Poemas :  TALLER MODERNO
TALLER MODERNO
(Soneto)

Por el aire del cuarto, saturado
de un olor de vejeces peregrino,
del crepúsculo el rayo vespertino
va a desceñir los muebles de brocado.
El piano está del caballete al lado
y de un busto de Dante el perfil fino.
Del arabesco azul de un jarrón chino
medio oculto el dibujo complicado.
Junto al rojizo orín de una armadura,
hay un viejo retablo, donde inquieta
brilla la luz del marco en la moldura.
Y parecen clamar por un poeta
que improvise del cuarto la pintura
las manchas del color de la paleta.
Poeta

Poemas :  SUS DOS MESAS
SUS DOS MESAS

De soltera

En los tallados frascos guardados los olores
de las esencias diáfanas, dignas de alguna hurí,
un vaso raro y frágil do expiran unas flores,
el iris de un diamante la sangre de un rubí
cuyas facetas tiemblan con vivos resplandores
entre el lujoso estuche de seda carmesí,
y frente al espejo la epístola de amores
que al irse para el baile dejó olvidada allí...

De casada

Un biberón que guarda mezcladas dos terceras
partes de leche hervida y una de agua de cal,
la vela que reclama las despabiladeras
desde la palmatoria verdosa de metal;
en rotulado frasco, cerca de las tijeras,
doscientos gramos de una loción medicinal;
un libro de oraciones, dos cucharadas dulceras,
un reverbero viejo y un chupo y un papel.
Poeta

Poemas :  UN POEMA
UN POEMA

Soñaba en ese entonces en forjar un poema,
de arte nervioso y nuevo, obra audaz y suprema.

Escogí entre un asunto grotesco y otro trágico,
llamé a todos los ritmos con un conjuro mágico,

y los ritmos indóciles vinieron acercándose,
juntándose en las sombras, huyéndose y buscándose.

ritmos sonoros, ritmos potentes, ritmos graves,
unos cual choque de armas, otros cual canto de aves;

de Oriente hasta Occidente, desde el Sur hasta el Norte de metros y de formas se presentó la corte.

Tascando frenos áureos bajo las riendas frágiles
cruzaron los tercetos, como corceles ágiles;

abriéndose ancho paso por entre aquélla grey,
vestido de oro y púrpura llegó el soneto rey.

allí cantaron todos...Entre la algarabía
me fascinó el espíritu por su coquetería,
alguna estrofa aguda, que excitó mi deseo,
con el retintin claro de un campanilleo.

Y la escogí entre todas. Por regalo nupcial
le dí una rima rica, de plata y de cristal.

En ella conté un cuento, que huyendo lo servil,
tomó un carácter trágico, fantástico y sutil;

era la historia triste, desprestigiada y cierta
de una mujer hermosa, idolatrada y muerta;

y para que sintiera la amargura, exprofeso,
junté sílabas dulces, como el sabor de un beso.

bordé las frases de oro, les dí música extraña,
como de mandolinas que un laúd acompaña;

dejé en una luz vaga las hondas lejanías
llenas de nieblas húmedas y de melancolías,

y por el fondo oscuro, como en mundana fiesta
cruzan ágiles máscaras al compás de la orquesta,

envueltas en palabras que ocultan como un velo,
y con caretas negras de raso y terciopelo;

cruzar hice en el fondo las vagas sugestiones...
de sentimiento místicos y humanas tentaciones.

Complacido en mis versos, con orgullo de artista,
le dí olor de heliotropos y color de amatista...

Le mostré mi poema a un crítico estupendo...
Lo leyó cuatro veces, y me dijo... ¡No entiendo!
Poeta