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Noche fabricadora de embelecos, loca, imaginativa, quimerista, que muestras al que en ti su bien conquista, los montes llanos y los mares secos;
habitadora de celebros huecos, mecánica, filósofa, alquimista, encubridora vil, lince sin vista, espantadiza de tus mismos ecos;
la sombra, el miedo, el mal se te atribuya, solícita, poeta, enferma, fría, manos del bravo y pies del fugitivo.
Que vele o duerma, media vida es tuya; si velo, te lo pago con el día, y si duermo, no siento lo que vivo.
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Poeta
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Quejosas, Dorotea, están las flores que los colores los habéis hurtado y la frígida nieve se ha quejado de que mayores son vuestros rigores. Quejoso está el amor, que los amores se han remitido a vuestro pecho helado y el sol, que en vuestros ojos abrasado desprecia los laureles vencedores. Quejosa está de vos naturaleza por vuestra condición áspera y dura, que para humana os dio tanta belleza. O menos perfección o más blandura, que a presumir de vos tanta dureza, ¿ cómo os pudiera dar tanta hermosura ?
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Poeta
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El mismo tiempo corre que solía, que nunca de correr se vió cansado; deciros que es menor el que ha pasado, demás de necedad, vejez sería; o mayor o menor, hay noche y dia, sube o declina, Filis, todo estado; dichoso el rico, el pobre desdichado, con que sabéis cuál fue la estrella mía. Hay pleitos, y de aquestos grandes sumas, trampas, mohatras, hurtos, juegos, tretas, flaquezas al quitar, naguas de espumas; nuevas mentiras, cartas, estafetas, lenguas, lisonjas, odios, varas, plumas, y en cada calle cuatro mil poetas.
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Poeta
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¡Ay, amargas soledades de mi bellísima Filis, destierro bien empleado del agravio que la hice! Envejézcanse mis años en estos montes que vistes, que quien sufre como piedra es bien que en piedras habite. ¡Ay, horas tristes, cuán diferente estoy del que me vistes! ¡Con cuánta razón os lloro, pensamientos juveniles que al principio de mis años cerca del fin me trujistes! Retrato de mala mano, mudable tiempo, me hiciste; sin nombre no me conocen aunque despacio me miren. ¡Ay, horas tristes, cuán diferente estoy del que me vistes! Letra ha sido sospechosa, que clara y oscura sirve, que por no borrarla toda, encima se sobrescribe. Pienso a veces que soy otro hasta que el dolor me dice que quien le sufre tan grande ser otro fuera imposible. ¡Ay, horas tristes, cuán diferentes estoy del que me vistes!
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Poeta
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"Cuidados, ¿qué me queréis? tened un poco la rienda; que no podréis derribar lo menos de mi firmeza. Entre el amor y vosotros hay notable diferencia: que el amor tiene por gloria lo que vosotros por pena. Pensaréis que me obligáis en hacer que no lo tenga: ¿quién os engaña, cuidados, si descanso en padecerla? Para cuidaos os quiero; que no puede ser que os quiera para descanso quien ama, para cuidados quien cela. Cuando contemplo, Amarilis, en tu divina belleza, tanto gusto de los males, que de los bienes me pesa. Los desdenes de tus ojos agradezco por fineza. ¡Que nueva invención de amor que los disgustos se deban! A tal extremo he llegado, que estimo que me aborrescas, por ver si puede mi amor satisfacerse de penas. Y con pensar que te obligo aún no quiero que lo sepas, porque el verdadero amante sólo de su amor se premia. Pero mira ¡qué desdicha! que tal vez en esta ausencia no me alivia tu hermosura por imaginar mi ofensa."
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Poeta
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¿Quién mata con más rigor? Amor. Quién causa tantos desvelos? Celos. ¿Quién es el mal de mi bien? Desdén. ¿Qué más que todos también una esperanza perdida, pues que me quitan la vida amor, celos y desdén? ¿Qué fin tendrá mi osadía? Porfía. Y¿qué remedio mi daño? Engaño. ¿Quién es contrario a mi amor? Temor. Luego es forzoso el rigor, y locura el porfiar, pues mal se pueden juntar porfía, engaño y temor.
¿Qué es lo que el amor me ha dado? Cuidado. Y¿qué es lo que yo le pido? Olvido. ¿Qué tengo del bien que veo? Deseo. Si en tal locura me empleo, que soy mi propio enemigo, presto acabarán conmigo cuidado, olvido y deseo.
Nunca mi pena fué dicha. Desdicha. ¿Qué aguarda mi pretensión? Ocasión. ¿Quién hace a amor resistencia? Ausencia. Pues ¿donde hallaré paciencia, aunque a la muerte le pida, si me han de acabar la vida desdicha, ocasión y ausencia?
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Poeta
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