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Mi despedida sin retorno Una inspiración melancólica, Invade todo mi ser al filo de mis palabras, siento agitar mi vida entera; Es mi despedida sin retorno al amor de mi tierna juventud que por cruel cólico destino separa de mi compañía en abril adornaron infinitas primaveras. ventura mía: los soles irradien cúmulos tu porvenir los pensamientos y anhelos se cumplan, Las novedades, repletas de alegrías Abunde en su dulce hogar. los sentimientos, melancolías y añoranzas disipen en la bruma del tiempo. Mis lágrimas se conviertan en alas de bendición. ¡Flor, mía! ¡Se feliz!
Con Cariño, Esteban
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Poeta
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¡Si Me Dieras Esta Oportunidad ¡
Sería atento, cariñoso, amoroso, comprensivo, bondadoso y leal Cada mañana cuando el sol irradiará nuestro lecho nupcial, Suavemente susurraría a tus oídos. ¡Amor despierta! Tiernamente mis manos acariciarían tu melena Cariñosamente te saludaría ¡Buenos días¡ Lucharía por obcecar el amor ideal En este corto caminar de la vida Brindaría siempre mi ayuda incondicional Compartiría hasta el más prurito de mis anhelos Estaría presente siempre en tus momentos de angustia Nuestro dulce hogar sería vértice mayor de nuestra felicidad El santuario de nuestros diálogos y de nuestras reconciliaciones, Este sería nuestro sendero, nuestra búsqueda y nuestra esperanza Del más preciado de los tesoros, del más noble de los sueños ¡La felicidad ¡ ¡Si Me Dieras Esta Oportunidad, No Te Decepcionaría ¡
Con cariño, Esteban
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Poeta
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[center]Así es mi tierra
Donde la luna es más clara y brillante Donde las olas del mar Irisa fulgor a la vida Donde la bonanza de un cielo despejado Arrullan canción amor a la vida Donde el día es alegre en la bruma del tiempo Así es mi tierra. Agosto, Donde el viento alza sus alas hacia el oriente Y las mariposas vuelan dulces, alegres viajes Así es mi tierra. Cerro Ancón, Donde los pájaros al ritmo de una brisa fresca Son flautas melodiosas Que recitan glorias y benevolencia Y el amor del todo poderoso Así es mi tierra. Mar Caribe, Donde la luna emerge en la profundidad del mar Como el murmullo del plenilunio Por el horizonte más virtual y más divina Construyendo sueños plateados Así es mi tierra. Donde el sol muere en ascuas entre crepúsculos Diluyendo en el escondrijo de la noche Así es mi tierra. Donde la noche, el firmamento llena de estrellas Son capaces de mitigar las penas más agudas del día Donde la vida camina al compás de la naturaleza. Así es mi tierra. ASÍ ES MI PANAMÀ Con cariño, Esteban Mendoza
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Poeta
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Una escaramuza no es una batalla una batalla no es una guerra en una guerra no hay dos vencedores respetos guardan respetos. Lo que pasó ya se fue… a los confines del olvido nada de lamentaciones porque nada hemos perdido. Quién se mete a jugador, debe saber jugar no ponga penas en su vida que el sol siempre está alumbrando Y como Ud. verá, yo ya estoy amando. Tengo más de lo que quiero amor, calor y tiempo mejor busque abrigo temprano llega el otoño y el invierno es más duro. Delalma.
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Poeta
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Hay algo tuyo en mi suspiro hay algo mío en tu mirada aunque fundidos en eterno abrazo nos alejamos de mala gana separados por caminos divergentes.
Y sin embargo te llevo en mi piel como a una carga me llevas en tu alma como a un pegoste; divina carga, pegoste excelso: tu olor me acompaña desde siempre tu aroma me perfuma para siempre.
Hay un sesgo tuyo en la oblicuidad de mis delirios; hay un algo mío en tu tristeza tangencial. Aunque no escuches mi voz quebrada y destituida y aunque no oiga tu voz de auroras y de trinos; nos abordamos el uno al otro mutuamente en nuestros sueños que la distancia no ha vencido.
No sé en qué día encallé silente entre tus senos ni sé qué tarde me hundí frenético en tus ojos, ni sé qué hago aún varado en las orillas de tu sonrisa de magia celestial
Hay quienes dicen que soy nostálgico afligido; hay quienes llaman tristeza a mi estandarte; el melancólico me nombran mis amigos y se preocupan porque no puedo amarte y es que no entienden la profundidad de tu alma linda y desconocen la calidez de tu oceánica hostería.
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Poeta
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Del viejo que en la banca está sentado es cierto que su cuerpo está acabado mas su alma sigue siendo quinceañera y cela su alegría en primavera soñando con volar por vez primera.
Del niño que jugando está en el cieno es cierto que es muy tierno, ingenuo, ajeno mas su alma puede ser que haya vivido más siglos que la nuestra y abstraído ya tantas tantas veces ha nacido.
La joven que parece estar cantando podría sin saberlo estar llorando por causa de un amor ya tan anciano que no recuerda nada de su arcano hasta que estrecha alegre nueva mano.
