cuando me viene la tristeza sin embargo lloro lágrimas de fuego, como un dragón, todo yo estoy envuelto en llamas, mis sudarios, mis ropas, sus tejidos, son de fuego, mis heridas y mis quemaduras son de fuego, mis zapatos y mis calcetines son de fuego, enteramente yo soy de oro y fuego, no sé cómo podéis decirme que tengo el corazón de hielo. Cuando descanso sobre mi dantesco sofá de llamas observo los cuadros del salón con las escenas solares, lobos de fuego que cazan dragones de fuego, Vírgenes Macarenas de fuego, resplandecientes, y paisajes de fuego y de volcanes. No sé cómo podéis decirme que mi corazón es de hielo, hasta la sangre de mis venas está ardiendo de fuego. O lo mismo todo es mentira y tan solo son fuegos fatuos.
....................................................................
Francisco Antonio Ruiz Caballero. ( siento no haber podido alargar más este relato pero me dolía la espalda). (además la he cagado porque quería describir una casa en el sol y al final he terminado hablando de mi mismo que no soy la antorcha humana).
Poeta

4 puntos
0 0 2
Los comentarios son propiedad del autor. No somos responsables de su contenido.
AlienXenobionte
Publicado: 4/10/2013 11:37
Incondicional
Unido: 28-6-2011
Comentarios: 796
 Re: Una Casa en el Sol.

He intentado hacerme una quemadura en la mano.

He encendido el hornillo de la cocina y he puesto a calentar el cuchillo para hacerme una quemadura de un centimetro cuadrado en la piel del dorso de la mano. Pero mi hermano me ha sorprendido y me ha detenido cuando estaba a punto de quemarme. Y lo he tenido que dejar para otro día.

Es que resulta que conocí en la licenciatura de biólogicas, Ojeda u Oreja se llamaba de apellido, a un chaval operado del corazón de nacimiento que un día al leer mis poemas me dijo que eran demasiado fríos, y por eso me quemo, para que mis poemas sean ardientes, porque yo ante todo soy un profesional. Pero me ha detenido mi hermano que me ha dicho que estoy loco. Era una quemadura sin importancia, de un centimetro cuadrado y además en el dorso de la mano, es decir pecata minuta. Además me gustaría que me llamaran el antorcha humana, que es el personaje de comic que más me gusta.

También he querido hoy subirme al pretil de la azotea de mi casa porque he visto un reportaje sobre los hombres de la Viga de Nueva York, y quería sentir un segundito de riesgo de muerte para despues poder plasmarlo en mi relatos, pero mi hermano ha escondido las llaves de la azotea. O sea que podía haber alcanzado mucha gloria hoy pero mi hermano con su sensatez no ha permitido que me eleve. Además quería matar muchos chinos porque cuando me subo el pretil de la azotea de mi casa hay temblores en China y mueren cientos de chinos. En fín que no me han dejado. Tenía yo ganas de hacerme una quemadura en la mano para que me llamaran el "Antorcha Humana". Tengo la piel del brazo quemada de unas quemaduras que yo mismo me he hecho, pero desde hace cinco años no me hago ninguna. Y no quiero ser un tio más del montón. Pero mi hermano con su sentido comun me lo ha evitado. Además yo tengo mucho cuidado cuando me hago quemaduras porque nunca me quemo sobre lunares ni nada para evitar melanomas. pero bueno. mi hermano Jose ha sido hoy mi angel de la guarda que ha evitado que me haga una pequeña quemadura para adornar el relato que hice antes. Me da una rabia del copón que digan que mis poemas son fríos porque yo ante todo soy un profesional. Loco, pero profesional. En fín, os dejo. Adeu, lo mismo mañana me hago la quemadura que no quiero que se enfade mi hermano y me pegue.

AlienXenobionte
Publicado: 4/10/2013 11:41
Incondicional
Unido: 28-6-2011
Comentarios: 796
 Re: Una Casa en el Sol.

Me he hecho una quemadura esta noche.

Cuando mi hermano se fue a dormir. Encendí el hornillo de la cocina, calenté el cuchillo al rojo, aunque no se puso al rojo, y me he hecho una quemadura de dos centimetros de lado por un centimetro de ancho, aunque no me he despellejado, otras veces he llegado a despellejarme. Esta vez tengo la piel quemada por encima, dentro de un día se caerá y dejará al descubierto la carne viva. En fin, un centimetro cuadrado de piel quemada. Hace ocho años me hice quemaduras peores. A mi realmente el superheroe que más me gustaba es "Estela Plateada" Silver Surfer, no la Antorcha Humana. Y jamás llegaré a ser La Antorcha Humana porque soy caliente pero no tanto. Ya os digo que aquel compañero de biología, Oreja u Ojeda se llamaba de apellido, experto en Palinología, (estudio de la miel y del Polen), me dijo que mis poemas nunca conseguirían nada porque eran demasiado fríos. San Lorenzo murió en la Parrilla, a mi el Santo que más me gusta es San Francisco de Asís, podrían hacer una película sobre San Francisco de Asís al lado de un inmenso lobo diseñador por ordenador lleno de dientes criminales mientras San Francisco lo acaricia. Aunque reconozco que San Lorenzo es un santo superoriginal. En fin, he dormido esta noche con un pequeño dolor en la mano quemada aunque ya no me duele. Ahora me untaré pomada en la quemadura. Ante todo hay que ser profesional, que España es el pais de la chapuza y así nos va.

gus_de_las_pampas
Publicado: 5/10/2013 6:36
Incondicional
Unido: 31-5-2013
Comentarios: 3005
 Re: Una Casa en el Sol.

Tienes una riqueza de léxico muy buena, y en mi humilde opinión el chaval que te ha dicho que tus versos no tienen la dosis de fuego que tienen que tener, está equivocado. Te lo ha dicho para provocarte inseguridades que no mereces. Muy buen trabajo, creo. Mis saludos.
Gus