SOMOS BARCOS
No entiendo porqué no entienden todos. Que vamos en un mismo barco.
Como barcos, hermano, escucha, escucha bien.
O salimos todos, o todos nos hundimos. O sin darnos cuenta, el humo nos consume.
Y cada vela y raíz nos abandona. En la pena y la ausencia.
Con la pobreza ajena, la ajena y la propia. Como es que no se ve, vamos dime…No lo sé.
Salgamos todos. Todos de una vez y de la mano. Hombro con hombro, sobre las olas del destino.
Y como buenos barcos, con el timón. Con el timón en cada dedo.
En cada aliento y esperanza. No dejemos que las velas, nos velen algún día.
Hermanos y como uno solo en el océano. Este océano, tormenta y tristeza y pobreza.
De alma, bondad, justicia, paz. ¡De piedra que habla!.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
|