Poemas :  Tal vez de noche
TAL VEZ DE NOCHE

Una noche con la muerte de diez años,
vi las cosas equivocadas.
Cuando recuerdo tus secretos sueños,
veo danzando los olvidos.
¡Vivo, helecho, rebaño, balando!.
Un corral de ceniza, de raíz establo.
En la transparencia de los bosques.
Los dos, ciruelas, acostados.
En la playa del remedio. Deformado, dolor,
sin rostro, sin rostro. ¡Cataratas de sangre muda!.

Tal vez de noche.

Los dos secretos recuerdos.
Los dos sueños olvidados.
Del compañero, polvo mañana. Igual al mío.
Mañana, mañana. ¡Tal vez de noche, sueñe!.
En el morir. ¡Qué muero vivo!.
En el vivir. ¡De los gusanos qué ríen!.
¡Qué las mentiras decoran dulces!.
¡Cuánto Venus olvidado!. Y Marte, fornicando húmedo.
El piso sangrando auroras.
Con la danza de la lanza.
¡Los sueños son secretos!.
¡Y tus transparencias bosque!.

Tal vez de noche.

Una noche, de lágrimas cadena, vi más cosas,
equivocadas. ¡Luces retorcidas de palabras!.
¡Palabras retorcidas de luz!.
Unos ayudantes de su dios. Otros abiertos,
publicistas. ¡Del rebaño indiferente!.
¡Esclavos del perdón!. Deforme inmóvil.
En el corazón, hielo, que olvida ser.
¡Libre, agua turbia y seco desierto!.
¡Esperando!. Gratuito su edén.
Tal vez, tal vez, siempre ha sido un tal vez.

Tal vez de noche.

Dos millones. Añejos espejos. Ven las dos.
¡Dos humanidades!. Y el fracaso del diluvio.
Y glaciación. Las cavernas son distintas.
Y distintos los lenguajes.
¡Pero!. Las dos humanidades siguen iguales.
Sin mover un solo dedo, justo, hueco, diario,
que camina, que injusticias vende.
¡Un eterno esclavo de sí mismo!.
¡Un sí mismo!. ¡Qué no existe!.
Cuando recuerdo las vidas, que se han ido.

Tal vez de noche.

Las dos ciruelas y planetas.
Veo tanto secreto olvido. Tus danzas por la vida.
¡Hombre sin remedio!. Sueños de millones. Años.
¡La historia sentida!.
La involución sin sentido.
Dos secretos. Tal vez de noche.
Dos secretos olvidos.
¡Tal vez de noche, las dos humanidades!
Una noche. Con la muerte.
¡Vi las cosas equivocadas!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas de amor :  Amores saludables
AMORES SALUDABLES

Por esos ojos.
Ojos esmeraldas.
Por esos ojos esmeraldas del campo.
Cultivo y cultivo.
¡Cultivo mis desérticas memorias!.
Salud amor, amor amor, salud es.

En la profunda humedad de los cactus.
Más allá del espejismo de una hembra.
Corona, corona, corona.

¡Corona de primaveras!.
De primaveras cobaltos, corona.
Latires lunarios de áureos labios.
Por
Las... Esféricas mañanas, amor, amor.
Por
Las
Imágenes sólidas, mi amor es salud.
Salud, del corazón, alma del universo.

¡Amor, humano, amor de humano a humano!.
Amor en verdad esencia sola, una chispa infinita.
La madre de la eternidad.

Amor de terrestres destinos uno solo.
Un preludio profundo de lluvia sonrosada.
Amor armonioso de luz un espejo.
Amor virginal de los himnos.
¡Coro silencio, polvo de estrellas!.
¡Cada letra de mil alfabetos escribes!.
En la voz hechizada del rubí.
En la paz extasiada del clavel. Amor.

Eres tú como yo.
Un yo de muchos otros, hermanos yo de otros.
Amor de humanos a humanos, carne a carne.
Piel de todas las pieles, unidos y en la salud.
Saludables humanidades, amores en la unidad.

