Poemas :  Yo no te quiero
Yo no te quiero, pero quiero de ti,
yo no te amo,
amo tener tus manos sobre mí.
Yo no te adoro,
te pienso y todo en mí es un alboroto.
Yo no te quiero, solo te pienso.
Con cada luna extraño tus besos,
sólo tus besos y el calor de tu cuerpo.

Bajo la luz del sol, no te recuerdo ni te pienso.
Bajo la luz de la luna, te veo y te siento.

Cierro mis ojos y veo tu sonrisa
y sin querer le sonrío a tu recuerdo.
Escucho tu risa,
y una ola de calor
dibuja la silueta de tu boca
en mi cuerpo al compás de
la música que sale de ella.

Solo quiero de ti
lo que un día tuve,
lo quiero sin remordimientos ni lamentos,
sin juicios y sin compromisos.
Lo quiero con la libertad como expectativa,
sin enredos ni tormentos, lo quiero.
No entiendo por qué, pero lo quiero.

Yo no te amo, yo tengo amo.
Quién me acaricia con ternura en mis momentos de amargura
Y susurra a mi oído cuánto me ama.
Ese que curó mis heridas y me devolvió la sonrisa.
Mi sonrisa que en un pedazo de historia era sólo tuya,
Quién me mira con cariño a la luz del sol y bajo la luz de luna.

La misma luna que es testigo de mi locura interior,
la que mira con tristeza mi ambigüedad emocional,
La misma que es testigo de tu frenesí por la libertad.
Esa luna que mira curiosa tus aventuras nocturnas.
Te juro que yo no te amo,
y sé que tú a mí tampoco,
y es perfecto.
Yo sólo quiero lo que tuve, amando lo que tengo
Yo sólo quiero lo que tuve
sin remordimientos ni lamentos,
sin juicios y sin compromisos.
Yo sólo quiero esas sensaciones,
instintos que despiertas en mi cuerpo.
Quiero sentir mi corazón acelerado cortar mi respiración,
y yo sé que tú también lo quieres,
Quieres sentir como me estremezco sobre tu pecho,
quieres sentir que por primera vez descubro el placer de ser tuya,
Quieres sentir que te miro, como si fuera la primera vez,
Y sí, será la primera vez
que te mire con lujuria y cariño
mas no con amor.
La primera vez que camine hacia ti sin desventaja, sin temor.
Quieres sentir el palpitar de mi corazón desenfrenado,
El frío de mis manos en tu espalda, en tu pecho
quieres sentir el frío de mis labios y el calor de mi cuerpo,
como mi piel se une a la tuya
y exploramos un mundo de sensaciones nuevas,
y por un instante nos convertimos en fieras insaciables,
que sólo quieren sentir, sólo eso.
Quieres oír de mi boca tu nombre, cortando el silencio de la noche,
un grito de placer que retumbe en cada rincón.

Llega la despedida, y te miro mientras te alejas
una sonrisa adorna mi rostro,
y mis ojos no lloran y mi alma no se quiebra,
pues yo no te quiero, sólo quiero de ti.
Poeta

Poemas de introspectíon :  Que sí, que no, que talvez
No tengo riquezas que compartir,
tampoco mucha sabiduría
pero les dejo estas letras
que inquietan mi alma,
y rigen la vida mía.

Qué sí, que no, que talvez.
¿A quién le importa en este mundo al revés?
¿A quién le importa si caminamos con las manos
y abrazamos con los pies?
¿A quién le importa si nacemos viejos
y morimos bebés?
¿A quién le importa en este mundo,
donde la gente llora si le ignoran
y se ofenden si dices “hola”?
¿A quién le importa en este mundo de sensibilidades tontas,
de almas vacías?

Qué sí, que no, que talvez,
y así se nos va la vida queriendo complacer,
obsesionados con el control,
obligados a tomar una decisión.
¿A quién le importa en qué dirección
sopla el viento?
Sólo al que navega su velero.
¿A quién le importa en este mundo al revés?
Si vivimos aferrados a los estereotipos,
a los prejuicios.

Sé feliz, sonríele a la vida
aprecia la belleza que te rodea,
Canta si quieres cantar,
llora si quieres llorar.
Siente, vive tus emociones al máximo
siente las caricias del viento,
disfruta de los besos de la lluvia,
y baila bajo las estrellas
al ritmo del silencio, de los grillos
al ritmo del coquí.
Total, ¿a quién le importa?

