Miguee

Poemas, frases y mensajes de Miguee

Selección de poemas, frases y mensajes mais populares de Miguee


Cartas sin destino

Dejaste de darte cuenta de las cosas, te fuiste. De la manera más atroz que pudiste, que tu corta e ingeniosa cabeza pudo, cerrando puertas pero dejando abiertas las ventanas, dejando a vista todo lo que querías dejar ver, tapando todo lo que yo hubiera querido. Te acabaste, me acabaste. Y ahora vienes como si nada, hablando como si todo, como si siempre estuviste o yo hubiera estado, no me imagino tus terribles noches que debiste haber pasado con lo maravillosa que eres, y te apuesto que ni siquiera pensaste en todos los maravillosos días que disfruté con lo repugnante que soy. Fracaso tras fracaso, arañando las putas puertas que mi mísera mente construyó para ambos, y lo hizo con malicia porque hasta de ahí te ibas o terminaba por irme yo. No sé que quieras de mí, ni sé que hago yo contigo pero seguramente terminaremos al fin de irnos. Como desde un principio debió ser. Te amo.

Cartas sin destino

Las últimas hojas del árbol bajo el que nos besábamos con helado en los labios han terminado de caer.
Tus ojos siguen brillando tanto como la luna del último día de hace casi 12 meses, tus manos se han ido entibiando pero aún logro sentir el calor que desprenden al sujetar mi mano mientras caminamos por noches irremediablemente frías.
Todavía no sé distinguir entre sueños y realidades y tú sigues sin lograr desprender una palabra, no importa en realidad, hemos sobrevivido otro día en esta porquería, y tú sigues sonriendo aunque todo duela.
Probablemente extraño tus brazos formando un círculo al rededor de mi cuello, y el humo de mi cigarrillo me llene de nostalgia de tiempos que no volverán jamás, tal vez recuerdes las promesas sobre un puente o incluso hayas olvidado las palabras en una carta rota que olía a verdad.
Estamos viviendo lo mejor de lo que consideramos peor, no hay monotonía que venza el quiero, ni un quiero que se deje vencer por un quizá.
Camino por veredas tristes que me saben a ti, y las nubes han formado figuras que tildan recuerdos distantes, sosegados por tiempo helado, por silencios ocupados camuflados en necedades necesarias, y tu cuerpo y el mío se han negado a cortar el hilo que tejieron desde el alma.
Colores de arcoíris gris, amargo sabor de café árido, lluvia tenue de abril que llegó a septiembre, vacías latas de cerveza que sabían a libertad, dulces besos que el aire trae consigo desde el lugar donde quiera que tú estés...
Las hojas vuelan ahora y rozan suave con el piso y un ave canta en las desnudas ramas de aquél árbol
No dejes de sujetar mi mano...

Consejos de un perro viejo

Nostalgias de amigos que se van
Nostalgias de tiempos que se fueron
Nostalgias de nostalgias que vendrán
Y la puta vida se cansa de andar, y el pendejo se cansa de ser pendejo, y soy pendejo !Jo¡ Lo soy.
La vida caminaba junto a mí y ha tomado en la vereda un camino diferente y en mi camino yo dejé de caminar, me paré a observar a la nada y vi a la vida de lejos cruzar.
El camino hacia delante que dejé atrás y el camino de atrás que vuelve al frente. Y la vida es una nostalgia que no acaba de llegar o no termino de alcanzar.
¿Te acuerdas de..? ¿Te acuerdas cuando..?
Y yo ya no recuerdo nada, ya no soy un guerrillero en tiempos de paz, ni un conservador en tiempos de guerra, me volví un recuerdo más, uno de nadie que pasa de largo, que pasa de nada... "Trata de olvidar"
Mísero cuerpecillo relleno de mierda cubierto por piel, relleno de nada viviendo en todo, recuerdos de vida en una muerte que vive.
El pendejo ya no encuentra vida, y la vida ya dejó de buscar.
Si alguna vez te encuentras a la vida, asegúrate de no parar de andar.