Eres el tenue palpitar de la noche.
Tierna colmena de sutiles suspiros.
¡Invisibles mis sombras amargas!.
¡Con las danza que alondra rocíos!.
¡Con la tinta que amapola colibrís!.
Del corazón apartas los velos.
Del pecho desatas la luz.

¡Amor terrenal, luz concreta!. Amor saludable.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas surrealistas :  Codorniz extinta
CODORNIZ EXTINTA

Con la luz de agrestes picos trepidando.
La noche huracanada se aglomera.
¡Armónica y granítica!.
Entre tempestad y aletazo sedienta.
Cada codorniz de dislocados vuelos.
Descubriendo cien desteñidas zonas.
¡Tez de sístoles derrumbes!.
Herméticos marismas del pantano.

Extinta codorniz extinta.

Interrogando cada vértigo designio.
¡En el mustio fluir de monolitos!.
Verticales y perplejas callaban las cenizas.
Cada dimensión inolvidable.
Con los peces delatores en cortejos.
Y las filas inconclusas de la sangre.
Bramando los inválidos sepulcros.
¡Propagando los caóticos estigmas!.

Codorniz extinta codorniz.

Compartida la desgracia brillaba.
Cataclísmicos volúmenes de lágrimas.
¡Por el exterminio denso de inocentes!.
Profundo hueco de imposibles.
Con la danza escoltada de raíces.
Combustión de ficticios ambulantes.
Por el continuo desangrarse panorámico.
¡Paralítico, desgranado y desintegrado!.

Extinta codorniz extinta.

Cada
Pérdida
Toda codorniz
Moría sedienta
Cada
Exterminio
Es inaudito.
¡Sinfónica ignición!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas de naturaleza :  Danza en la choza
Danza en la choza

La danza humilde bajo el techo
Ondeando palomilla sus alas rotas
Mece flama y luz de choza.

Pobre grillo y flor ignorada
Entre lluvia y primavera
Humilde danza.

Esa palomilla
A veces quieta y posada
Cobijo de choza, flama, grillo y flor...

Una sola nube... Un instante
En la isla la choza
Recuerda la palomilla que miró...

Alguna vez la luna
Resonando y floreciendo rotas esperanzas
¡Mirad!... Mirad su sombra...

¡Cuando labres tu sueño!
Y la danza humilde
De la choza, isla y palomilla...

Recuerda y florece esperanza
Con el sueño...

El dueño del sueño
De ésa palomilla...

Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta

Poemas de reflexíon :  Santos digitales
Santos digitales

Atrapados, los dígitos quedaron.
Electrónicos-Bellos vidrios
¡Por la sangre divina!.
De los cables. Sin órbita. ¡Fieros!.
Fierros Caos-¡Pastores de arañas!.
Muy atrapados-Sí-¡Señor deshilachado!.
Señor-De los natales-¡Males navales!.
¡Perdónales las plásticas tarjetas!.
La danza-¡Estranguladoramente libre!.
Solo son piratas-¡Huérfana alabanza!.

Cada diciembre-¡Empinados!.
La dicha-Plena-¡Les huye!.
Dígita.¡Esclava en la muñeca!.
¡Maternal estalactita!-¡Corrosiva ave!.
Nadie-Ni vegetal ni desierto.
Los quiere-¡Atrapados delirios!.
Aroma inconsciente.
¡Los dígitos de bolsillos colmillos!.
Cada mañana-¡Sedienta diadema!.
Nidos vacíos-¡Dobles jaulas amargas!.

¡Quedaron atrapados!.
Los corderos anzuelos.¡Armados peces!.
Los encristalados.¡Unicornios verdes!.
Empinados.Muy electrónicos y vacíos.
Las pesadillas retoñan.¡Fríos biberones!.
La muerte exige-¡Todo es inútil!.

¡Estas letras son demasiado pequeñas!.
Y
No
Hay
Dios. ¡Qué use lentes ni lupas!.


Autor: Joel Fortunato Reyes Pérez
Poeta