Nuestro amor está enfermo
destruido por mentiras ilusas,
agobiado por la cruel intromisión
de manos ajenas intrusas.

En el intento de recuperarlo
una vez más lo vuelvo a perder,
son esas manos intrusas
otra vez se vuelven a interponer.

Te sigo buscando desesperado
porque quiero estar junto a ti,
y cuando estás cerca de mí
aparecen esas manos.

Sigo luchando con furor
para reconquistar tu amor,
y en el esfuerzo logrado
reaparecen esas manos.

Nuestro amor se está perdiendo
y no lo puedo recuperar,
son esas manos intrusas
desean te deje de amar.

Julio Medina
2003