Cartas sin destino

El espacio de un cuerpo que naufraga en un mar seco de miseria
La brisa que despeina el cabello que se fue con las ideas, con la esperanza, con las añoranzas y las pérdidas y las ganancias
Las ojeras en el día y la resaca nocturna de falta de sueño
Las piernas flacas que flaquean a medio camino que conduce a nada
Y nada queda del todo que cubría la nada
Han volado pajarillos y han encontrado un nuevo rumbo, ya no vuelan en manada, y el solitario no encuentra aún camino a casa
Preciosos violines de noches eternas, que golpean el alma y que destrozan mi pecho flaco y negro de humo.
Y ahora dime dónde están las promesas y los sueños, dónde quedan cuando se apaga la vela que iluminaba el cuarto oscuro, dónde quedaron los que se quedaron para después irse nada más
¿Dónde quedo yo cuando me pierdo y pierdo el camino de encontrarme? Cuando encuentro sólo el camino de volverme a perder...
Blues que rasga sin pasión la espalda, que desprende pedazos de piel más viva que los sueños, cerveza derramándose en el piso de mi cráneo.
Quizá aquél tipo tenía razón y esperanza es lo único que faltaba para vivir, y la falta de ella lo único necesario para morir y... Adivina qué tengo yo.
¡Jo! Enciendo el primero de la segunda de hoy y esa puta sigue sin llegar...y no va a llegar.

Lágrimas del diablo

¿Qué hace la diferencia? Entre un botón y otro se encuentra otro botón, y las sonrisas y miradas de miles se encuentran entre otras más. Quizá algún golpecillo que asista a la razón de querer algo que no se puede expresar con palabras, algún guiño entre comillas que permita persuadir a lo que se amerita imposible.
Quizá el demonio lloré algunas noches y sus lágrimas lleguen hasta el tejado que construye una sonrisa, ésa que elegimos, o ésa que nos eligió.
Si los ojos que resguardan lo que quisimos fuera resguardado y la voz se escuche lejana inmiscuida en algún cosquilleo de nuestra panza, y las manos que ansiamos tocar nos toquen sin freno, sea suficiente para que la vida que elegimos vivir ahora haga sonar alguna canción que decidimos guardar en un recuerdo que tiende ir hacia donde debe estar.
Si las lágrimas de él o aquél otro y más arriba signifiquen persuadir mi deseo de Seguir encontrándote en cada día, entonces que llueva en todos los sentidos, y que arriba siga el techo y abajo dé la luz.

Recuerdos bajo mis párpados

Incertidumbre recorre mis venas, mis pensamientos, mis emociones y sentimientos, cada uno de ellos saltando, revolcándose en un lago de lodo sin querer salir…
Dirígete hacia mí y dime que amas, camina lento, mueve tus caderas, lo suficiente para que yo prefiera mirar como el aire desplaza tu cabello, y tus ojos radien amor o algo parecido, extiende tus brazos, sujétame, no me sueltes más, soy tuyo, por hoy, por esta noche, por esta tarde…¿Qué más da? Me he desprendido del suelo y estoy rozando con tu mano junto a la mía un sendero de nubes interminables, acaricia mi sombra, mi luz, mi alma, somos libres al fin y no me importa lo que hay antes de ti, ni lo que hay después de nosotros, estamos juntos y yo confío en la incógnita de lo que pueda pasar, abrazo tu pecho sin rozarlo, beso tus labios sin tocarlo, te he amado todo este tiempo sin si quiera tenerte… ¿Quieres caer conmigo? Vamos…