Por eso yo no juzgo nunca a nadie no importa cuánto crea que me irradie su rostro, sus facciones y sus gestos, de versos que parecen manifiestos y suelen al contrario ser mampuestos.
Se ven las caras, no los corazones y nunca conocemos las lesiones que zurcen en silencio tantas almas buscando recobrar perdidas calmas debajo de las sombras de las palmas.
Se ven las caras, no los corazones tampoco vemos tantos tropezones que dan los otros con o sin razones. Tan sólo nuestra vida conocemos y ni siquiera en todos sus extremos…
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Poeta
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Las flores de vinilo con las brisas ondean sus caléndulas nocturnas blasonan herramientas taciturnas y cubren sus desechos con sonrisas.
Si tiembla este silencio de ultratumba podré tal vez oler sus clorofilas podré tal vez sentir sus mustios tallos mordiendo nuevamente el tierno labio de un sueño que no vuelve ni regresa.
Macetas sin la tierra que las nutra, semejan a mis huestes desarmadas, amurallado y vil el cielo inerme petrificado está; nada se mueve nada de nada y nada; ni las nubes que enfilan sus miradas luminosas buscando electrizar mi mano yerta.
Los pétalos ahuyentan a la vida con plástico respiro inesperado su tenue ventilar inusitado expresa muy fielmente mi pasado; pasado que es fantasma y es espectro de trozos de neuronas condenadas que plañen sus hormonas y endorfinas cual fueran las banderas de victorias; si todo lo que quedan ¡son derrotas! volando como buitres sobre dunas que cubren las espadas corroídas, las dagas, los cañones derruidos, las aves que no vuelan hace siglos, los fósiles callados del olvido y el sueño concubino del desnudo perdido y extraviado en los arcanos de un cuento fabulesco y oprimido.
Las flores de vinilo en mis balcones remembran las antiguas tradiciones que mueren en desuso por traiciones de nuevos y modernos corazones.
Lo sé, ya lo entendí voy en bajada y mi época de oro ya pasó pero es que el corazón este travieso no siente que se ha vuelto tan añejo y créese valiente quinceañero en busca de aventuras y consuelo y vida, nueva vida, vida plena…
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Poeta
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Bramidos, berridos, chillidos, aullidos; dolor que se esconde, se cela, se guarda, dolor de una noche desierta y tan parda que llora, que grita, que emite quejidos.
Los goces y sueños que yacen dormidos; la presa que espera en el salto que aguarda, la fiebre de amores, el beso que tarda y el eco disperso de tiempos perdidos.
Pedazos, retazos, recortes barridos de historias que están en perpetuo letargo dejándome un dejo cargado de amargo
y un viejo retrato que yace en la hoguera y un viejo recuerdo de antaña quimera de abrazos que fueron a mi alma ceñidos
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Poeta
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Elipse y espiral, ondulante, circular y bella Parábola hiperbólica de mis sueños paradójicos Es tu silueta un imposible de armonías deliciosas; a mi vista y a mis ojos: eres ninfa y eres musa y eres diosa, eres ancla en que se anclan mis anhelos, eres nido en que anidar mis orbes quiero, eres plancton de mis mares, de mis playas y eres luna a las mareas de mi celo.
Elipse y espiral, ondulante, circular y bella Poliedro que amotina mis pasiones y deseos Es tu figura un increíble de acordes melodiosos y de diáfanas y nítidas sesiones musicales: eres diana en que despiertan los rumores de mi aliento, eres alba en que despliegan los colores de mi vida, eres selva en que se nutre mi más preciado viento, y eres brisa en que se mecen todos mis sentimientos
Hay pirámides eternas resguardando el rojo cáliz de tu pecho Hay tesoros escondidos en la jungla pequeñita de tu vientre Hay frenéticos deseos de mi piel por sembrarse en tus vergeles y hay silencios despiadados arrastrando mi futuro muy muy lejos de tu lado…
Elipse y espiral, ondulante, circular y bella: en tus curvas mi esperanza se acurruca y se refleja pero eres tan lejana cual la más lejana estrella
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Poeta
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Una novela de amor quedó prendida, en los muros de nuestra habitación ebrio de amor y dolor, allí amanezco cada día, sólo para besar… tu fotografía. Las calles llenas de ilusiones mustias con bucólica indiferencia miran… el paso sosegado de mi andar, ya no llevo prisa, llevo tu recuerdo. Mientras voy curando viejas heridas de amor me llega un bisbiseo… te diviso, te busco… y solo hay viento, con arrítmica abulia, sigo mi camino. El manto de la noche envuelve la villa y yo sigo en el huerto aquel acariciando nuestros nombres en el árbol , donde te di el primer beso. Tú no vuelves… pero siento tu presencia, ¡y vuelvo a ser feliz… y vuelvo a sonreír!... sólo para volver a despertar… huérfano de ti, de tu amor y de tus besos. ¡Que te olvide!... me exige la razón! pero... ¿¡cómo te saco de mi corazón!? · Delalma
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Poeta
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