Marcos

Poemas, frases y mensajes de Marcos

Selección de poemas, frases y mensajes mais populares de Marcos


Amigos

Yo tengo una amiga al otro lado del mundo.
Ahí donde el hielo da color a las auroras;
donde el ser humano también sueña mirando al cielo
contando las mismas estelas que dejan las estrellas vagabundas,

porque el mundo es redondo y cercano como los abrazos
Yo tengo una amiga que nunca me ha visto
pero me conoce
porque sabe el lenguaje universal que tienen los buenos amigos
Tiene una intuición poderosa
y un pétalo de rosa primaveral le abriga el corazón
Ella es amiga con la fe y la confianza de la palabra breve y sincera

Yo le tengo un aprecio sin límite
porque la siento real como la luz de las velas
Ella es una buena amiga

Saber de ella, me alegra tanto como el saludo cuando raya el alba

Como la sonrisa de un niño para paliar una tristeza.
y a pesar de que hablamos lenguajes tan distintos.
No nos limitan ni las vocales ni las consonantes que galopan las palabras
Y es que los dos conocemos el arte de comunicar mundos,
con ventanas que nacen de la intención sana.

Nuestra amistad, construye carreteras que nadie concibe,
Elimina muros, esos que a muchos limitan, pero que pocos miran cuando se golpean.
Es la muestra de que aún, a pesar de que el mundo se cae a pedazos,
Aún hay esperanza, hay futuro en la mano extendida .
Aún hay honor y amor por la vida.

Por eso a pesar de los mares y las distancias infinitas.
Ella es mi amiga y yo soy su amigo.

Mi dolor

Mi dolor dormita entre cartones
En el rincón olvidado de una calle
Llena de cuerpos, de pisadas sin huellas;
Pobladas de ojos que nunca miran a ese lado.
Mi dolor es tan hondo como el hambre
Como la ausencia de sonrisa o de un abrazo.
En una noche fría de lluvia y sin motivos,
Es descamisado y descalzo.
Tiene olor a tropiezo, a golpe, a regaño;
Anda interrogando su suerte
Acurrucado en una banca de un parque sin nombre
en el centro de cualquier ciudad.
tiene color de olvido, de angustia, de ala rota,
de astilla encarnada en la mirada indiferente.
¡Y me duele, me duele, me duele, tan hondo… tan hondo!.

Es un hipopótamo que agoniza aquí en mi pecho,
un ave zancuda enredada en mis entrañas que me quita el aliento.

¡ Y me duele, me duele, me duele. Crudo, Crónico, agudo; tan visceral y prolijo!

Mi dolor te siente, siente tu lágrima, tu silencio, mi silencio, los silencios preñados de silencios de lágrimas sin nombres ni apellidos.
siente tu mirada esquiva, la extensa curvatura de tu extraña intención; tu desierto, mi desierto.
Ese océano de pétalos marchitos y abismales.

Mi dolor siempre está alerta a tus pasos truncados a la mudez de tu garganta
Y cabalga sin brios cada pena.

Y me duele y me duele, duele con dolor antiguo, histórico y rebelde

Mientras una bala corta el futuro de algún sueño
Y el sonido de su horror rompe la risa para habitar con sangre en el oído;

Mientras tu corbata anuda tu denuncia y le quita el azul que tanto necesitan beber todas tus obras. ese azul que tanto falta.

Mi dolor se hace más oscuro y más largo.
Como la noche que cae con la ausencia
Como el recuerdo que no enciende las pupilas
Y te duele y me duele y duele más
Mientras más intenta acurrucarse temeroso de sí mismo en el rincón de siempre
En el rincón que no quieren mirar aquellos hombres
Que tienen por oficio mirar a todos lados
En el rincón que saben que más duele
Porque es el rincón donde se esconden todos.