Desapego

Las historias, las buenas historias, nacen de un momento roto, sí, roto, como las historias que son, deben tener un pasado infinito y un futuro expirado, sin embargo, algunas historias, incluso cuando terminan, dejan abierto un orificio en la cerradura que permite ver lo suficiente, la esperanza.
Las historias entonces tienen varias versiones, en función de sus relatores, así pues, sin llegar a un centro, éste relator, les rodeará una pequeña, tan pequeña que se resume a tiempo y tan grande, que tiene lleno el baúl de sentimientos.
Bukowski decía que el amor es darle a una flor a un joven con sabandijas en el pelo mientras tu madre esperaba sentada en casa con el corazón roto, bien, pero Bukowski no tenía buena relación con sus padres, lo cierto es que los extraños llegan a ocupar un lugar importante en nuestras vidas, este tipo de extraños suelen aparecer en los momentos menos imaginados, en el pasillo de un colegio que no debías transitar, en el café que nunca frecuentas, en el andador de una calle desierta, pero éste extraño del que hablaré, apareció alguna mañana de septiembre justo en el mismo lugar que nunca me había detenido a observar.
¿Cómo se forma una historia? Bien, probablemente de un inicio, un desarrollo-climax y un final, pero en cuestiones de amor, sería insensato pensar en un final ¿verdad que sí? sin embargo, es el primer error, crear una historia sin saber si quiera que la has comenzado, pero ¿qué va uno a pensar en esos momentos? muy seguramente es más importante pensar qué ropa usar, que loción poner, qué zapatos combinar, qué clase de chiste tonto decir, estas irrelevantes cosas que, para mala suerte, son justamente las que se quedan.
La ropa de mi extraño precisaba ser de un adolescente, su cuerpo también, su cabello y su risa, oh, hablar de su risa es hablar del universo entero, justamente donde nacía era donde todo mi pesar terminaba, y donde terminaba todo volvía a nacer, este extraño traía consigo olores de mi niñez, añejados en algún lugar de mi memoria que, cuando le percibían, hacían oleadas en saltos que culminaban en terremotos haciéndose notar en mis poros de gallina, pero yo no lo dejaba ver, alguna vez fui un tipo duro y justamente es otro encanto de este extraño, logró romper todas las barreras que me mantenían atado a un pensamiento cuadrado e inconexo, logro fluir en una zubia seca con tan sólo mirarme a los ojos.
Sus dedos, solía tomarlos son suavidad y palparlos con los míos, de uno en uno, lento, como acercarse a una fogata y sentir de a poco el calor, y tocarlos me hacía sentir tranquilidad, esa paz que nunca antes había encontrado.
Su cabello, despeinado, cubriendo siempre la mitad se rostro, su rostro, lleno de ansiedad traducido a piel,y sin embargo, no dejaba de ser perfecto.
Ah.. éste extraño era muy tímido, sus ojos, radiantes, siempre persistían ver al suelo, por lo cual optaba por ponerme zapatos viejos y feos, de modo que hubiera una razón para dejar de hacerlo, pero a mi extraño no le importaban este tipo de detalles, mi extraño era un alguien básico, no se dejaba llevar por esas cosas tontas, mi extraño tenía ojos que podían ver el alma ¿el alma? sí, el alma entera, y todo lo arreglaba con una sonrisa, esa sonrisa que llenaba de alegría a quien tuviera el placer de verla.
A mi extraño no le gustaba que fumara, pero tampoco me lo prohibía, mi extraño era muy paciente y divertido, mi extraño siempre sabía qué decir cuando alguna cosa rara pasaba, mi extraño siempre tenía una respuesta a todas mis preguntas. Mi extraño era sabio, y podía hablarme de la vida aquí o allá. de centro hacia fuera y viceversa, podía concebir el origen de la vida en unas palabras y podía divulgar el camino de la muerte en otras.
Mi extraño disfrutaba de su tristeza y melancolía, pero cuando era feliz, era el ser más feliz del universo, !jo¡ mi extraño tenía unos pasos de baile increíbles, si algún día los llegasen a ver, entenderían de qué hablo.
Mi extraño tenía los sueños de un niño, las ambiciones de algún personaje de cuento de hadas, mi extraño era tan real que parecía irreal, mi extraño tenía una voz tierna, tan linda que podrías caer en su garganta apenas suspirara.
Mi extraño nunca terminaba de contar sus chistes, siempre se reía en el trayecto, mi extraño caminaba suave y comía helado, caminó al rededor de todas las calles, de todos los andadores, de todos los suelos y las nubes, durante algún tiempo caminamos juntos y fue la caminata más sensacional de todas, mi extraño tiene una colección de muñecos ganados en una máquina y todos se llaman por igual, a veces, mi extraño no era muy ocurrente, pero cuando lo era, era un espectáculo.
A mi extraño le daban miedo las montañas rusas, le gustaban cosas más lentas, que pudiesen disfrutarse más, mi extraño también carecía de vergüenza en situaciones embarazosas, pero la tenía en otras que no tenían relevancia, mi extraño era simpático.
Para mi extraño, el amor era algo muy importante, tanto que nunca lo pude comprender, mi extraño no creía en eso de domesticar, pero sin saberlo, mi extraño me domesticó.
Pero entonces ¿qué es el amor?
El amor es el rencuentro con un viejo amigo, es una noche con la familia donde no hay ruido de gritos y estrés pero sí de gritos de risa, el amor es cobijar a tu hermano mientras tiembla en la madrugada, es ver los ojos de tu madre llorando y sonreírle de a poco, el amor es levantar el mentón de un compañero, ponerlo fijo y decirle que todo está bien, el amor es escribir una carta a un destinatario que no se encuentra en el globo pero sí en el corazón, el amor es toparse con un extraño, comer de su comida, tener un encuentro, mirarle a los ojos, distinguir su sonrisa, frecuentar, caminar con él, por donde sea y a donde sea, el amor es reír, llorar, jugar, pelear, discutir, el amor es entregarse sin fin y hasta que llegue, el amor es un viaje, una noche, dos noches o tres y mil y más días, el amor es cantar. es preocuparse, es cuidarse es odiarse también, el amor es arriesgarse y aventarse a un precipicio volteado donde sólo se ve la luz, el amor es terminar 3 veces y querer reiniciar 4, el amor son unos dedos entrelazados mientras se camina por veredas completamente llenas de gente y sentirse únicos, el amor es distinción, es saber que hay más pero que no requiere nada más, el amor sin duda alguna es un momento, o miles, un recuerdo, o muchos, el amor absolutamente es iniciar ignorando que va a terminar.
Y mi extraño, no te dejo de extrañar, ni dejo de sentir, ni dejo nada, me estoy dejando a mí.
Las historias tienen un fin, acordamos al principio, y el de ésta parece haber llegado, pero no hay que preocuparse mucho, sólo lo suficiente, porque el ojo de la cerradura aún sigue visible.