Echa a volar tu imaginación
ríete a carcajadas sin razón.
Déjate impresionar por las cosas simples,
Déjate impresionar por el vuelo de las aves,
El vaivén de las olas del mar.
Sorprende al mundo con tu magia,
Regálale al mundo tu sonrisa,
Ilumina los días del ser amado
Aún cuando no esté a tu lado.
Que se iluminen sus días
Al recordar lo que le has dado.

Celebra cada triunfo,
recuerda que cada nuevo día
es la oportunidad perfecta
la excusa por excelencia
para amar sin límites, para amar sin fronteras.

Cuando no sepas,
Si sí, si no, si tal vez,
recuerda, escoge ser feliz
porque al final del tiempo
¿A quién le importa
en este mundo al revés?
Poeta

Poemas de desamor :  Confesión de un Crimen
Quiero confesar mi crimen.
Estrangulo su recuerdo en cada oportunidad,
con el silencio como cómplice,
asfixio mis miedos, mi necesidad, mi orgullo,
como un acto de piedad.
Al día siguiente, vacía y sombría,
los traigo a la vida.

Quiero confesar mi crimen,
quise a quien no me quiso,
pienso a quien no me piensa,
dejando a mi amor propio
de muerte herido.

Soy responsable de alimentar
su ego insoportable,
soy culpable de ofrecerle
más de lo que tengo.
Mi crimen es no quererlo,
pero no olvidarlo.
Mi crimen es ver en él,
el fantasma de quien fue.
Mi crimen es verlo por quién es
y quedarme callada sobre mi cama
observando la tormenta destruir
todo a su paso.
Mirar desde lejos como camina
al precipicio con sus ojos vendados,
y dejarlo caer, para que no duela
para que no exista.
Mi crimen es mirar perpleja
como se evapora la lluvia
sobre mi piel seca.
Ver como las rocas
destrozan las olas
y quedarme inmóvil.

Quiero confesar un crimen,
cada día, muere un poco de mi debilidad,
y yo, la dejo morir.
Mi crimen es ser quien soy,
amar profundamente,
mi crimen
es mi deseo de volver a verte.
Poeta

Poemas de desamor :  Adicción
Adicta a tu indiferencia,
a tus desplantes, a tus defectos.
Soy adicta al tono de tu voz, a lo que no dices.
Soy adicta a tu recuerdo, a tu olvido.
Soy adicta a perder el control de mis pensamientos,
de mis fantasías, de mis miedos.
Necesito terapia de besos apasionados, de abrazos interminables.
Soy un árbol viejo, que solo sueña con ser trasplantado,
ignorando que es demasiado tarde.
Soy esa nube viajera que va dejando un poco de lluvia en cada parada,
que pronto ha de quedar vacía,
y desaparecerá de manera inevitable.

Soy adicta a ti,
a tu recuerdo, a tu olvido
al tono de tu voz, a lo que no dices.
Adicta a sentir lo que no sientes.
A ese sol que brilla con fuerza todos los días
y todas las noches, para darle brillo a la luna.
Soy como el sol y lo detesto
quisiera poder brillar donde y cuando quiera
dejar de darle mi brillo a la luna,
y dárselo a quien yo quiera.

¿Quisiera el sol irse de vacaciones una noche,
una vez cada 10 primaveras?

Atrapada en este ciclo monótono, rutinario
no puede haber un invierno durante la primavera
ni un otoño en el verano.
Te regalaría mareas altas
durante tu ciclo menguante
me alinearía justo detrás de ti
ocultándome de la Tierra,
ahí, justo detrás de ti.
Te regalaría mi felicidad
mientras disfruto el embriagante olor de tu cuerpo,
mientras te abrazo sin tocarte, y te beso sin los labios rozarte.

Aprovecharía la complicidad de las sombras
para enredarme en tu cuerpo y respirarte una última vez,
me iría con sigilo, con ternura y con un hueco en mi pecho.
Trataría lo imposible, lo inalcanzable
te daría mi cariño infalible, mi vida en un instante.
Todo mientras tu navegas nuevas aguas y mareas altas
y yo me quedo con mi adicción a pensarte,
a soñarte, a no entenderte, a no tenerte.
Poeta