CLAUDICANTE CLAROR
Entre los techos que caminan Y nos dirán como fuimos Bajo el zapato Y dirán por lo dicho Los dolores qué nos buscan Por de pronto antigüedad Incrustando mariposas en el fuego. ¡Antiquísima novedad!. De la nieve musitando al vacío Paisaje transparente qué abriga piedras Del milenio en el misterio. Ya veremos proseguir las cosas. Que no se hicieron queriéndolas olvidar.
En la magra carne quel humo alumbra Del momento duro del viento quieto Claudica Ante El calor claror claudicante... Porqué Muere al vivir en el recuerdo Del morirse a diario Del recuadro. Del sentirse sólo acompañado. ¡Al desolar la misma noche!.
Claudicante Al enlunar amaneceres claror ¡Qué mueve de máscaras al ayer en la mañana sin llegar! Por estarse medio muriendo Temerosamente yerto. Alargando cien gramos cada cuadro ¡Como esférico es un triángulo, sacado al cubo helado sin destino!.
Por Estarse desviviendo claudicante En lo qué muriese fácil claror Si lo viviere dificultoso Son cantares silencio son.
Del claror claudicante Las aves del cantar triste midiendo de la tormenta las pulsaciones tembladoras cuevas de conchas mansas tristes llevan las hojas los otoños infinitos consigo al amarillento desencanto ¡Entre los techos que caminan!Bajo el zapato los dolores qué nos buscan incrustando mariposas en el fuego de la nieve musitando al vacío
paisaje que abriga piedras del claror claudicante al cantar el desencanto al enlunar amaneceres.
Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
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