Final

Se acabó, repítelo, se acabó ¿Y qué mierda significa?
Terminamos, y has dejado las hojas tiradas en el colchón, y su almohada no amortigua la caída, nada sube ni nada termina por quedarse pero termina otra vez. Y es que soy un ser vacío, te diste cuenta al fin, no me importas ni te importo, no nos importamos ni le importamos al mundo, y al amanecer saldrá el sol y a la atardecer se irá otra vez, te sumergiré de nuevo en la oscuridad que la puta luz de luna no alcanza a iluminar, y tú estarás en bares con cadeneros y en restaurantes donde sirven pato a la parrilla, aunque seas vegetariana, aunque delires de pobreza, aunque finjas soledad, te llenarás de gente, tan vacía como la que dices que tengo, tan vacía como tu tristeza.
No hace falta recordar, no hace falta irse para irse de verdad, ni irse para fingir que no estás, ni quedarse para fingir que sí.
Te dedico, la sonata en piano que tocan mis dedos cada vez que recurro a tu presencia inmóvil de mi mente.
Te dedico, una risa fingida cada que recorro lugares en los que no te veré pisar jamás.
Te dedico, el humo de mi cigarro muriendo entre mi anular y dedo medio, junto con mis ojos fijos en la nada que volviste eterna.
Te dedico, una última canción, un último juego de xbox, una última madrugada triste y otra feliz, una última risa y carcajada, un último suspiro cuando las palabras no decían nada, un último llamado del pasado abril, un último abrazo a tu cuerpo invisible a los ojos, un último biombo para cubrir tu alegría disipada entre dientes, un último poema y un último adiós.

