Verso viejo, en el tiempo te detienes, cansado vas por el largo trecho silbando una canción de amor, la escuchabas siendo nene, aquel romance de ayer ahora estás recordando.
Te han doblado las rodillas los quehaceres. ¡Cuán larga travesía desde el nacimiento! Con aplomo has cumplido los deberes, te vas y nos dejas gemas de entendimiento.
Verso viejo, aquellos años de pobreza extrema, de rectitud, la heredaste de tus ancestros, honestidad es el logo de tu emblema, en ese tema has sido el mejor maestro.
Si estuvieras viviendo en el nuevo sistema donde situaciones nos dejan boquiabiertos. ¡Te morirías de tristeza con este esquema de anomalías ocultas que se han descubierto!
La nueva generación no está bien enseñada, todo lo que le importa es el dinero, pero los principios y valores de una época pasada los tiraron en el fondo del basurero.
Verso viejo, hoy quisiera que estuvieras aquí conmigo, a todos tus hijos impregnaste de valores, los que a su vez con tus nietos ahora espigo para que sean hombres de bien e inspiradores.
Verso viejo, en tu ausencia quiero recordarte nos dejas un gran tesoro… Tu legado, enseñanzas que siempre fueron clase aparte, la recompensa de un recuerdo que llevaré guardado.
Julio Medina 18 de agosto del 2011
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