Siempre estaré contigo, siempre seré tu ale, siempre tu reina de Venus, siempre tuya, y aun así sigue siendo poco con todo lo que quiero darte no me jures, te creo. Tú y yo más allá del horizonte, besándonos, amándonos sin importar nada como nos llevara el compás de nuestros cuerpos. ALE. En momentos de angustia de soledad y desesperanza, me encontré con tu mirada con tus bellos ojos negros. En ellos encontré la salvación y en ti, la paz que me faltaba contigo, conocí el amor de manera diferente ¡¡¡más intenso, más sublime, más puro; y lo disfruté!!! Y confiando en que me amabas ¡Yo te amé! creyendo en tus palabras ¡Te adoré! hoy con el corazón deshecho... no sé si te olvidaré… Delalma Miércoles, 09 de marzo de 2011
|