Paraíso

Recorrí un sendero de pastizales verdes y gloriosos
Árboles llenos de vida, un cielo y un sol luminoso
Caminé por encima de tierra dorada con piedras preciosas y coloridas flores
Entre hormigas naranjas, caballos cafés, castillos y torres
Abrí puertas con candados sin llaves, con respiraciones profundas, corazón rojo y cien emociones...
Cuervo de oscuras noches, alimentándose de pan podrido y basura en botes
Volaste hacia mi sendero rojo y llenaste de sombra mi cielo y mis flores
Ángeles divinos fúnebres, lluvia nostálgica de agosto, riega mis pastizales ahora amarillos y dales fe de futuros mejores
Aunque no los haya y el silencio reine nuestro pobre campo, y las torres se derrumben como pinos sin verano, aunque la vida haya perdido vida en los atracos
Aunque la luna no brille más y el sol esté ya del otro lado...

Corre

Déjame tocar la silueta que dejas cada vez que te apartas de la sombra de mis pensamientos, estruja mi palma en un portazo invisible lleno de orgullo y necedad, enciende mi cigarrillo con el fuego que desprenden tus ojos cada vez que te marchas en rabietas inexistentes e injustificables, marca la pauta en cada paso del tango que nunca bailamos por miedo a ridiculizarnos, camina al cielo cada vez que la brisa traiga consigo un recuerdo bueno de lo buenos que llegamos a ser alguna vez, déjame ser los dedos que tecleen las sonatas tristes que tu corazón palpite cada que tu sonrisa se marchite.
Inyecta mi espalda con dopamina y hazme temblar y recordar la danza de mariposas a lo largo de mi colon, bofetea los recuerdos que no tengan memoria de tiempos mejores y déjate caer en soplidos que mis suspiros no dejan de tirar.
Y ahora corre, llévame y déjame aprender a correr a mí ¿Me habías perdido ya?
Despega lento el entrelace de tu pulgar con mi mano, hemos aprendido una lección hoy, dime adiós una vez, dime adiós y aléjate cuanto quieras, no te dejo soltar.

Poema de mujer

"El tiempo todo calma..."
Siempre queda algo después de un final ¿No es así?
Y probablemente recuerdes cada noche las noches que trajo el viento sólo para volvérselas a llevar, o yo recuerde todos los días, los días que que por más que tu presencia se paraba firme a un lado mío, tu ausencia invadía cada centímetro del lugar que poco a poco dejaste de ocupar.
Hay un poco de tu fragancia impregnada en un rincón de mi cerebro en proceso de claudicar, y yo respiro lento mientras mi cama enciende los cráteres del frecuente cigarrillo después del sexo tan premeditado e irreal en que los últimos días se tornó.
En la cocina el café está preparado y junto a tu taza llena de hormigas se encuentra el montón de cartas que jamás te di.
Estoy un poco muerto después de todo, pero allá fuera sale el sol y brillan las estrellas, y la gente sonríe y no paran de reír.
Nadie sabe qué pasa y quizá nadie lo sepa nunca y tú te quedes por siempre con algo que fue mío y te si di sin más.
Viento, llévame a un lugar lindo, a un lugar donde pueda escapar.

Juego sucio

Apuesto, por los momentos más felices que tristes
Apuesto, por las sonrisas más que por las lágrimas
Apuesto, por los días que salía el sol después de una tormenta
Apuesto, por lo que nos hemos dado antes que por lo que hemos perdido
Apuesto, por las miradas furtivas después de una discusión
Apuesto, por los violines y el piano en una madrugada eterna
Apuesto, por la unión de nuestras manos antes de una separación
Apuesto, por las palabras que dijeron y por los silencios que gritaron
Apuesto, por tu mejora y por mi cambio
Apuesto, por las horas invertidas en besos en vez de cervezas baratas
Apuesto, por las idas al cine y al parque y no por las horas pasionales vacías
Apuesto, por tu risa, por tu llanto, por tu alegría y por tu tristeza
Apuesto, por los meses juntos, los días separados y los tiempos difíciles
Hoy, apuesto por ti, por mí, por mi vida, por la tuya, por el tiempo atrás y el tiempo en frente
Apuesto...Por nosotros.

Miseria

Se ha enjaulado el pajarillo y ya no sueña con salir, ya no vuela y ya no canta, ya no lucha por vivir.
El reloj suena a las 4 y a las 5, 15 después y 15 seguido pero yo lo ignoro, y las clases comienzan a las 7 y el colectivo arranca a las 6, el trabajo espera a las 5 y la vida no espera a nadie.
Me quedé dormido, otra vez, y duermo de nuevo y estoy feliz porque he reprobado 3 materias pero aún tengo 10 cigarrillos en la cajetilla y mi chica me ha dejado tocar su pierna.
Soy pendejo, y fracaso cuantas veces quiera, porque no soy lo que quise ni seré lo que nunca fui, porque estoy en carrera de procesos y en proceso de declinar.
Le estoy viendo el culo al mundo y le sonrío y lo beso, le estoy besando el culo al mundo y me meto entre sus nalgas por cuenta propia. Nunca ha habido nada interesante y quizá nunca lo habrá, pero estoy besando un culo y un culo nunca hay que rechazar !Ja¡
Pajarillo enculado en el mundo. Pajarillo que nunca quiso volar.

Cartas desde mi otro yo

"Soy el desesperado, la palabra sin ecos, el que lo perdió todo y el que todo lo tuvo"
-Neruda.
¿Has visto la nieve caer? Como pequeñas rebabas que el viento corta en cada soplido, caen y siguen cayendo pero nadie se da cuenta de cuántos cristales deja romper y nadie nunca lo sabrá, ni sabrá qué tan roto puede llegar a estar el cristal.
No he visto a la nieve caer pero puedo ver gotas de lluvia chocando con el piso, muriendo lento en cada golpe y quizá las gotas de lluvia formen una sola alguna vez y la lluvia se deje de llamar así, pero ahora no comprendo si son sus gotas las que caen o soy yo el que empiezo a caer hacia arriba.
Quizá tampoco he visto nunca las gotas de lluvia caer, pero he visto caer amores, derrumbarse y con ellos las personas quienes los resguardaban. Y el amor debe ser algo demasiado preciado como para guardarlo tanto y tanto que de repente se olvida dónde está.
Quizá el amor no caiga jamás porque lo retienen cuerpos putrefactos de cansancio y de polillas.
He visto también la ceniza de mi cigarrillo, pero ella nunca cae, ella vuela con el viento hasta perderse en la nada, aunque estoy empezando a creer que tal vez ella se pierde en todo y la nada está aquí atrás.
Se derramó mi cerveza y tiré al suelo la décima colilla del día, me tiré en mi cama y me tiré a dormir.
Quizá... algún día decida no pararme más y entonces sabré hacia dónde cae la lluvia y la nieve y me iré volando con la ceniza que se voló. Quizá algún día la vida quiera levantarse, quizá algún día...deje de llover.

Indiferencia

En la cocina preparan filetes y arroz, el aroma desfila por toda la casa hasta perderse en la última puerta. Los trastes se están lavando y la lavadora lava lo suyo, el retrete se llevó la mierda que tiré al despertar y el agua sale caliente de la regadera y sonrío mientras tomo una ducha de largos 12 minutos.
Había un tipo tirado en la calle y 3 ancianas más con un bote en la mano, la calle y sus alrededores se llenaron de gente que protestaba no sé qué, y no sé qué podrían protestar. Apagué el televisor después de recorrer 3 veces toda la programación, llena de noticias mundiales aburridas y de grandes catástrofes sociales y políticas, ambientales ni hablar.
Bien, conecte el cargador de la laptop, el de mi celular y la radio sonaba en la misma estación, con los mejores éxitos de no sé hace cuantos años, y los nuevos que tampoco conozco.
En el trabajo piden y piden popotes y las servilletas las dejan en el piso, sus cartones y sus tapas, mierda, los botes están vacíos y el agua del retrete se va cada que detecta que el meador o cagador se aleja.
Enciendo en último cigarrillo de éste maravilloso día y a la ceniza se la lleva el viento, mi celular se cargó desde hace horas y mi laptop la utilizaré hasta dentro de 2 semanas, maravilloso mundo, y en mi mundo, el que está de la última puerta hacia dentro seguirá siendo hermoso ¿No es así?

Noches de luz

Recuerdo su rostro esa tarde con la puesta de sol y sus rayos acariciándole suave una mejilla, mi mano acariciaba la otra.

Llena de todo, sus cabellos al viento y una sonrisa en su rostro, sus manos deslizando mi cuello y mis labios charlando con los suyos.

-¿Nos veremos otra tarde?

Ahora mi casa está vacía y he encontrado los cigarrillos que había guardado para que mi sonrisa al verte luciera mejor, eramos apenas unos niños y ni siquiera han pasado 7 días.

Probablemente sigas un camino abundante de nada, y yo ahora mismo me encuentro derrotado, y el sol ya no rebote sus rayos sobre nuestros rostros, ni haya más caricias suaves ni entre cruce de palabras con ternura, tal vez tengas el vacío que siento al dormir, tal vez mañana, al despertar, luzcas tan hermosa como jamás te dije…

Las cartas que jamás te envié

No me he olvidado de todo, te puedo decir algunas palabras que hagan tener sentido a las acciones que ambos dejamos de hacer, quizá tenías razón y nunca era suficiente, aún cuando había para dar más, ahora estamos un poco vacíos, un poco cansados, un poco muertos, tal vez yo tenga la culpa, nunca querré saberlo.

¿Sabes? justo hoy estaba recordando la vez en que dijiste que no podías confiar en nadie, tenías la razón, te he visto sonreír muchas veces, pero también te he visto llorar y eso es algo con lo que simplemente no puedo, ahora e invaden una serie de recuerdos en los que tus ojos no hacen más que ser la mira de una nublada mente, retorcida, enferma de fracaso.

Las cosas no deberían ser tan malas, te veo al menos unas cuantas horas al día ¿Te acuerdas cuando no querías pasar un día sin vernos?

No puedo negarlo, es algo que me mata, ése tipo de detalles que nunca supe valorar y no tienes idea de cuánto me arrepiento, pero las cosas son así, de cierto modo me alegra que te hayas vuelto un poco más fría, pero ese es un problema conmigo, siempre embarro demasiado de mi mundo a la gente que quiero y mi mundo es una mierda y cuando están completamente en él, yo me siento fuera, nunca quise que fueras o vieras todo como yo lo veo, como te digo que lo veo, porque soy un mentiroso, porque siempre aparento que nada importa, pero tú sabes que no es así, hemos pasado muchos meses juntos y aún no nos conocemos ni un poco, eso es bueno quizá, pero ten por seguro que tienes la mayor parte de mí en ti.

No queda mucho por decir, normalmente no me importaría, pero que no quede mucho por decir entre nosotros me causa miedo, me pone nervioso, no sé qué hacer, cómo reaccionar, necesitó ayuda, pero no la quiero, te quiero a ti, no me dejes caer, no me dejes acabar con esto, esto acabaría conmigo, siempre he dicho que nunca tuve nada, pero si esto fue y es realidad, es una luz dentro de una cueva oscura saber que te tuve a ti…

Sálvame.

Humanos

¿Cuántas hojas debe dejar caer el árbol para hacerte saber que no somos eternos?
¿Cuántos árboles quieres ver nacer para darte cuenta de que sí?
Y si...tu verdad o la mía o la de cualquier otro basta para hacer claudicar los huecos que espaciaban los lugares frecuentes que no frecuentábamos ya, o para quitarle la inmortalidad a juramentos efímeros que dejamos de jurar, entonces basta un silencio para terminar lo que no queríamos terminar.
Es una situación enfermiza, dices, y yo enfermo cada mes no de situaciones, pero sí de vida.
No te sientas culpable, es normal, porque lo que terminaste por decir, o por callar, habla más que lo que dejé de callar yo o de hablar.
La araña le dijo a la mosca que fuese, y que tejería prendas para ella y mantos para su amistad, y la mosca traía con ella toda la mierda que encontró las horas pasadas, que, para la mosca, pudiera ser la mitad de su vida, y la araña esperó y esperó hasta que la mosca se decidió a ir, y entonces tejió las prendas que cubrían a la mosca de toda la mierda por venir, y tejió un manto para que su amistad estuviera latente. Cuanto más tejía la araña, más amor crecía en la mosca, cuanto más amor había en la mosca, menos teleraña quedaba en la araña.
No puedes cubrir toda la mierda con telaraña, ni puedes tener toda la telaraña con solo amor porque No hay nada que el amor no pueda pero tampoco hay mucho que sí.
me quedé dormido en sollozos que dejaron tus suspiros en algún lugar de mi cabeza y por dentro el frío recorre cada rincón de mi flacucho cuerpecillo, y tú sigues marchando en marchas que no se ejecutan, y sigues en busca de sueños que mi mierda no te dejaba cumplir.
Estamos sucios los dos y no sentimos nada ¿verdad que no?
Entonces que vuelen los pajarillos, que vuelen, porque ni yo claudico ni tú te dejas matar.

Por ésto o por aquello

Los amantes se dan la mano en la plaza, y sus caderas se mueven al ritmo de su aroma, amor.
Se presume entonces que el amor ya tiene fragancia, se percibe después el olor de su final.
Los besos, las sonrisas, los momentos, y cada pareja tiene fotos en su mente, fotos añejas y fotos que se prolongan hasta finales infinitos.
Infinitos, solíamos ser, infinitos y finitos terminamos, si por ti o por mí o por agentes ajenos hemos de desertar, que el paraíso se extinga y el desierto no nos haga esperar.
Lo siento y te siento... Pero no basta sentir por dentro, ni sobra demostrar por fuera, porque si por fuera ahora estás adentro, que por dentro no has de querer salir, y si te saco o te sacan o me sacan a mí, que quede en ti o en mí, y que un no nos haga fingir.
Cansados, estamos cansados de seguir, pero si paramos ¿en dónde habremos de parar? Si te conocí en martes o en domingo queda igual, que si esto se acaba nunca y que nunca sea el final.
No hay un "te amo y soy feliz sin ti" porque un y un no cabe en mi cabeza tan repleta de ti, y si he de mostrar que calentaste aquél tipo febril, lo diré, y no fueron tus piernas quienes me hicieron así.
Y yo te amo, pero no eres feliz sin ti, y sin ti me amo pero me odio mucho más que el

Abril

Las tardes calurosas y los días pesados, el trabajo hace tiempo me dejó de importar, me siento, cansado, enciendo un cigarrillo, llegan dos tipos con pájaros en jaulas ofreciendo suerte, les molesta el humo de mi cigarro, hacen comentarios molestos, lo siento por los pájaros, no porque huelan mi humo, sino por soportar a ese par de pendejos, quizá los pájaros también necesiten un cigarrillo de vez en cuando, pero ahora mismo están ocupados haciendo dinero para dos pendejos con gorra. No puedo con ellos, a sus treinta y tantos ponen a trabajar a unas aves por ellos, mierda, son patéticos.
Todos los años, pasa una multitud de enmascarados tocando tambores mientras marchan con luces y muñecos de cerámica sobre sus hombros, y entonces cientos o quizás miles de personas van a ver este puto rito que representa lo débil que es la religión. Cual sea, necesitan hacer este tipo de cosas para que la gente, aunque no esté interesada, se fije en ello. El mundo mismo está olvidado.
¿Jesús murió por mí? Yo no pedí que me salvarás, y además ¿De qué me salvaste? Quisiera que me salvarás de ver obligatoriamente esa puta marcha a tu honor llena de gente grotesca. ¿Por qué no salvas a los pájaros de trabajar para esos ineptos de gorra negra? Claro, porque estás muerto, pero yo también lo estoy, y seguramente esos pájaros también lo están, y el mundo entero está muerto, pero ese mundo te venera y vive de esperanzas todas ellas ciegas.
La vieja enfermó, el perro de ella murió, la sequía se siente.
Abril trajo con él al sol, pero se le olvidó traer la primavera.
Jesucristo ¿Por qué no vienes y salvas mi vida ahora?